Holaaaaaaa
Bueno ando de nuevo escribiendo fanfics sobre mi pareja favorita, espero que les guste. Esta sera una historia de dos episodios...
Sin mas no los entretengo mas...
Disfruten...
Viernes en la noche, una estrellada y silenciosa, en el complejo de apartamentos encima de una colina en la ciudad de Tokyo. Concretamente en el apartamento no. 1202, cuyo inquilino es Onodera Ritsu, un joven de 26 años de edad, y actualmente editor en Marukawa, quien por fin de una jornada dura, de más de 8 horas en el departamento de las doncellas, se encontraba en su cama, tapado hasta las orejas, aparentemente la ducha que tomo al llegar del trabajo y la cena lo orillo a dormirse temprano de lo habitual, estaba tan cansado que sentía que si seguía luchando contra esto, seguramente volvería a colapsar como algunos meses atrás. Así que sin percatarse de que su ventana quedo media abierta, que una pequeña brisa se colaba, y muy a su pesar del chico la frazada de su cama no era acogedora.
-Mmm tengo frio, pero no quiero levantarme a cerrar la ventana…ummm quisiera tener una cobija…-murmuro dormido el ojiverde
Y en unos instantes se quedo profundamente dormido, asi que no era raro que comenzara a soñar.
De repente Onodera se percibió acostado en una suave cama, se sentía muy agosto ahí, no hacia frio y la frazada era calientita.
-Ah, qué bien se siente~-se dijo para sí.
-ohh~ y apenas estamos comenzando…. —musito una voz sexy al oído de Ritsu. El aludido abrió los ojos muy grandes, conocía perfectamente esa voz un tanto burlona. Y se levanto de repente.
-¡TAKANO-SAN!...—grito el uke sentándose en la cama-¡QUE DIABLOS HACES EN MI HABITACION!
-Que molesto…—se quejo, ya que prácticamente le grito casi en su oído y sentándose también-…esa pregunta debería hacértela a ti…
-¡Eh!, ¡ah!
Entonces se percato de que se hallaba en el cuarto de su jefe.
¡¿Cuando llegue aquí?!
Estaba en estado de confusión, no sabía si había soñado que llegaba a su apartamento y se tiraba en su alcoba o se levanto dormido y fue al hogar de su jefe, esto último era poco probable. Takano entonces se le acerco y lo beso apasionadamente, al tiempo que lo sujetaba de sus muñecas para que no escapara, para luego tumbarlo en la cama. El beso era profundo y estaba por dejarlo sin aire, la lengua de su primer amor exploraba toda su boca e instaba a su propia lengua a moverse sensualmente. Inesperadamente Takano comenzó a mover sus caderas para frotarse contra pelvis de su uke, quien ya tenía desabrochado los pantalones, exponiendo su bóxer azul marino.
Dejaron ambos chicos de besarse para poder tomar oxigeno, con sus brazos impedidos a cada lado de la cabeza de Onodera, este se sentía indefenso, además de aquel frote en su parte baja estaba provocando que su hombría respondiera.
Takano-san está siendo más directo que de costumbre…
Masamune entonces regalo pequeños besos cortos por el cuello de su uke, lamiéndole su oreja de vez en cuando. A pesar de las atenciones el novato de "Esmeralda" luchaba un poco por no gemir y dejarse llevar, cerrando del mismo modo los ojos.
-Ritsu…-lo llamo con un tono ronco-¿Ahora vas a admitir que me amas?
-¡Que, por supuesto que no!..—contesto en el acto, no sabía de donde salieron esas palabras.
La mirada de editor en jefe se entristeció unos segundos, solo Onodera pudo percibirlo y se reprimió a si mismo por haber dicho algo así, y se corrigió
-ettooo…veraz…yo aun no…
Takano ya no lo escucho, libero los brazos de su prisionero y comenzó a quitarle al ropa, primero la camisa de su pijama, después los pantalones con todo y ropa interior, su habilidad y rapidez dejaban sin palabras a su pareja.
-Espera…Takano-san…no es justo…solo yo…
De nuevo sus palabras eran contradictorias.
¿Qué diablos estoy diciendo es como si alguien mas pusiera palabras en mi boca?
Y como si Masamune leyera su mente, se quito la ropa también dejando ver por Ritsu, la dulce luz de la luna que inundaba el lugar, le permitía al Uke admirar cada rincón del seme…
Un desnudo Takano se acerco al ojiverde y lo insto a que lo tocara en su miembro, obedeciendo la orden comenzó el movimiento incorporándose para poder ver el espectáculo, el novato de "Esmeralda" no se creía es como si su mente se hubiera desconectado y solo su cuerpo reaccionara, es mas había comenzado a ver todo como espectador a través de su ojos.
Esto es demasiado erótico
-Ahora te toca a ti…-musito el editor en jefe a su subordinado, de forma sensual, que hizo que se le erizara hasta el último cabello.
El color rojo corrió por el rostro del Uke, como en cámara lenta miro a Takano acercarse a su intimidad ya erecta, podía sentir el aliento en esa zona, y la cálida boca abriéndose para tomarlo.
Los latidos de corazón se estaban intensificando, cuando de pronto escucho un ruido sordo en la pared.
El sueño termino.
Onodera despertó, su mente reacciono, el chico se incorporo de la cama y se percato que estaba en su cuarto, en su apartamento, se reviso a si mismo y estaba vestido, Takano no estaba y todo era normal
-Un sueño…-susurro, tocando su cabeza con su mano izquierda, estaba desconcertado, había sido tal real -¡POR QUE TUVO QUE SER UN SUEÑO COMO ESE Y CON TAKANO-SAN!..-se reprendió a si mismo, en ese mismo instante se cuenta de algo que no podía poner peor la situación, su entrepierna estaba abultada, poso su mano para inspeccionarse a si mismo.
Si sus sospechas eran ciertas, se excito con el sueño, específicamente como no hacerlo, si…si fue un ¡Sueño Húmedo!
-Sera mejor que vaya al baño a encargarme de esto…-comento el ojiverde, era vergonzoso estar en ese estado, aunque la buena noticia es que estaba en su casa sin que nadie lo viera asi.
Maldijo mentalmente a su jefe, aunque no tuviera la culpa en ese momento, empero que su imagen lo pusiera en ese estado era algo para odiar algunas veces.
Entretanto en el apartamento 1201, cuyo inquilino era el objeto de todas las quejas de Onodera, Takano Masamune estaba en una situación parecida. Se acababa de despertar y ahora estaba en su baño tenia que "ayudarse a si mismo", ya que, hacia algunos minutos paso el siguiente escenario:
Hacía rato que se había dormido en su propio sofá en el salón principal, estaba ocupado revisando algunas propuestas de sus editores que tenían que estar corregidas y devueltas a sus autores el lunes, además de checar sus propios manuscritos y hacer las correcciones necesarias y para "coronar" la historia de una de sus mangakas estaba llegando a su fin, tenia que cuidar que el desenlace fuera como lo planeado desde el principio de la historia y se "ataran todos lo cabos sueltos".
Con tantas cosas pendientes por hacer, y con una jornada cargada durante todo el día, el editor en jefe termino todo en tiempo record, no obstante esto trajo sus consecuencias, mas cansancio, y a pesar de que se detuvo solo a descansar un poco, antes de ordenar un poco los papeles expuestos en su mesa de trabajo, con solo cerrar los ojos y apoyar su cabeza en el sofá cómodo y suave fue suficiente para quedarse dormido.
Y precisamente tuvo un sueño muy bueno, en donde Onodera llamaba a su apartamento, preguntándole sobre su propuesta.
Lo vio ahí dentro del genkan, en el salón, donde lo insto a tomar asiento, cada vez que observaba detenidamente a novato admiraba su típica actitud en quería aprender siempre.
-Takano-san, ¿La propuesta…?
-Si, no hay ningún problema en la redacción y ortografía, eres objetivo y tienes muy en claro que quieres lograr con la promoción, pero tienes que dar mas explicación en como vas a lograr el impulso del nuevo tomo de Saitou-sensei. Piensa en algo mas haya de una firma de autógrafos, debido a que eso ya lo hiciste…
El novato bajo la cabeza, y un leve rubor apareció en sus mejillas, estaba avergonzado de no ser capaz aun de hacer una propuesta correctamente, sin torturarse por ello.
-Pero, solo piensa en que podría interesarle a los jóvenes lectores y listo. No es algo complicado.—explico, encendiendo un cigarro que saco de su bolsillo del pantalón.
En un movimiento rápido, el novato se levanto y arrebato el cigarro de la boca de su jefe, algo muy raro en el joven.
-Lo siento. Es malo para la salud, Takano-san…-dijo un poco apenado ante la confianza con que actuó contra Masamune-…siempre me dices que cuide mi salud, que coma saludablemente y duerma lo suficiente, así que te digo que tienes que dejarlo…ya que..
-¿Estas preocupado por mi?
Eso si que impresiono al uke, se dio cuenta que hablo de mas.
-Solo…solo… pienso que seria muy grave que te de cáncer en un futuro, es una enfermedad horrible…
Takano se puso de pie, revolvió los cabellos del ojiverde y luego lo besos, comenzó a acorralarlo contra la pared, a pesar de Onodera uso sus brazos empujando el pecho de Masamune para tratar de apartarlo en todo momento, además de tratar de romper el beso.
El editor en jefe empezó a besarlo detrás de la oreja y cuello del uke.
-Takano-san~ espera…no…-exclamo un poco agitado y forcejeando
-Tus palabras son las únicas que se niegan…estoy seguro que tu…
Takano lo volvió a besar de una forma apasionada, entrando con toda la pasión del mundo dentro de la boca de su pareja.
De un momento a otro el uke dejo de forcejear y pelear, abrazo a su seme muy fuerte como si se aferrara, como disfrutando el momento. Si bien este cambio repentino en el comportamiento de Onodera, contrario a Takano, a causa de que el joven heredero era tan terco y no se dejaba vencer tan fácilmente, esta noche era la primera vez que lo veía "ceder" tal fácil.
Tal vez era que llevaban mas de un mes sin tocarse mutuamente.
Amor. Deseo. Lujuria
No le importaba cual era la explicación, lo único que le importaba a Masamune era hacerle saber tanto física como con palabras que le amaba y así al final aceptar el amor en su totalidad.
-umm..ahh Takano-san…-gimió Ritsu al ser despojado de su abrigo y su camisa dejando desnudo la mitad de su cuerpo. Las frías manos de Takano le producían escalofríos y bochornos al ser rozada.
Rápidamente el Seme también se quito la ropa de la parte superior de su cuerpo. Chupo los pezones de su primer amor haciéndolo gemir, paseándose por todo el torso masculino, mientras descubría al mismo tiempo la excitación hecha un bulto en los pantalones de su uke, sin que su dueño pudiera objetar, le arranco los pantalones junto con su bóxer azul.
Al ver lo excitada que estaba la entrepierna de Onodera, Takano sabia que era el momento, ambos estaban listos.
No puedo esperar mas lo tomare aquí mismo
-Aquí no ahh!...Taka…Takano-san
-No creo aguantar hah… exclamo con un tono ronco, desabrochándose su propio pantalón, para después bajarlo hasta los tobillos, junto con su ropa interior
El editor en jefe tomo las piernas de su novato, separándolas en el proceso, como si las cargara, pego mas al ojiverde a la pared para ayudarlo a impulsarlo, penetrarlo y unir sus cuerpos.
En ese instante de magia, todo se volvió en cámara lenta, los ojos esmeraldas de Onodera Ritsu no dejaron de verlo, estaban temblando de deseo, nunca lo había visto así, y Masamune se perdió esta vez en su mirada.
Y de repente Takano se despertó y se dio cuenta que estaba solo, no estaba ese Ritsu que apenas descubrió, y estaba excitado.
Ahora volvemos al escenario actual, en el baño Takano emprendió a masturbarse a si mismo, y no podía tener mejor imagen mental, que ese Onodera que vio en su sueño húmedo. Su cuerpo comenzó a reaccionar debido a su estado, rápidamente se corrió en su propia mano. Sin embargo una sensación de vacio lo invadió al ver aquel liquido que emergió.
Al mismo tiempo en el apartamento de Onodera. Como pudo el joven de ojos verdes se quito el pantalón de piyama, no quería ensuciarlo, sin embargo al hacer tal acción el simple roce de la ropa lo ponía mas y mas sensible. Tomo un poco de papel higiénico y envolvió su entrepierna dura y así comenzó a subir y bajar su mano, era algo incomodo sentir el papel a pesar de ser suave, si se lo agitaba muy fuerte dolía, se frustro quería terminar lo mas rápido posible y dormir, y cuando esos pensamientos lo invadía, sintió una contracción fuerte de emancipación y termino.
Salió del baño liberado y con su pijama, listo para dormir y en ese momento alguien toco el timbre, Ritsu fue a atender y se topo con lo inesperado.
¡Takano-san!
-¿Qué quieres Takano-san?
-¿Ah? eres un desconsiderado con las visitas.
Nadie visitaría a medianoche.
-Exactamente que te trae por aquí…-evadió enojarse
-Vine a traerte la propuesta de desarrollo de manga, me dijiste que querías que te lo regresara en cuanto lo revisara, además de tus manuscritos revisados
Es verdad había olvidado que le dije eso en la oficina, pero por que tenia que venir en este momento…
-Déjalos en el buzón de correo, los veré mañana
Y es que el novato tenia puesto el pasador de su puerta, así que, por ese pequeño espacio entre la puerta entreabierta se estaba dando toda la conversación.
-Ponte serio con tu trabajo.
Eso si le calo en su orgullo al novato. Cerro la puerta y luego quito el pasador y abrió de nuevo.
-Aquí tienes. —dijo el mayor mientras le entregaba los papeles
-Gracias y disculpa las molestias.—contesto el menor, al ver que su jefe estaba afuera de su hogar, dispuesto a irse, quizo cerrar la puerta.
No puedo dejarlo ir…
Maldición…
Fin de capitulo 1
Eso es todo... el proximo episodio sera pronto, esten al pendiente, asi que por de mientras acepto cualquier comentario, queja o sugerencia de ortografia, semantica y demas...
