Lo sabia
Para Tai kamiya la noche de navidad era de las mejores noches del año pasar tiempo con los amigos su familia, sin olvidar el intercabio de obsequios que se acostubraba celebrar en su casa, y esta noche, la noche buena, seria aun mejor, ya que su hermana menor, kari, como un regalo de navidad decidio traer a su compañero digimon, agumon, desde el digimundo, ademas de que su mejor amigo, matt ishida, les dio pases v.i.p. Para su concierto esa tarde, todos sus amigos asistirian, en fin esta noche, se sentia feliz, y nada en el mundo lo aria sentirse mal, o eso creia.
Poco antes de que el concierto de matt iniciara, como buen amigo que era, le desiaria suerte, claro aun si se enfrentaba al mar de hormonas que siempre habia en la puerta de los camerinos cada vez que matt se encontraba en ellos. Pero cual fue su sorpresa que en esta ocasion raramente, estaba vacio, en la puerta solo se encontraba su mejor amiga desde la niñez Sora takenouchi, la pelirroja se veia nerviosa y en sus manos agarrado fuertemente, traia lo que al parecer era un regalo de navidad, el moreno de inmediato supo que aquel presente era para el portador de la amistad. Pero aun asi decidio preguntar aunque la respuesta era obia y sabria que le doleria.
-¿son para matt?- pregunto inocente mente el antiguo lider
- si- respondio timidamente la chica, esta respuesta entristecio al portador del valor, recordandole la triste realidad, aquella en la que el desgraciadamente vivia,
recordo que el no era a la persona que amaba su antigua compañera de equipo, que el renunsio a ella para darle el camino libre a su mejor amigo, porque, eso es lo que hacen los verdaderos amigos no, ayudarse entre ellos aunque a uno le doliera, ¿no es asi ? Pero que servia pensar en eso ahora el ya lo habia hecho, y tras esta accion su corazon habia terminado destrozado, pero ahora no se arrepentiria, el se caracterizaba por ser un lider firme, y no se hecharia atras ahora, llevaria sus actos hasta el final, aunque claro, sin importar que su alma se hiciera añicos al ver a la pelirroja que amo desde su niñes en brazos de su mejor amigo, todos estos pensamientos fueron alejados al oir a sora decir un "no molestes"
- no te preocupes entregaselas, seguro que le encantaran- respondio el moreno
- si quieres nosotros las comeremos- continuo agumon
-esta bien se las dare- comento decidida entrando por fin al camerino- el antiguo lider no podia dejar de mirarla, al hacerl pensaba en lo que hubiera pasado si hubiera luchado por ella, seguramente ahora no estaria con matt como hasta ahora, ya que el sabia con certeza que al rubio le gusta su amiga, y los hubiera perdido a ambos cosa que no se podria permitir, algo que atravez de sus aventuras en el digimundo le habian enseñado era que la amistad es uno de los tesoros mas grandes, y el no se arriesgaria a perder a sus amigos.
Finalmente lo saco de su ensoñazion una chica de nombre jun que corria hacia el camerino de mat gritando " matt mi amor te traje esto " claro la chica no se dio cuenta que en su trayectoria casi tiraba a tai al suelo, aquella escena le causo algo de gracia, decidido se retiro del lugar deseandole suerte al rubio.
