¡Hola!
Éste es mi primer fic, o al menos aquí lo es. Hace un tiempo escribí uno y lo subí en esta misma página pero, pues, desapareció. Lo dejé por un tiempo y ahora que lo estoy buscando pues ya no está. Así que decidí irme a por otro.
En primera estancia era un One shot y esto fue lo que salió, aunque no tiene pinta de ser uno (a mi parecer quedan muchas cosas por resolver). Y si a ustedes les gusta y quisieran una continuación pues yo la continúo :3 Fue algo que salió de repente, ni siquiera lo pensé, fueron mis dedos los que hicieron la magia. Así que sin más.. espero que les guste:3
Muñeca.
Muñeca
Oh, no… no de nuevo, ¿por qué todos me llaman así?, es tan molesto.
Muñeca…
¡Que no me digan así!
Muñeca, por favor…
¿Por favor?, por favor debería pedirles yo que.. ¡Ay!
Muñeca, eso es… sigue…
¡BASTA! Dejen de llamarme así, bas.. ¡AHH!
Lucha muñeca, por favor, tú puedes, no nos dejes…
El dolor es horrendo. No sé de donde viene, sólo sé que me duele algo a más no poder, siento punzadas en todo el cuerpo, es como si mil agujas estuvieran entrando en mi por todas partes.
Muñeca... mi amor... muñeca... ángel.
Ángel. Ese apodo es lo único que escucho por encima de todo el dolor, pero ¿ángel? ¿Por qué alguien me llamaría así? ¿Y por qué me suena tan familiar?
Ángel... eso es.
Muñeca… sigue así…
Por favor…
Por favor…
Grité. El grito fue ensordecedor, como todo lo demás en este sitio. Siento el cuerpo entumecido y hay mucho ruido. ¿Dónde estoy? ¿Qué demonios pasó?
-Sakura, estás en una clínica, trata de mover el cuerpo, algo, lo que puedas. -Sentí que alguien me hablaba con seriedad, pero no me era familiar. Me empecé a impacientar, no podía abrir los ojos y no sentía mis muñecas.
-¿Qué me pasó?, logré articular por encima de todo. Creo que no me escucharon.
-Déjenme pasar... es mi novia, ¡quítense! ¡Por favor!, dejen de hacerme esto. ¡ÁNGEL! ¡SAKURA! –Alguien gritaba, no reconocía la voz pero una angustia dolorosa se afirmó en mi pecho. ¿Quién era él? ¿De dónde me conocía? ¿Por qué no lo dejaban pasar?
Luché con mis ojos, con mis manos, más gritos estaban dándose allá afuera, donde sea que esté, ¿una clínica? ¿eso fue lo que dijo el señor? Los sonidos se iban alejando, me estaba relajando pero la angustia no se iba. Necesito despertar, lucho con todo. Escucho voces lejanas.
No Saku, no te vayas…
No de nuevo…
Sakura Hurano, ¿me oyes?..
¿Ángel? ¡ÁNGEL!
Cállate, basta, ¡baja la voz! ¡Sal de aquí de una vez! Hiciste que volviera a reca..
No podía escuchar más nada, la niebla me consumía, ya no sentía agujas, ni susurros, nada…
Soy yo, ángel, Sasuke... No me dejes, no de nuevo... ángel.. por favor.
Muñeca, no lo escuches.. ¡Sáquenlo de aquí!
¡NO!. Sentí que me retorcía pero nadie parecía notarlo. Más angustia, más impaciencia, ¡¿qué demonios está pasando?! empecé a tener fuerza en mis dedos y en mis muñecas, necesitaba decir algo, no quería que se fuera, sea quien sea no quiero que se vaya. No me dejes…
Sakura…
¡Ah!
Muñeca…
¡BASTA!
Sasuke... sasuke… logré susurrar antes de caer de nuevo en la oscuridad, sólo que ésta vez fue diferente, ésta vez sí quería despertar, aunque me llamaran por ese horrible apodo, necesitaba despertar.
Sasuke…
Ángel…
No me dejes.
