La casa de Ore-sama y West!

Estaban en un awesome día el awesome de Prusia y Alemania en su casa. Su AWESOME casa. Junto a Gilbird (también es awesome).

Prusia: Bueno West, ¿Qué vamos a hacer esta noche?

Alemania: Nada. Quedarnos a comer wurst y beber cerveza.

Prusia: ¡No, no, no! Tu tienes que decir: Tratar de conquistar al mundo *voz chillona*

Alemania: No jodas. A demás, te insultas a ti mismo siendo Pinky.

Prusia: Bueno, el gran ore-sama dice que vayamos al bar.

Alemania: No, fuimos ayer.

Prusia: Entonces... ¿vamos al karaoke?

Alemania: No, fuimos ayer, antes del bar y a demás, cantas horrible.

Prusia: ¿¡Qué! ¡Yo canto awesomemente bien! Y no canto cosas deprimentes como tú. ¿Einsamkeit? ¡Por el viejo, West! (N/A: Se refiere al Viejo Fritz :B y Einsamkeit es una de las canciones de Alemania)

Alemania: Estaba ebrio, nii-san, y fue tu culpa...

Prusia: Bueno, ¿entonces qué? ¿le vas a comprar comida al awesome Gilbird? *le pasa la billetera y las llaves* ¡Y no vuelvas pronto! *Abre la puerta, empuja a Alemania y cierra*

Alemania: *Afuera* No quiero saber qué diablos hará...

Era obvio, al grandioso Prusia se le había ocurrido algo. Algo que de seguro, no le agradaría al alemán en lo absoluto.

Y ésta era la idea: le daría un regalo a su casi tan awesome hermano como él. Iba a remodelar su habitación.

Prusia: ¡Bien! *Con tarros de pinturas, brochas y diarios en el suelo, en la habitación de West*

Entonces corrió los muebles, pintó la habitación, reacomodó sus cosas y dejó ordenado.

Prusia: Esta habitación es digna de verse. ¡West se alegrará de que el gran ore-sama le haya dedicado un tiempo!

Recorrió el resto de su casa, pensando en que también necesitaba una remodelación.

Gilbird tenía un aura oscura y Prusia lo notó.

Prusia: ¿Qué sucede Gilbird? No te preocupes, West ya llegará con tu comida.

El pollo solo pió. Sin tomarlo en cuenta, Prusia siguió recorriendo su tan awesome casa.

Cuando subía las escaleras, escuchó a Alemania.

Alemania: Nii-san, ya llegué.

Prusia subió a su habitación, esperando la reacción de West.

Pero el alemán, al ver su habitación, no reaccionó de la manera en que el prusiano esperaba.

Alemania: ¡GILBERT!

Llegó Prusia.

Prusia: ¡West! ¿Te gustó el regalo?

Alemania: ¿¡Regalo! ¿Llamas regalo a pintar mi habitación de amarillo pollito, un regalo?

Prusia: ¡Claro! Es el color de mi awesome Gilbird, ¿No te gusta?

Prusia palideció al ver la cara enfurecida de Alemania.

Prusia: O-oye West, sólo lo hacía para que fueras tan awesome como yo y...

Alemania: ¡LÁRGATE! *Más furioso, imposible*

Y más tarde, en un callejón de Berlín... Algún lugar de Berlín.

Prusia: Jo... West me echó de la casa por pintar su habitación de amarillo awesome.

Fin (landia! 8D)