PROLOGO

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Al fin llegó la hora soñada. Estaba ante el momento esperado, y en sus manos residía el poder de cambiar el mundo. El misterioso sujeto caminó por aquella sala gris, rodeada por multitud de máquinas de avanzada tecnología, acompañado únicamente por el sonido burbujeante de los tubos de ensayo repletos de sustancias extravagantes que reposaban en ellas. A su alrededor, las paredes de acero blindado le devolvían el eco de sus sigilosas pisadas, como si tuviesen miedo a proferir algún otro ruido que pudiese alterar aquel equilibrio tenebroso.

- Por fin ha llegado el momento...- susurró el oscuro sujeto, parándose ante una gran pantalla.

Paseó los dedos por encima de un montón de teclas que parecían resplandecer ante sus ojos y desvió la mirada hacia la enorme pantalla que tenía ante sí. Ésta le devolvió multitud de imagenes del exterior: un parque donde jugaban los niños, la calle más concurrida de la ciudad por la que se paseaban los residentes, un complejo de empresas de las cuales entraban y salían personitas trajeadas por doquier...Todo a la vez tan grande y tan pequeño, tan espléndido y tan miserable. Tan... fácil de corromper.

- Señor, ¿está seguro? - preguntó una voz a su lado, titubeante - ¿De verdad será una buena idea?

Él se dio la vuelta, con la decisión patente en sus brillantes ojos. A su alrededor, un grupo de personas le devolvió la mirada.

- Lo es. - afirmó, con tono alto y firme. Acto seguido, volvió a fijarse en la máquina y buscó un grande y rojo botón que parpadeaba, como espectante de que alguien lo tocase - Es la única manera...

El que había hecho la pregunta tragó saliva cuando su líder presionó el botón sin vacilar, sabiendo perfectamente qué era lo que iba a desencadenar aquella aparentemente simple y pequeña acción.

Iban a destruir la humanidad.


Hola... bueno este es el inicio de la historia y pues, la iré actualizando todos los viernes.