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Cambio de identidades.
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Disclaimer: Algunos personajes de esta historia son propiedad de J.K. Rowling y la Warner Bros. El resto de ellos son propiedad de Kubo Tite. Esto es puro entretenimiento y no me reporta beneficio económico alguno.
Resumen: Ichigo no sabe que la actitud exuberante de su padre es toda mentira, que las circunstancias trágicas de su pasado, que él no recuerda, hicieron a Kurosaki Isshin el hombre que es hoy. Sin embargo, con Karakura amenazada por Aizen, la verdadera identidad de este hombre debe salir a la luz, junto con el pasado que lo llevó a tener que esconder la cicatriz en su frente, sus ojos verdes y su verdadero nombre.
Parejas: Harry Potter/Ukitake Juushirou, Kuchiki Byakuya/Yamada Hanatarou (amo esta pareja) y probablemente algo de Kurosaki Ichigo/Ishida Uryuu.
Aclaraciones: BLEACH: Este fic tiene Spoilders del capítulo 186 hasta los actuales. No veo el anime, así que si no sigues el manga, no leas este fic.
HARRY POTTER: Este fic tendrá Spoilders de los siete libros de Rowling. Así que si no has leído "Harry Potter y las Reliquias de la Muerte" no te recomiendo que leas el fic.
Habrá algunas cosas cambiadas, como por ejemplo las edades de ciertos personajes, ya cuando avance el fic se darán cuenta.
Advertencias: Lemon, Muerte de algunos personajes, algo de violencia, angst y tragedia. No estoy todavía segura sobre el Mpreg… ¿Raro, no?
Quiero advertir desde ahora que con este fic quiero incursionar un poco en lo "oscuro", principalmente en Harry, puesto que las tragedias que él ha vivido lo harán muy amargo y desequilibrado. No pienso que todo deba ser flores y mariposas como en el Epilogo del libro :S
Aclaraciones de lectura:
-Letra normal: dialogo, relato.
-Letra en cursiva: pensamientos de los personajes. Y ocasionalmente usaré la cursiva para poner charlas en inglés, pero yo avisaré cuando así sea.
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Prólogo.
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Kon corría con todas sus fuerzas, para que el Hamen no pueda alcanzarlo, pero no estaba haciéndolo muy bien, puesto que el gigante Grand Fisher estaba muy cerca suyo y al parecer, si no llegaba pronto alguien en su ayuda, Ichigo se iba a quedar sin cuerpo. ¡Maldita la hora en que decidió salir a pasear a estas horas de la noche!
Finalmente, en medio de su carrera despavorida, el alma especial tropezó y cayó al piso, notando como el amuleto que le dio el padre de Ichigo caía de su cuerpo.
Y lo siguiente que pasó, fue demasiado rápido e increíble para que lo notara.
De la nada, una voz fuerte y aguda gritó: ¡Protego! y el Hamen chocó contra una pared invisible que lo hizo retroceder; al instante siguiente, Kon y el Hamen giraron sus cabezas para ver a un hombre parado junto a ellos.
Se trataba de un hombre bastante grande y musculoso, pero con todo delgado, con revoltoso cabello negro azabache que se paraba en todas direcciones, ojos verdes como las esmeraldas, anteojos pequeños y redondeados, y en su frente había una extraña cicatriz en forma de rayo. El hombre vestía algún tipo de túnica color negro, con detalles en rojo en la manga y en el cuello.
Estaba mirando al alma modificada con reprobación.
-Te dije que no te quitaras el amuleto –Su voz ahora era un siseo frío, que estremeció a Kon. –Y tú –Sus ojos se angostaron al mirar al enemigo –al fin te he encontrado… te he buscado por mucho tiempo. –Levantó una de sus manos. En ella tenía un palillo marrón que lucía gastado, pero con una onda de su mano, el palillo fue sustituido por una hermosa espada de color plata, que tenía piedras rojas en el mango. Kon inclinó un poco la cabeza y pudo llegar a distinguir las letras "indor" en la punta de la misma. –Finalmente tendré mi venganza.
-¿Quién demonios…?
Pero el Hamen no pudo terminar, porque en un abrir y cerrar de ojos, el hombre se inclinó hacia adelante y al instante siguiente el Hamen desaparecía, llenando el lugar de un grito de agonía.
-¿Cómo? Con un solo golpe.
Kon miraba con incredulidad a este hombre, que había salido de la nada para salvarlo. Pero, ¿no le había hablado del amuleto? ¿A qué se refería con "te dije que no te lo quitaras"? ¡Si ese amuleto se lo había dado el padre idiota de Ichigo! Sin embargo, los pensamientos de Kon se vieron interrumpidos por la llegada de otra persona.
-Maa… maa, llego tarde.
Kon giró su cabeza para ver al recién llegado y notó que era Urahara, así que respiró con alivio, puesto que no conocía a ese hombre que lo salvó y no sabía si es que ahora podría llegar a matarlo a él también. Pero Urahara no lo miraba, él tenía toda su atención concentrada en el extraño.
-Urahara Kisuke –murmuró el extraño, todavía dándole la espalda. Con otro movimiento de su brazo, la espada desapareció, volviéndose de nuevo al palillo y entonces sí el extraño giró-. Sí, debo declararme culpable de quitarte la diversión, pero ese Hamen me debía algo.
-¿Oh? –Hizo muecas. Así que sabe que es un Hamen y no un Hollow. -¿Y qué puede deberle un Hamen a un mago? Creí que su mundo y el nuestro no se juntaban.
El extraño angostó sus ojos al ver la actitud del otro. Él notó que si bien Urahara parecía despreocupado, su cuerpo estaba algo tenso. Y él no lo culpaba, después de todo, su energía mágica se debió sentir en todo Karakura.
-No, no lo hacen. Es por eso que no te voy a decir por qué estoy aquí.
Urahara sacó su abanico y comenzó a soplarse.
-¿Ni siquiera puedo saber su nombre? –engatusó-. Es una espada magnífica la que tenía recién y creo recordar haberla visto en algún libro de magia que se conserva en los archivos del Seretei.
-No, ni siquiera eso –murmuró frío, antes de caminar hacia donde estaba Kon, quien abrió los ojos en terror al verlo acercarse.
-Oh –Hizo un puchero infantil. -¿Y será que tiene que ver con sus motivos que este sea el cuerpo de Kurosaki Ichigo y ese haya sido el Hamen que mató a su madre?
El hombre se congeló y en un instante su varita estuvo en su mano, giró y se acercó a Urahara, haciendo que la sonrisa del rubio vacilara.
-Iba a irme sin hacer nada, pero usted es muy entrometido, Urahara-san.
-¡No, espere! ¡Solo bromeaba! –gritó aterrado, las energías mágicas eran muy diferentes a la de los Shinigamis y este hombre podría dañarlo seriamente. Así que se humilló, cayendo de rodillas el piso, implorando por no ser atacado.
Viendo que el hombre dudaba, angostando sus ojos, Urahara tomó su oportunidad.
-No diré nada, lo juro, por favor, no me mate –sonrió.
El extraño bufó.
-No iba a hacerlo, sólo iba a borrar tu memoria.
Los ojos marrones se abrieron como platos.
-Veo… -musitó el rubio.
-Sin embargo –susurró el otro hombre-, puede que te necesite de mi lado en el futuro, así que por hoy haré una excepción y dejaré que recuerdes este hecho.
Segundos después, Kon volvió a tener la atención de su salvador.
-Vamos, te llevaré a casa y permanecerás allí hasta que Ichigo regrese y no le dirás nada de esto, ¿entiendes?
-H-hai –musitó pálido.
-¡Espere! –Urahara sabía que se arriesgaba, pero tenía que saber.
-¿Qué? –gruñó el hombre, irritado.
-Sólo deseo un nombre –murmuró Urahara, casi tímido.
El otro suspiró exasperado y en un movimiento rápido, levantó el cabello que tapaba su frente. Inseguro de qué significaba esa acción, Urahara levantó sus ojos a la frente del hombre y cuando vio la cicatriz algo chascó en su cabeza. Sus ojos se abrieron como platos, mirando con incredulidad al mago.
-Cuento con su silencio, Urahara Kisuke –siseó el extraño, antes de darle una mirada dura a Kon, haciendo que éste lo siga sin chistar.
*Al día siguiente*
La puerta del despacho de Ishida Ryuuken se abrió y éste sonrió de lado. Típico de su hijo. A veces tenía actitudes tan de Gryffindor que él no sabía si ponerse a chillar o reír de la ironía. Sus ex compañeros de la honorable casa de Slytherin probablemente se reirían de él. No que él conservara algún tipo de contacto con ellos para que se enteraran de tal deshonra, claro está.
-Oigamos tu respuesta –dijo con voz grave.
-Yo, ¡quiero los poderes de Quincy!
En realidad son poderes que muy pocos magos Sangre Pura tienen… pero no hay necesidad que él lo sepa.
-¿Y…? –incitó.
-Lo juro. Nunca más… me mezclaré con los Shinigamis… o con sus aliados.
Hmph. Terrible. Puedo ver la mentira desde lejos. Pero esto es toda mi culpa, si no hubiese abandonado mis creencias de sangre pura para mezclarme con los muggles, mi hijo ahora no parecería un Hufflepuff en vez de un Slytherin.
-Perfecto, empezaremos mañana. Ahora sal de mi vista, que estoy ocupado.
Continuará…
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-.-Importante: fíjate que te molestó en mi fic y que te agradó. Dímelo. Pero trata de mantener la cortesía y hazlo de una manera que pueda entender.-.-
Notas finales: ¡Buenas, mis estimadas lectoras! (¿Y lectores?) después de tanto tiempo, vuelvo a publicar un fic, el prometido. Wow, me siento un poco extraña, sé que son nada más que dos meses, pero se siente como años desde que no publico nada XD Pero sirvió la verdad, este descanso. Si bien todavía no tengo todo mi tiempo disponible, decidí publicar hoy, puesto que les hice una promesa :D
Sí, sí, muchas no deben entender nada, pero como ya dije, las advertencias tienen mucho que ver con este capítulo ;O
No estoy muy segura cómo va a ser la frecuencia de actualizaciones, pero por ahora creo que serán de una vez por semana. Así pues, este fic se actualizará todos los miércoles ;P
¡Gracias a Ros Potter por betear este cap!
Nos leemos~
Atte: Uko-chan.