Buenas tardes. He aquí mi nueva historia, mezclando mi amor por la música clásica y el Takari.Espero que les guste.

.Obertura.

Para alguien que ha estado tanto tiempo recuperándose de un golpe emocional –como una ruptura con una pareja que sería "para siempre"- Tk comenzaba a comprender que había desperdiciado demasiado tiempo lamentándose.

Allí estaba la prueba. Un grupo de chicas le rodeaba en aquella fiesta y a decir verdad, hacía mucho tiempo que no se sentía tan bien.

Sus amigos más populares y su hermano estaban allí también, pero al parecer era la primera vez que sentía que nadie podría arrebatarle la diversión dado que todos andaban muy ocupados. Porque Tk lo sabía, aquella sería la primera noche de muchas.

El hermano mayor de Takeru, que había estado de gira largo tiempo con su banda, era muy conocedor de este tipo de fiestas nocturnas donde abundaban las chicas bellas, el alcohol y alguna droga ocasional.

Una chica de cabello azul se acercó a Takeru con una gran sonrisa.

-Tengo un regalo para tí…-le dijo al oído. Takeru la miró sin comprender mucho, pero tampoco tuvo tiempo de pensar, porque la joven le tomó el rostro entre sus delicadas manos y le dio un beso intenso. Lo que Tk no se imaginaba, era que con aquel apasionado beso, también vendría una pastilla de éxtasis.

Sus sentidos se intensificaron y el joven sintió en su cuerpo el impacto de los bajos en la música electrónica que llenaba el lugar. Consiente como nunca de todas las sensaciones que percibía su cuerpo, se dejó llevar por la intensa alegría que le golpeó en el pecho y pronto le invadió la lujuria.