Disclamainer: Ninguno de los personajes ni de los escenarios mencionados a continuación me pertenecen. No obtengo ningún beneficio económico-fiscal con este relato.
N/A: Ya sé que este no es mi tipo de obras, pero es algo que llevaba tiempo deseando escribir. También quería decir que la que me inspiró a este tipo de historia fue Teresa, va por ti si lo lees.
Dolor. Mucha gente diría que sentía pena pero no. Dolor en estado puro se había instalado en mi pecho.
Los recuerdos de días enteros riendo juntas acudían a mi mente. Jugando en los jardines de la mansión, gastándole bromas a algún elfo doméstico o fantaseando sobre su futuro como esposas de alguna eminencia europea.
Pero ya todo había pasado. Nuestros lazos de sangre, pero por encima de estos, nuestros lazos de amistad, se habían roto. Según tú, por mi culpa. ¿Pero realmente fue así Bella?¿Realmente fui yo la única culpable de que prefirieras codearte con las clases más altas antes que con tu hermana, traidora a la sangre?
Yo creo que no.
Pero no te bastó con darme de lado. Tuviste que hacer que todo por lo que había luchado desde que dejé nuestro hogar desapareciera. Bueno, casi todo. Porque si resulta que me repudiaste por mis sentimientos, por ser capaz de amar a un ser ``impuro´´, me alegro. Me alegro de haberme podido separarme de ti.
Pero daría todo lo que tengo por que volvieras a la vida. Conmigo. Porque, aunque me arrebataste a mi hija, eras mi hermana. Aquella con la que comía chocolate por la noche hasta vomitar, aquella que enterraba las joyas más bonitas de mamá en el jardín, para que se volviera loca buscándolas. Porque mi hermana era Bella Black, no Bellatrix Lestrange, aquella loca que salió de Azkaban para matar a mi Dora. Resucitaría a mi Bella, para poder hablar como una adulta y pedirle perdón por dejarla sola. Porque te quería Bella. Te quería mucho más de lo que creías. Pero me obligaste a elegir. Y no me arrepiento de haber pasado estos veinticinco años con mi marido. Aunque ahora también esté muerto, también por tu culpa.
Porque no te dejé en vano. Ted me dio la vida. Ted me dio la felicidad. Por eso no me arrepiento de nada. Y por eso estoy aquí, en tu tumba. No en ese monolito que ha construido Cissy y que reza Bellatrix Druella Lestrange 17-9-1951/2-5-1998. En esa no. En la que yo he hecho para ti. En mi jardín, en un roble grande y joven he puesto una placa. Nada relevante, pero que reza Bella Black, que siempre vivirás en mi corazón. Te echa de menos Andrómeda. Todos los días te cambio las flores con mi nieto.
-Porque aunque me fallaste, siempre me tuviste a tu lado- dicho esto, y tras acariciar la placa que adornaba el roble de su jardín, entró a su casa. Una casa que había crecido como había podido, desestructurada por la mente de una Lestrange.
N/A: Espero que os haya gustado, ya sabéis, decid algo!
