Los personajes no me pertenecen le pertenecen a Masashi Kishimoto


1.- Huir

Los velorios son la forma para que mostremos nuestro respeto a los muertos; para sobrepasar el duro lapso de abatimiento o apoyar a los que perdieron a sus seres queridos, en fin una forma para descansar el peso de tristeza. Y aun así ella que había perdido a un marido excelente, no se encontraba en esa tradición. Se hallaba huyendo de un genin que la perseguía en su propia casa "¿Por qué me encontraron?, 40 años huyendo de ellos y pudieron saber donde estaba" su preocupación la distrajo por un segundo, en el cual no noto la presencia de tres personas, hasta que fue demasiado tarde para huir…

— ¿Esta es nuestra prisionera?—una voz femenina hablo sin darse cuenta del problema que resultaba

—Sadako no se supone que rebeles tu ubicación así de fácil—molesto

Las voces cesaron en cuanto una lluvia de kunais cayó sobre ella, esquivaba cuantos podía, pero su estado de reposo además de la fatiga por la carrera le impidieron que evitara que uno se clavara en su pierna.

— ¿Por qué me hacen esto?—no necesitaba respuesta, pero hacerse la inocente fue la única cordura que le llego a la mente

— ¿Eres ninja?‑ alguien mas había interrumpido su palabrería—con razón entraste a la casa tan fácilmente.

Palabras que no entendió "si no me buscan por ser ninja ¿Por qué me atosigan?"

—Kisho tú tampoco reveles tu ubicación—de nuevo regaño.

—Deja de molestar a mi hermano Taro

De nuevo el silencio reino, en poco tiempo la perseguida recogió cuantas armas necesitaba y se las lanzaba a donde habían sonado esas voces.

— ¿Por qué me persiguen?— insistió desesperada

Tenia una mínima oportunidad de escapar, oportunidad que desapareció en cuanto todo el cuarto fue cubierto de chakra, obviamente intentaban calmarla con un genjustu.

No podía hacer nada en su estado actual, por lo que sin querer ella misma doblego su resistencia.


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