Nueva historia;)))) propiedad de mi amiga yocelyn;333
Alice PoV:
Recién había llegado a casa, las clases me habían agotado. Iba entrando a mi casa, cuando encontré siete pares de ojos mirándome con furia, en ellos estaban mis padres.
-¡Ven inmediatamente aquí Mary!.-Dijo mi hermano Edward, con rabia. Cuando estaba enojado conmigo, en serio, me llamaba Mary.
-Yo no fui.-Dije sin ánimos, estaba muy cansada.
Anoche no había dormido muy bien, prácticamente no había dormido, ya que de vez en cuando veía a alguien en mi habitación. Pero cuando encendía la luz, me daba cuenta de que no había nadie.
-¡Déjate de bromas Alice!.-Bramó Edward, estaba hecho una fiera.
-Alice, ¿Porque lo hiciste?, ¿no te hemos enseñado nada?.-Dijo mi madre adoptiva Esme.
-Eres una perra Alice.-Me gritó Rosalie, la novia de mi hermano Emmett.
Ella y yo nos llevábamos bien, de vez en cuando salíamos de compras juntas.
-¡¿Pero que demonios les sucede?!.-Grité exasperada, la verdad no entendía nada.
-¡¿Que te parece eso?!.- Dijo Edward, entregándome violento unas hojas de papel.
En estas, salia una conversación "mía", con Jane. En la cual hablábamos mal, de la novia embarazada de mi hermano, Bella.
-Yo no escribí esto.-Dije tranquila.
Era verdad, yo no lo había escrito. Bella no me caía mal, la encontraba bastante aburrida, pero no por eso iba a hablar mal de ella.
-¡Déjate de mentiras Mary!, ¡Eres una mentirosa!, ¡una caprichosa egoísta, que no piensa en los demás!.-Me gritó Edward. Esto me estaba cabreando.
-Vaya hasta que por fin te das cuenta que es ser egoísta.-Dije sarcástica. Edward se puso rojo.
De repente vi rojo. Algo había golpeado mi mejilla, mejor dicho alguien. Edward me había golpeado. Sin aguantar más, estalle.
-¡¿Que rayos te sucede?!, ¡Maldito cabrón!, ¡Yo no escribí esas estupideces!.-Dije enojada acercándome a Edward.
-¡Se que nunca te a caído bien Bella!.-Respondió Edward.
-¡Si, tienes razón!, ¡Pero sabes, no me importa tu estúpida vida!, ¡No me importa con quien salgas o pierdas el tiempo!, ¡No me importa en lo absoluto lo que hagas tu o Bella!, ¡Tengo mis propios problemas!.-Dije golpeando su pecho con mi dedo.
-¡Alice Basta!.-Grito mi padre adoptivo. Genial, el creía en lo que decía la estúpida hoja.
-¡Vaya!, veo que también creíste en lo que dice esa estúpida hoja. No se porque no me sorprende.-Dije irónica, yo sabía el amor que le tenía Carlisle a Edward. Era mayor al que me tenía a mi.
-¡A tu habitacion!, estas castigada de por vida, no mas ropa, no mas salidas, no mas nada.-Gritó Esme enojadisima.
-¡Me importa un carajo!, ¡tengan toda su mierda!.-Grité lanzando las tarjetas de crédito, el dinero, mi mochila, mi collar y mi anillo.
Sentí como alguien me tomaba del pelo, era Rosalie.
-¡Como te atreves perra!.-Me gritó Rosalie.
-Déjame tranquila Rosalie, esto no te incumbe.-Le dije soltándome rápido de su agarre.
-¡Claro que me incumbe!, estas hablando mal de mi mejor amiga. ¿Como pudiste hacer eso?, eramos amigas Alice.-Me dijo con rabia.
-¡Yo no he hecho nada!, y claro si fueras mi amiga, sabrías que yo no hago esas cosas. Y ustedes también.-Dije mirándolos a todos.-Vaya confianza que me tienen.-Dije sarcástica.
Todos se quedaron callados. Hasta que Jasper se puso de pie y se puso al lado de Edward.
-Esta hoja lo dice todo. Acepta que ere una perra cruel y desgraciada. Confiábamos en ti, te queríamos. Pero eres igual o peor que Tanya y su séquito de amigas.-Vaya, mi novio llamándome perra cruel. El mas que nadie sabia que yo no sería capaz de algo así, pero ya...él no confiaba en mi, al igual que los demás.
-Jódete Jasper.-Le dije rodando los ojos.
-¡Zorra!.-Me gritó Rosalie y se me abalanzó. Era como todas las estúpidas que no sabían pelear. Con un ágil movimiento la esquive y la deje en el suelo.
-Vaya si la barbie es pura boca.-Dije llena de odio.
-¡A tu habitación!, ¡Y no bajes!.-Gritó Carlisle dolido.
-Jódete Carlisle, jódanse todos.-Dije mientras me dirigía a mi habitación.
Estaba enojada y mas que nada dolida. Mis amigos y familia no creyeron en mi. Al menos Emmett se había mantenido al margen.
-¡argh!.-Dije golpeando la pared, que luego me arrepentí, por que la mano me dolió a horrores.
-No debiste hacer eso.-Dijo una voz a mis espalda.
Era un chico músculos, alto, de unos hermosos ojos de color azul esmeralda. Su cabello era de color negro oscuro, y algo corto. Vestía con una camiseta de color negro y unos vaqueros, sus zapatos también eran negros. Era el chico mas hermoso que había visto y también muy atractivo.
-¿Quien eres tu y que haces en mi habitación?.-Pregunté confundida y curiosa. No todos los días encontrabas un semental en tu habitación.
-Bien, soy Damon Salvatore.-Dijo con una sonrisa que decía "peligro".
-¿Que haces en mi habitación?.-Pregunté confundida.
-Pues tienes un olor exquisito, y quise saber quien eras.-Me dijo acercándose a mi, yo reaccione al instante y me dirigí a la puerta. Pero antes de llegar, el chico ya estaba ahí.
-¿Como hiciste eso?.-Pregunte asombrada, su velocidad era sobrehumana.
-Veras soy un vampiro, y tengo fuerza y velocidad sobrehumana.-Me dijo como si fuera los mas obvio del mundo.
-Espera...¿Que?.-Pregunté sin entender nada.
-¿Eres sorda?, soy un vampiro.-Me dijo nuevamente, recostándose en mi cama.
-¡Wooooow!, ¿Te afecta el sol?.-Le pregunte sentándome a su lado.
-Si, este me quema y me asesina.-Dijo leyendo...¡mi diario de vida!.
-Pero ahora te esta dando el sol.-Le dije mirando sus pectorales.
-Pues traigo un anillo que me permite exponerme al sol.-Dijo mostrándome un hermoso anillo de lapislázuli.
-¿Te transformas en murciélago?.-Le pregunte curiosa.
-No, eso es fantasía. Pero de mascota tengo un cuervo que me obedece y me dice todo lo que ve.-Dijo volviendo a leer mi diario.
-¿Y eres inmortal?.-Me llamaba mucho la atención.
-Por lo que veo, no dejaras de hacer preguntas, así que ven.-Me acercó a el y me miró a los ojos.
Vi un montón de imágenes. Vi vampiros, hombres lobos, brujas y brujos . Vi como los vampiros se alimentaban, sus debilidades y lo que necesitaban para sobrevivir.
-Bien, ¿Sabes todo sobre vampiros?.-Me preguntó el tal Damon.
-Si, se que necesitan para sobrevivir y que los mata, existen hombres lobos y brujos, claro también brujas.-Dije recordando las imágenes.
-Ahora dime, ¿porque pelearon tu familia y tu?.-Me preguntó.
Le conté a Damon todo lo sucedido, hablamos de gustos y trivialidades. Estuvimos hablando todo el día y la noche. Nadie nos interrumpió. Damon me habló sobre su hermano, y el triangulo amoroso que los separo un tiempo. Pero luego el lo supero y se fue a viajar por el mundo, hasta que dio conmigo. También me habló de un vampiro muy malo y sádico llamado Kalus y de unos brujos, llamados viajeros. Su vida era fascinante.
-¡Woooow!, tu vida es...fascinante.-Dije cuando terminó de contarme la existencia de seres sobrenaturales.
-Si, ser vampiro es genial...Adrenalina y peligro.-Dijo con una sonrisa torcida.
-Oye y tu...¿Beberás mi sangre?.-Pregunté temerosa de la respuesta.
-Claro, tienes un olor exquisito, pero tranquila sera solo un poco. Luego me detendré.-Me dijo con un guiño.
-Bien, pero ¿tomaras y te iras?.-No quería que se fuera.
-No...Quiero cumplir todas mis fantasías contigo cariño.-Me dijo en un ronroneo. ¿Fantasías?.
-¿A que te refieres?.
-Quiero cumplir mis fantasías. Estar con una humana. Pasión, deseo y peligro.-Dijo desabrochando mi blusa.
-¿Y quieres que sea yo, la cumpla tus deseos?.-Pregunte mirándolo.
-Claro, eres perfecta, hermosa y muy sensual. Tienes un atractivo que me llama mucho la atención.-Dijo besando mis hombros, luego que me quitó la blusa.
-¿De verdad crees eso?.-Pregunte cerrando mis ojos, Damon acariciaba mis senos lentamente, de una forma excitante.
-Si, ¿Acaso tu no quieres?.-Preguntó besando mi cuello, mientras desabrochaba mis vaqueros.
Me besó el cuello, hasta llegar a mis labios. Me dio un beso lleno de pasión y deseo, introdujo su lengua en mi boca, y yo gustosa le correspondí. Me deje llevar. Pasé mis manos bajo su camiseta, tocando su torso. Nos separamos un momento, para que el se quitara la camiseta. Cuando lo hizo no pude evitar mirar sus músculos. Tenía un cuerpo hermoso.
Me tumbó en la cama y se posó encima de mi, sin aplastarme. Beso mis labios y fue bajando, hasta llegar a mis senos y siguió bajando por mi vientre. Hasta que llego a mis pantalones. Subió a mis labios otra vez, y una de sus manos se metió dentro de mi pantalón, y rozo mi intimidad, con mis bragas.
-¿Vas a querer?.-Preguntó ronco, volviendo al tema.
-Si.-Dije segura, e igual de ronca.
El me quito en sujetador y besó mis senos. Los succiono, los saboreo, no pude evitar gemir. A través de la tela de sus vaqueros, acaricie su miembro. Damon me quito los pantalones, y rozo mi intimidad. Yo quite sus pantalones, con ayuda de él, y nos besamos. Rozó su miembro con mi vagina, y los gemidos salían de nuestras gargantas.
Introdujo uno de sus dedos, dentro de mi vagina, lo movió lentamente, luego introdujo otro. Era la sensación mas exquisita de mi vida. Damon saco sus dedos, e introdujo su miembro dentro de mi. Quise gritar de placer pero me contuve. Gruñidos y ronroneo escapaban de Damon. Me besó el cuello y de un momento a otro, me clavó sus colmillos. No me dolía, es mas, era placentero. Eso me excito aun más. Damon bebió de mi sangre y yo clave mis uñas en su espalda produciendo que este sangrase.
Me encontraba en el cielo y en el infierno. Damon de apoco fue subiendo la intensidad de sus movimientos. Yo solo gemía de placer. Damon era muy bueno en esto.
Aun bebiendo mi sangre llegamos al orgasmo, sentí como las paredes de mi vagina se contraían y el miembro de Damon se hacía mas grande dentro de mi. Con un gemido de infinito placer, cerré mis ojos y regularice mi respiración.
-Esto es solo el principio, ya no hay marcha atrás.-Dijo con sangre en su boca. Besando mis labios.
Ya no hay marcha atras...
Este fue el primer capitulo;L espero que les guste...
