Los personajes de Naruto no me pertenecen. Son propiedad de Kishimoto. Yo solo los utilizo para escribir sobre ellos sin ánimo de lucro.

Bueno jeje, decidí no colgar este fic hasta que no lo hubiera terminado, pero como llevo cinco capis y veo que va para largo, me he dado un plazo de un mes, ya que lo iré actualizando semanalmente, es decir, todos los jueves n.n La idea de este fic me vino correlativa a la que tuve para el yonita, la trama central es mas o menos la misma jeje, solo cambia el ambiente, los personajes y las relaciones entre ellos. Esta centrada en Konoha y la verdad no se cuantos capis serán, lo que si os digo es que tengo toda la trama en la cabeza, desde el principio del fic hasta el final, ya se como acabará y todo XD. No tengo mucho más que decir y aunque el principio este algo confuso por favor seguid leyendo y os enteraréis. Una última cosa y la principal, este fic esta echo exclusivamente para Tabe-chan, mi hijita adorable XD tendría que haber sido por su cumpleaños pero a falta de tiempo le hice un oneshot a la espera de este fic, así que ya sabes preciosa, todo tuyo.

CAPI 1: FUTURO Y PRESENTE

Un hombre corría a través de las llamas, veía como toda la torre Hokage empezaba a derrumbarse. Su corazón comenzó a latir rápidamente, tenía miedo, mucho miedo, aunque no por él si no por las dos personas que llevaba agarradas en cada una de sus manos. Siguió corriendo acelerando el paso, esquivó un trozo de madera ardiendo que había caído del techo para rodearla y seguir el camino. Estaba cansado, ese no podía ser el final, no para ellos.

Observó por la ventana como la gente chillaba y era asesinada a sangre fría, era una visión horrenda y él aunque estaba ahí no podía hacer nada. Sabía que estaba actuando egoístamente, pero primero eran ellos, antes que todos los demás. Cuando por fin llegó a la sala que buscaba, abrió la puerta de una patada y lanzó a los niños al centro del círculo que había en ella.

-¡Quedaos ahí!-, ordenó mientras efectuaba unos difíciles sellos.

Cuando terminó plantó las palmas de las manos sobre el borde del círculo y este comenzó a brillar, naciendo de él una columna brillante que atravesó el techo y ascendió a los cielos.

Los niños estaban asustados, para que negarlo, ni la mirada cálida de aquel hombre bastaba para calmarlos. El mayor que rondaba unos doce años se levantó directo a salir del círculo, el bocinazo que recibió para impedirlo lo dejó clavado al suelo, provocando que agarrara a su hermano y lo abrazara.

-Déjanos ir contigo, por favor…-, suplicaba nervioso, con su cuerpo agitándose visiblemente. El hombre volvió a negar con la cabeza, -por favor…-, volvió a pronunciar notando como ambos cuerpos empezaban a elevarse por la columna brillante, -por favor… por favor…-, pedía una y otra vez, con los ojos llenos de lágrimas.

Mientras veía a los niños subir se intentó tranquilizar, estarían a salvo, era la mejor opción, estaba seguro. Sus súplicas le partían el alma, dios… cuanto dolía. Pero no podía hacer nada, absolutamente nada.

-Cuando lleguéis preguntar por mí, hacedlo que os juro que estaréis protegidos hasta que pueda volver a traeros de vuelta ¡cuidaos mucho y sobre todo, alejaos de esa persona!-, grito ascendiendo una mano inconscientemente para tocar la del niño mayor, que aun se resistía.

-Por favor… no nos alejes de ti…-, rozaron las puntas de sus dedos, tomando entre sus manos una cadena con algo colgando en ella, de golpe se separaron, comenzaba a volver a elevarse, -por favor… por favor… ¡papá!-, chilló justo antes de desaparecer.

En ese momento la sala comenzó a derrumbarse. Intentó salir pero una viga de madera se había puesto en su camino. A su alrededor todo era jalones de fuego, en un mal movimiento se quemó la tela de su capa, tuvo que rajarse la manga y echarla al suelo para apagarla. Sudaba escandalosamente, tenía que salir de allí, por sus hijos, tenía que hacerlo. Corrió hacia las ventanas, cuando el techo empezó a precipitarse sobre él. Levantó las manos sabiendo que aunque estrellara contra la ventana el trozo de madera el viento provocaría que el fuego aumentara. Suspiró y una ráfaga de viento desvió el golpe, pero no la bola de llamas que se había creado y viajaba directa hacia él.

De repente sintió su cuerpo frotar como si alguien lo estuviera cogiendo. Se vio precipitado al vacío por la ventana que anteriormente había roto, cayendo sobre los arbustos que había debajo de la torre.

El hombre que lo había salvado comenzó a agitarlo, su mirada estaba angustiada y el temblar de sus labios demostraba que se le estaba haciendo demasiado difícil pronunciar lo que fuera a decir.

-¿D-donde has llevado a los niños?-, preguntó clavándole los dedos en los brazos. Apretándole con tanta fuerza como para destrozarlo.

-¡Te lo dije!-, chilló intentando contener las lágrimas, -no podía permitir que les pasara nada, los mandé al pasado-, de repente un puño se estrelló en su cara y cayó al suelo con el labio partido.

-¡También son mis hijos!-, lo agarró del cuello de la capa para levantarlo del suelo donde momentos antes lo había tirado, -por muy Hokage que seas tenía derecho a decidir sobre nuestros hijos-, intentó calmar la voz…, -ya se lo que ocurrió con Kyo ¡siempre lo he sabido!-, gruñó dándole un empujón para separarlo de él.

No podía creerlo ¿Cómo se había enterado? ¡no… no podía ser!

-Yo… no pude evitarlo… Sa… Sa…-, la voz casi no conseguía salir de su garganta, le faltaba el aire, todo aquello… en aquel momento… ¡era superior a él!

El otro se volvió y lo señaló, con la expresión más terrorífica que nunca le había visto.

-¡Ni me nombres! He estado soportando muchos años, no quería darme cuenta… y mira… mira lo que ha hecho tu amante ¡míralo!-.

Su cuello palpitaba, su mente le ordenaba matarlo, aunque fuera su marido, la persona que más amaba, pero… pero… ¡lo había traicionado! Tenía que acabar con él… tenía… que hacerlo desaparecer….

-No, espera… yo te lo puedo explicar… por favor… estamos hablando de mí, sabes que yo… con él… no…-.

-Tu… y ese bastardo… traidores… yo dejé mi venganza por ti… por nuestro hijos… y después tu… tu… -, respiró hondo y después lo volvió a mirar, con un brillo rojizo en los ojos que le impactó, -¡tú te acostaste con él!-.

De pronto se levantó un aire violento, que empezó a azotar todo el lugar al igual que elevaba las llamas. Konoha estaba siendo destruida. Al lado de ambos, con una sonrisita arrogante, alguien llegó.

-¿Estáis hablando de mí…?-.

El rubio se tensó y observó como su peor pesadilla estaba allí, de pie, frente a él…. El pánico comenzó a recorrerle todo el cuerpo, era verlo y sentir como su vida se iba, como en aquel momento, ese momento en que creía que moriría y lo separarían de su familia. Era terror, horror, pavor, no había palabras en el mundo para describir lo que sentía, como su corazón se encogía, como dolía su pecho. Se echó la mano al corazón y comenzó a respirar aceleradamente, colocándose por instinto detrás de su marido.

Sasuke también temblara, pero era de ira. Quería venganza y la tendría… no… estaba vez no le arrebataría a su segunda familia, antes muerto que verlo escapar victorioso de nuevo.

-Esta vez… Itachi… ¡morirás!-.

Chillidos, explosión, un grandísimo humo negro que barrió toda la zona. La luz y la oscuridad.

--

Un Naruto con sus 16 años, corría como alma que llevaba el diablo por las ramas que circundaban el final del bosque de Konoha. Era su última oportunidad para traer de vuelta a Sasuke, ya solo le quedaba una sola cosa a la que acudir para convencerlo. Aun recordaba fresca, la conversación que horas antes había mantenido con la Godaime. Su cara enrojeció y sacudió la cabeza para olvidarla, aquello era tan bochornoso ¿como podía hacerle esa clase de proposición a Sasuke? ¿Aceptaría? No… se reiría más bien, un hijo ¡por dios le iba a proponer tener un hijo!

-FLASH BACK-

El rubio plantó las manos con brusquedad sobre el escritorio de la Hokage, la miraba como si fuera un extraterrestre ¡definitivamente esta mujer se había vuelto loca!

-¿¡Pero que me estas contando, Tsunade-baachan!? ¡Soy un hombre, yo no puedo tener hijos!-, gruñó mientras se dejaba caer de nuevo en la silla, se tocó la frente y se la masajeó, aquello era de locos.

La Godaime se encogió de hombros y levantó una mano mientras le explicaba. Su rostro era sereno, hasta se podría decir que dejaba ver de vez en cuando una sonrisita picarona. Naruto tenía un escalofrió cada vez que la mirada.

-Escúchame… Naruto-, este entornó los ojos mirándola fijamente a la cara, -los jinchuuriki pueden tener hijos, da igual si son hombres o mujeres-.

-Venga ya-, se rió el rubio, buscando graciosamente donde estaban las cámaras.

A Tsunade casi le revienta la vena de la frente, levantó el puño para amenazarle con un puñetazo si no se quedaba quieto. Causando el efecto que esperaba, Naruto se revolvió en la silla y tragó saliva, o le hacía caso o salía de allí directo al hospital. La rubia suspiró.

-Mira…-, pensó como explicárselo lo más fácil posible, -los bijuu no pueden aparearse entre ellos, su constitución no se lo permite, así que se reproducen a través de sus contenedores-, el rubio asintió con firmeza, -entonces, ellos mismos se ocupan de incubar al niño, por eso da igual si eres hombre o mujer. Aún siendo del sexo femenino, el niño no se crearía en el aparato reproductivo de la mujer, si no en el interior del bijuu ¿entiendes?-.

Naruto puso una mano en la barbilla y carita pensativa, arrugó el entrecejo y cerró los ojos, concentrándose. Después de uno segundos levantó un dedo como para decir algo inteligente.

-Es decir que… Kyubi haría de mama de alquiler ¿no?-, Tsunade casi se cae de la silla, respiró hondo y tuvo que asentir con la cabeza, más o menos esa era la idea, de repente el Uzumaki volvió a comentar algo, -entonces… si el "ovario" lo pone Kyubi y el esperma… bueno… "Sasuke"-, se rascó la nuca algo avergonzado por la idea, -yo… ¿que tengo de ese niño? ¿no sería hijo de Sasuke y Kyubi?-. (madre mía XD)

La pobre Hokage volvió a suspirar, creía que le haría menos preguntas, ahora tendría que explicárselo todo, y lo más difícil era que tenía que buscar una forma sencilla para que hasta un niño de teta lo entendiera.

-A ver…-, se masajeó la sien, -Kyubi no tiene un cuerpo físico, así que… todo lo que cree será a partir del tuyo, ese niño será de vosotros dos-.

-Pero… ¿y él que gana dándome un hijo a mí y a Sasuke?-.

Una sonrisa maliciosa apareció en el rostro de Tsunade, lo miró fijamente con esos hermosos ojos y comenzó a mover los labios.

-Pues…-.

-FIN DEL FLASH BACK-

Naruto tuvo otro escalofrío al recordarlo ¡oh dios mío, donde se estaba metiendo! Estaba tan sumergido en sus propios pensamientos que no se percató de que dos personas caían del cielo, justo delante de él. Pudo apreciar que eran dos niños, el mayor cogió al pequeño y lo apretó en su regazo, mientras caían entre las ramas de los árboles, si se estrellaban contra él suelo morirían seguro.

Naruto corrió y rodeó la cintura del mayor, en el mismo instante se sujetó con la mano derecha de una rama para poder sostener el peso de los tres cuerpos. El niño ascendió la vista al sentir como lo apresaban y lo miró a la cara, la expresión de sorpresa que tenía le había echo que estuviera a punto de dejarlo caer de nuevo.

El rubio se balanceó un poco y dando una vuelta sobre sí mismo, volvió a subir a la rama, dejando a los dos niños junto a él.

-¿De donde habéis caído vosotros?-, pasó la mirada por ambos pequeños, le resultaban parecidos a alguien, pero ahora no caía.

-Jejeje-, rió el mayor de ellos, -bueno esto… caímos del suelo ¿¡no te distes cuenta, ttebayo!?-.

La cara de gilipollas que se le había quedado a Naruto era digna de verse, aquel… aquel… ¡aquel crío hablaba como él! Sin darse cuentas y a falta de palabras para explicarse ambos se rascaron la cabeza y empezaron a reírse tontamente. Cuando el Uzumaki se dio cuenta de que parecía estar mirándose en un espejo, dio un paso hacia atrás. Aquello era un broma ¿cierto? Primero lo de tener un hijo y ahora esto ¿seguiría durmiendo y estaba en una cruel pesadilla? (cruel? Que exagerado UU)

Antes de que pudiera hablar la voz del más pequeño lo sacó de sus pensamientos.

-Está cerca…-.

Naruto curvó la cabeza y se quedó mirando al crío.

-¿Qué está cerca?-, le preguntó… pero este seguía mirando hacia esa dirección, sin siquiera volverse, como si no existiera nada más que él.

El mayor, se rió por la cara que tenía el Uzumaki. Todas las personas que no conocían a su hermano se quedaban igual, aunque él ya estaba acostumbrado.

-Otö-chan, no pasa nada, él es así, va a su bola… como si no se diera cuenta de lo que hay a su alrededor-, se quedó pensativo intentando recordar la palabra, -creo que Tsunade-sama dijo que era au… au…-, arrugó la frente intentando recordar, -autis… ¡autista! Eso es jeje-, sonrió.

El rubio levantó una ceja y miró hacia atrás, después para los lados, finalmente se señaló a sí mismo.

-Aquí no hay nadie más ¿me has llamado Otö-chan a mí?-, preguntó con la misma cara de gilipollas que antes XD

El moreno inclinó la cabeza como si aquel que tenía delante de sí fuera realmente estúpido ¿pero es que aun no se había dado cuenta? ¡si eran clavados a sus padres! Suspiró y se encogió de hombros, decidió seguir con la conversación.

-Si bueno… al principio empecé llamándote oka-san, pero tú te ponías como una fiera, así que acordamos que serías Otö-chan y Sasuke Otö-san-, explicó como tal cosa.

Naruto tuvo que sostenerse en un árbol para no caerse de la rama en donde estaba. ¿Aquellos niños estaban diciendo que eran hijos suyos y de Sasuke? Sin poderlo evitar comenzó a reírse, aquello estaba claro que era un broma, seguramente en cualquier momento saldrían Kiba y Shikamaru partiéndose el carajo. Pero por mucho que esperó allí no había nadie más que ellos. Se tocó la frente y no se le ocurrió otra cosa que preguntarle.

-Decidme la verdad… ¿quienes sois?-, la voz le temblaba, estaba demasiado nervioso.

El mayor sin dejar de mirar con el rabillo del ojo a su hermano para saber que estaba haciendo, se acercó al rubio y le sonrió. Orgullosamente se puso el pulgar en el pecho y lo soltó todo claramente.

-Me llamo Uchiha Ritsuka, soy el primogénito del Clan Uchiha, y él-, señaló al más pequeño, -se llama Kyo, es el segundo-.

Naruto se llevó las manos a la cabeza ¿¡Qué!? ¡¿Primogénitos de qué!?

-Espera…-, pidió intentando comprender toda aquella información, -me estáis diciendo que sois mis hijos y los de Sasuke ¿no?-, Ritsuka asintió mientras el Uzumaki intentaba respirar hondo, después… estalló, -¿¡como vais a ser mis hijos!? ¿¡cuando os he parido yo!?-, soltó cogiéndolo de la camiseta y zarandeándolo.

-Otö-chan tranquilízate o Kyo se va a enfadar-, dijo cuidadosamente el moreno.

Naruto levantó la vista hasta el más pequeño, que tendría unos 7 años, el mayor 12. Cuando lo observó se quedó sin palabras, este lo contemplaba de reojo con esa afilada mirada negra que lo hacía estremecer ¡por dios era solo un niño de siete años! Pero había algo en él que te ponía rápidamente en alerta.

-Ok… vamos a ver…-, el zorrito se separó de él y se arrepintió de haber sido tan brusco, le había roto la parte de arriba de su camiseta de red, cuando fue a ponérsela bien sus ojos casi se le salen, -oh… no… imposible…-, comentó separándose con cara de pánico.

Ritsuka se miró el cuello y se sacó el colgando de debajo de la camiseta, mostrándoselo.

-¿Es esto lo que miras? Normalmente siempre lo llevas tú pero… cuando decidiste traernos al pasado para protegernos me lo distes, no se para que sirve pero por algo me lo tuviste que entregar-, comentó mirando melancólicamente las tres esmeraldas.

-¿Me estas diciendo…-, respiró hondo y se volvió a acercar a él, -que soy tu padre al igual que Sasuke, que venís del futuro porque yo os he traído y que ahora tengo el deber de cuidaros?-, preguntó con los ojitos en espiral, se iba a volver loco.

Antes de que Ritsuka pudiera asentir, sintieron un fuerte chakra a sus espaldas, era Kyo, que estaba resistiendo uno de sus malos síntomas.

-Mierda… mierda…-, soltó el moreno mientras se acercaba al pequeño, -le esta dando un nuevo ataque…-, estiró del brazo de Naruto y lo llevó a rastras con él, -Otö-chan tienes que sujetarlo o se hará daño-, le comentó mientras observaba como el chakra dorado comenzaba a extenderse a pasos agigantados.

Kyo tenía los ojos tan dorados como su chakra, sus uñas estaban afiladas y sus colmillos empezaban a asomarse, de repente aquellas burbujas de oro formaron una cola, que se agitaba de un lado para otro. Repetía una y otra vez…

-Está cerca… lo siento… está cerca…-, su cuerpo temblaba, sus huesos crujían, era demasiado poder para un niño pequeño, estaba por destruirse a sí mismo.

Naruto lo agarró por la espalda y intentó retenerlo entre su regazo. El pequeño pataleaba y gruñía, su cuerpo amenazaba con cambiar al de una fiera, levantó las manos para enterrar las uñas en los brazos del padre, empezando a rajarlos de arriba abajo.

-Kreus… ¡Kreus!-, chillaba Ritsuka, intentando llamar la atención de Kyo, cuando el niño se volvió este se colocó delante y lo agarró de las manos para que lo mirara, -Kreus, déjale en paz ¡no le atormentes!-.

El Uzumaki no daba crédito a lo que estaba sucediendo. De repente el pequeño comenzó a respirar más pausadamente, sus ojos pasaron de un dorado brillante a un rojo intenso, formando el Sharingan con dos aspas para después, inmediatamente desmayarse. Cuando se hubo calmado el zorrito suspiró. Joder… vaya papelón que tendría cuando tuvieras a estos dos diablos.

Ritsuka sonrió cálidamente y le pasó una mano por la mejillita a Kyo, acariciándole con suma ternura. Naruto quedó paralizado. Observó a ambos niños y le pareció la escena más hermosa que nunca había visto. Entonces fue cuando se permitió por primera vez analizarlos de arriba a abajo.

El mayor, era igual que Sasuke, puede que un poco más robusto, eran idénticos menos los ojos, que tenía los suyos, grandes y azul cielo. Lo que si cambiaba era el carácter, ni a lejos se parecía al del Uchiha, este se parecía mas bien al suyo, hasta en algunos gestos y palabras, no supo porqué pero se sintió muy orgulloso de su hijo… ¿hijo? ¿tan pronto se había acostumbrado a esa palabra? Sonrió mientras sacudía tranquilamente la cabeza y ahora contempló al menor de ellos. Este era infinitamente más difícil de describir. Tenía que reconocer que era igual que él cuando tenía 7 años, sin embargo, sus ojos eran afilados y negros, como los de Sasuke. Aún no entendía que era eso de autista, pero sería lo primero que le preguntaría a Tsunade cuando volvieran a Konoha… espera un momento… ¿volver?

-Ritsu-chan-, llamó Naruto para que su hijo mayor le prestara atención. El morenito levantó la mirada y le sonrió al escucharle llamarlo de la misma forma que lo hacía en el futuro, -tenéis que ayudarme a convencer a Sasuke para vuelva a Konoha ¿me acompañáis?-.

-Por supuesto-, afirmó, -vosotros os amáis, dattebayo, seguro que vuelve, mi Otö-san me contó que lo hizo por ti, le pareció demasiado tentador poder tener hijos y formar una familia, también que le demostraste ser lo bastante poderoso como para tener ese privilegio, ya que ser su esposa no era algo que todo el mundo pudiera aspirar-, comentó muy seguro de sus palabras.

Naruto agachó la cabeza y una vena apareció en su frente… ¿esposa…?

-Así que… me tengo que sentir honrado ¿eh, Sasuke-teme?-, respiró hondo antes de gritar con todas sus fuerzas, -¡será cabrón!-.

--

Si bueno, este fic tiene de todo XD humor, pedacitos tiernos, acción, angustia, si es que… UU

¿Qué os ha parecido? Ya se que es cortito pero como lo voy a actualizar todas las semanas no los puedo hacer tan grandes UU pero con este fic, si tiene buena acogida, me comprometo a seguirlo todos los jueves hasta que lo acabe, vamos lo juro XD, aunque claro… mi sueño sería tener por lo menos diez review en cada capi ToT yo por favor, un poquito de apoyo, que estoy algo depre últimamente UU

Para quién no se haya enterado, la primera escena es del futuro, cuando trajeron a los dos niños, y ya la segunda es la llegada de ellos XD, puede que haya sonado rápida pero que queréis? Que ponga a los niños persiguiendo a Naruto tres meses hasta que reconozca que son sus hijos y vienen del futuro? No he podido alargarlo mas que eso, pero mas o menos quedó bien no?

La descripción de la ropa de los peques la pondré en el capi próximo, que aparecerá Sasuke para no marcharse mas del fic XD Sobre que Kyo sea autista, no es eso exactamente, pero lo explicaré más adelante n.n

Tiene muchas sorpresitas, así que me gustaría oír opiniones por si alguien es capaz de ir adivinando que va a ocurrir a continuación, si alguien se acerca lo diré en los comentarios del próximo, prometido!

Las parejas serán, Sasunaru, Saisaku e Itadei, también habrá un poquitín de Sainaru e Itanaru, pero casi nada.

Estoy realmente nerviosa, Tabe-chan lo sabe, me esta haciendo el dibujo de los críos para que veáis como son y la he amargado hoy, bueno, que sea lo que dios quiera, review porfis ToT