Drabbles y/o one-shoots en las que esta cabecita llena de ideas decidió usar su tiempo.

También es mi primer fic fuera de APH.

La mayoría protagonizada por mujeres que han estado presentes y han hecho una marca en la vida de Loki.

Aclaraciones:

-"palabras entre comillas": flash-back.

Disclaimer: Loki, desgraciadamente, no me pertenece, ni el resto de los personajes que aparecerán, sino a la mitología nórdica (la cual uso a medias) al MCU y a Tom Hiddleston (?).

"Atardecer"

Loki jamás ha sido ni será de los que dicen lo que sienten o piensan en voz alta con regularidad. Le causa un gran disgusto revelar partes de sí a personas que desconoce o le resienten. Muy pocos han tenido la suerte de descubrir cosas suyas, como lo son el caso de Thor y los Tres guerreros. Hubo un tiempo que Sif podría haberse considerado a un mismo nivel que Thor.

Pero era Frigga la afortunada de escucharlo revelar partes de sí.

De esa forma, un día de su tierna infancia, cuando Loki aún no era ese Loki, y la envidia no carcomía en su sangre no asgardiana; sentados uno al lado del otro, leyendo un libro que el menor de los príncipes adoraba, él lo soltó:

-Me gustan los atardeceres.

Frigga había levantado la mirada de las runas en las páginas, sonriendo con ternura por esa simple declaración- ¿En serio?

-En serio, madre-dice sin quitar la vista del cielo.

-¿Puedo saber por qué?-pregunta curiosa.

-...Por sus colores-responde-son más intensos que el amanecer. El naranja intenso, el brillo del sol...y el celeste que aún queda, sigue siendo hermoso.

No dudaba de que su hijo tenía un don con la palabra. Pero lo que captó más su atención, fue ese resplandor en los ojos verdes del niño. En la ligera adoración que pudo leer entre sus palabras. El tenue pero claro rosa de sus mejillas.

Frigga descubrió que Loki asociaba los atardeceres con algo. O más bien alguien a quien el joven príncipe conocía. Y ella igual.

Los atardeceres de Loki tenían largos cabellos anaranjados, tez tostada y ojos celestes brillantes como el sol.

Sigyn.

La hija de una de las Lady's, amiga de la Reina. Un caso igual que Sif, quién acompañaba a su madre para ser, algún día, una dama digna para casarse con un noble.

Loki captó la atención de la niña. Y viceversa.

"-¿Qué lees?

-Un libro de hechizos, me lo prestó Sif.

-¿Y por qué parecía que te escondes de alguien?

El pelinegro entrecerró los ojos, desconfiado de hablarle a alguien que no eran ni Thor, ni Sif ni su madre. Desvió la mirada, y al regresarla, se topó con los brillantes zafiros de la niña.

La boca se le secó, y sintió sus mejillas enrojecer. Dioses, ¿ella no parpadeaba?

-Mi padre. Él dice que no debo practicar hechizos si eso es muy femenino- Loki descubrió su propia voz delatando su razón de esconderse.

-No le veo sentido-dice ella frunciendo los labios-Te he visto, y no tiene nada de poco varodil.

-Varonil-corrige el ojiverde.

-Eso mismo-ríe.

A Loki le gustaba su risa".

Frigga había observado como el más joven de sus hijos pasaba más tiempo con Sigyn.

En el castillo se volvió costumbre ver a esos dos juntos. Era raro ver a Loki sin Sigyn, y a Sigyn sin Loki.

La Reina vio Loki enamorarse por primera vez. Un amor puro e inocente.

Incluso, se preguntaba que de haber seguido así, se hubieran comprometido. Quizá hubieran tenido hijos, probablemente dos. No habría lugar en su corazón donde la soledad y la infelicidad se asomaran.

Pero las Nornas no eran justan...no con Loki...

Sigyn debía irse en la primavera a su hogar, lejos de Asgard. Su padre, un Lord, debía resolver un tema, y su esposa e hija debían acompañarlo.

Loki volvió a acompañar a Frigga en sus paseos por el jardín, fingiendo leer, mientras miraba no tan discretamente hacia el cielo, cuando los colores del atardecer hacían asomo. Fue una rutina de meses, hasta que el invierno llegó.

Frigga recordaría por siempre como Loki recibió aquella noticia.

"-Fue un complot, mi Rey-decía el Lord-envenenaron el lago donde mi esposa e hija se bañaban siempre...y ellas...las dos-el hombre agachó la mirada apretando los puños y la quijada-...necesito que se haga justicia, su majestad. Encontrar a quienes lo ejecutaron. L-Lo estoy pidiendo, no como un Lord al cual su seguridad fue burlada, sino como un esposo y padre...que desearía verlas aquí y no esperándome en las puertas del Valhalla".

Esa había sido una audiencia privada con Odín y ella presentes. Pero Loki siempre descubría los secretos, y no tardó con éste.

Intentó entrar, pero se lo negó.

Sif igual trató,y el mismo resultado.

Creyeron que Thor no lo iba a intentar, sin embargo, al otro día, el niño rubio era el que le abría a la sorprendida Frigga; se había escabullido de alguna manera que ella desconocía, y acompaño a su hermano durante la noche.

Los paseos por los jardines pararon.

Loki solo se veía por las bibliotecas del castillo.

Su mirada se mantuvo baja todo el tiempo, evitando mirar el cielo por una larga temporada. Y cuando por fin levanto la mirada...no había nada de lo que Frigga vio cuando le confesó que le gustaban los atardeceres.

Los odiaba.

Su color naranja.

El brillo del sol.

Lo que quedaba de celeste en el firmamento.

Todo lo que le recordaba a Sigyn, y que jamás la volvería a ver.

Próximo drabble/one-shoot: Frigga o Sif.

Espero les haya gustado la lectura ;)

Sayonara! Goodbye! Tschuws!