Otra pequeña historia, no he estado muy inspirada para una larga ni he tenido el tiempo, pero siento que con esta pequeña historia es suficiente por el momento, por lo menos hasta que se me ocurra algo mejor xD
Ojala y les guste (;

Fairy Tail le pertenece a Hiro Mashima c:


Sollozaba mas y mas conforme escuchaba los gritos y golpes de la batalla. De nuevo no podía hacer nada, solo sentarse, llorar y esperar a que todos estuvieran bien, mientras ellos luchaban por sus vidas y por la de ella.
Siempre se prometía entrenar mas para que no sucediera esto, pero siempre había una vicisitud para no hacerlo.

No sabía que hacer, si verlos luchar y saber que ella no podía ayudar o dejar que las lagrimas le impidieran ver lo que sucedía.
Cerró los ojos, las lagrimas ya no la dejaban ver, y en esa fracción de segundo todo termino. En cuanto volvió a abrir los ojos, solo distinguía humo y un punto rosa en la lejanía.

Comenzó a temer por todos ellos, pero un lado de ella solo le hizo preocuparse por él, solo él, a quien más amaba, y lloro amargamente temiendo por su vida.
El punto rosa se hizo mas visible, poniéndose frente a la muchacha rubia que lloraba.

-¿Por qué lloras Lucy? Hemos ganado.-

Reconoció la voz frente a ella, era él, había triunfado en la batalla. Volteo a verlo, pero la luz tras el le hacía difícil reconocerlo, tomo sus últimas fuerzas y se levanto para estar casi a su altura, ahora lo distinguía con mas facilidad.
Tomo entre sus manos su rostro para asegurarse de que no era una visión o un fantasma el que le hablaba, paso sus manos por su cabello, lo abrazo y lagrimas de felicidad brotaron de sus ojos. En realidad era él, seguía vivo y a salvo.

-¿Por qué sigues llorando?
-Lo siento...estaba preocupada por todos...yo nunca puedo pelear a su lado hasta el final...soy débil y...
-No lo eres, aunque no estés con nosotros peleando hasta el final, sigues apoyándonos de lejos.
-Eso no cuenta.- sollozo con fuerza Lucy.
-Para mi lo hace. Verte y pensar en que necesito protegerte me es mas que suficiente.
-Me hace ver débil eso.
-No lo hace, nunca huyes aun cuando deberías, eso es bueno.
-Tal vez tengas razón Natsu.
-Claro que la tengo.
-Pero ¿por qué piensas que debes protegerme?
-Porque...te quier.- dijo el pelirosa mientras se sonrojaba.

Lo abrazo con fuerza al igual que Natsu la abrazaba también.

-Yo también te quiero, es por ello que siempre espero por ti, para ver que sales sano y salvo, y poder regresar a casa juntos.- menciono Lucy mientras lo abrazaba de nuevo, acabando con un rápido beso en los labios, para volver a su abrazo anterior. Natsu solo sonrió al ver que por fin la tenía entre sus brazos, ambos sanos y salvos.