Esta es mi primer historia de varios capitulos sobre una aventura paranormal y siniestra de Near, Mello y Matt. Si quieren ver a nuestros héroes(?) viendo cómo se las arreglan para dejar de lado la lógica y enfrentarse a situaciones donde el razonamiento no sirve, entonces quédense en sintonía(?) porque ésta fue solo la introducción pero en el primer capítulo veremos cómo hacen nuestros villanos(¿que no eran heroes?) para salirse con la suya!

Dejen review con ideas de cosas paranormales, y las buenas ideas o sugerencias seran usadas! cualquier colaboración es aceptada! aunque mas o menos tengo una idea de como encarar la historia..¿Quien sabe? siempre se puede dar un giro inesperado gracias a sus ideas!

En fin, ¡Asi empezamos...!

Introducción

Era una típica tarde en el orfanato Wammy. Nuestros protagonistas se encontraban plácidamente en la sala de recreación, cada uno en su mundo. Mello devoraba una suculenta tableta de chocolate con nuez mientras leía un comic acerca de un detective muy talentoso y mecánico, conocido como Gadget. Por otra parte, Matt le explicaba a Near como jugar a un videojuego de su NintendoDS, aunque el albino no estaba realmente interesado. En realidad, el albino nunca estaba interesado en nada salvo ese estúpido robot de juguete(como diría Mello).

Ellos tres siempre iban juntos a todos lados, más alla que Mello a veces hasta odiara la compañía de Near, tenía que reconocer que era divertido estar con él cuando se le ocurrian diversos planes y cosas para jugar que eran tan originales. Típico de un genio, obviamente. Por otro lado, Matt no era muy avispado en cuanto a generar juegos varios, pero siempre le ponía entusiasmo a todo lo que pasara, alegrándo y haciendo reir a los demás. Y Mello era la parte que hacía que todo fuera posible, ya que siempre era el primero en dar una orden o seguir el juego. Más alla de que casi siempre tuvieran alguna riña, eran compañeros de orfanato inseparables.

Near, quitando la mirada del juego de video de Matt, observó por la ventana aquella casa abandonada que siempre le traía curiosidad. Cayendo la tarde, la oscuridad del tejado le daba un paronama lúgubre a la estructura. Parecía una típica mansión de la era barroca, pero con tejado de tejas de cerámica grises y mugrosas, y paredes de granito bastante mohosas. La maleza alrededor de la mansión era abundante, y no se podía divisar ningun camino de acceso fácil hacia la entrada, salvo una escotilla que, seguramente, daba paso al sótano. Era un edificio bastante grande, y aun así inútil.

Pero lo que más le interesaba a Near, era el hecho de que sucedían cosas extrañas allí, cosas que sobrepasaban el límite del razonamiento, y que tenía sed de curiosidad. Le producía adrenalina imaginarse ahi, descubriendo paso a paso el misterio que escondía esa mansión detrás de las puntiagudas rejas de hierro.

-¿Otra vez mirando esa casucha?-recriminó Matt al darse cuenta que luego de explicarse una intrincada sección de combos y patadas, fue completamente ignorado.

-¿No te da curiosidad saber lo que pasa allí adentro?-el albino miró a Matt y luego a Mello de reojo, que venía acercándose a paso lento, hojeando las últimas paginas de su comic.-Esas cosas extrañas que te conté...tengo unas ganas inmensas de saber qué pasa ahi dentro...-

-¿Qué susurrás blanquito?¿Acaso ocultandome algo?- Mello frunció el ceño mientras se agachaba a la altura de los otros dos, que estaban prácticamente tirados en el suelo, y se unió a la conversación.

-Estabamos planeando con Matt nuestra incursión en aquella casa de la que te conté...-

-¡Hey, hey, hey!-exclamó Matt-que yo no dije nada. Tu eres el que esta obsesionado con esa choza. Además, tenemos prohibido salir de Wammy siquiera, y no quiero que me quiten los videojuegos.-

-Qué llorica.-murmuró Mello observando como Matt protegía ridiculamente el juego de video Mortal Kombat entre sus manos.- Pero tiene razón, además, yo nunca vi esas cosas, así que no sé por qué tendríamos que arriesgarnos a ir.-

-Sólo será una noche.- prometió Near.

-No, seguro son ilusiones tuyas, y nos vas a hacer ir hasta allá por nada.-negó Mello nuevamente, acercándose hacia Near, amenazante.

-Bueno, ¿necesitás pruebas? Quédense conmigo ésta noche. Nos ocultaremos en el pasaje de la biblioteca después de cenar, y luego entraremos en éste mismo cuarto. Les demostraré cuan raro y necesario es saber qué es lo que pasa alli dentro.- muy seguro de sí mismo, Near tomó su robot, y señaló con él la mansión vecina.

-Esta bien.-aceptó Mello, dandole un mordisco al chocolate.

-¿Esta bien?¿Cómo que esta bien? Nos vamos a comer un castigo por culpa de las alucinaciones de éste adicto a los juguetes de plástico.-exclamó Matt. Algunos niños prodigios de alrededor voltearon ante el estruendo, por lo que Mello rápidamente le propinó un golpe en el brazo más cercano, para hacerlo callar.-¡Hey!-se quejó Matt.

Near se levantó de su asiento, aún con el robot en brazos.

-Nos vemos a las 23:00 hs en la biblioteca.- dijo, y se retiró por un pasillo cercano a su derecha.

-No estoy seguro de ésto.-aunque Matt fuera muy entusiasta, era cierto que creía en las cosas paranormales y siniestras, y por lo tanto, creía que existía algo en esa casa. Por el contrario, Mello descreía absolutamente cualquier cosa que no fuera palpable por los cinco sentidos.

-No va a pasar nada.-lo confortó Mello-Vamos a ir, y le vamos a cerrar la boca a Near demostrandole que tiene que dejar de jugar con esos juguetes suyos y relacionarse un poco más con la gente, que ya se esta volviendo autista y loco.-bromeó erguido junto a Matt, mientras el otro también se elevaba de su sitio.

-Vamos, tenemos que prepararnos para ésta noche, seguro que hara frío, y no quiero congelarme.-Mello caminó unos cuantos pasos para detenerse y agregar-Ah, y no lleves esos estúpidos videojuegos tuyos, que tenemos que hacer el menor ruido posible.-

-¿QUÉ?-gritó finalmente Matt, ahora sí siendo el centro de atención de toda la sala de Wammy.