El frio viento de enero soplaba con fuerza en aquel viejo pueblo donde el invierno había golpeado tan brutalmente, las frías brisas del invierno que se filtraban por ese viejo consultorio podían fácilmente opacar las débiles brasas que aun quedaban en la chimenea, dentro de aquel cuarto oscuro y horrendo en el que el único mueble que quedaba era un destartalado escritorio junto al que descansaba el que alguna vez había sido el orgulloso doctor de aquel lejano pueblo.

Dr. kubrick, hace mas de 10 años el había sido un verdadero genio dentro de su campo, siempre en la vanguardia en cuanto a medicina y ciencia en general se trataba, pero después de una vida llena de excesos su cuerpo se hallaba denigrado y al borde de la muerte.

Todo a su alrededor combinaba con la decadencia de su cuerpo, desde el piso carcomido hasta el techo lleno de goteras, al igual que su salud y sus finanzas su vida personal era tristemente vacía pues no había nadie con quien compartir sus últimos momentos, nadie excepto esa carta que descansaba sobre aquel destartalado escritorio, esa carta donde había dejado caer todos sus temores, esa carta que había escrito con desesperación antes de morir, no contenía más que unas cuantas líneas llenas de horror y desesperanza, guardada torpemente en un sobre arrugado en el que solo se alcanzaba a leer una dirección, la dirección del único amigo que había tenido en toda su vida, Lynn Loud senior.


Esa mañana Lincoln Loud se había levantado temprano para poder jugar con la nieve en su casa, quería aprovechar que aún le quedaban dos semanas de vacaciones después de las fiestas y aun cuando su madre se había ido el fin de semana pasado en una gira para promocionar su libro aun así quería disfrutar de lo que le quedaba de tiempo libre antes de que "la reina del no empezara" a darle ordenes.

Traía su volador valiente en las manos y estaba dispuesto a recorrer todas las colinas de la ciudad pero antes de que llegara a la calle algo curioso paso, de pronto volteo hacia el buzón como si una fuerza invisible lo obligara y ahí fue donde vio aquel pedazo de papel que sobresalía en el, era casi como si estuviera esperando por él.

A toda velocidad entro a casa cargando la carta.

-¡chicas vean lo que llego por correo!

-¿qué es eso?-pregunto Leni genuinamente confundida

-es una carta leni-contesto Lincoln con algo de fastidio.

-a claro, ¿y que es una carta?

-es como twitter para viejitos-dijo Lori tratando de hablar en Lenines.

-¡¿nos llamaste solamente para ver el correo?!-grito Lola molesta por la interrupción a su sueño de belleza.

-miren a quien está dirigida.

-¿Lynn Loud?-dijo Lori al tomar la carta de las manos de Lincoln

-¿es para mí?-pregunto Lynn confundida.

-no tonta, Lynn Loud senior, ósea papa.

Durante un momento todos bajaron la cabeza, su padre había muerto hace un año y medio víctima de una fuerte cirrosis.

-¿y qué hacemos?, ¿la abrimos?-pregunto Lana.

-debo señalar que abrir correo que no está dirigido a ti es un delito-dijo Lisa mientras se acomodaba los lentes.

-pero podría ser algo importante, además no es como si papa lo fuera a leer.

Todos se reunieron alrededor de la misteriosa carta mientras la mayor la abría con sumo cuidado, previo a la carta real había otra escrita por la comisaria de un pueblo llamado Olds Castle.

Estimado señor Loud

Nos apena informarle que el señor Alexander Kubrick ha fallecido, víctima de una sobredosis de cocaína, entre las pocas posesiones que tenía se encuentra la carta que usted acaba de recibir la cual estaba destinada a usted, su última voluntad fue que usted recibiera esta misma y que su contenido fuera tratado con la máxima discreción.

Sin más que decir nos despedimos.

Atte.

El depto. De policía de Olds Castle.

-uh, una carta de un hombre muerto a otro-dijo Lucy emocionada-siniestro.

-ah eso es a lo que deben llamar correo muerto, ¿entienden?-rio Luan mientras contaba otro mal chiste-por eso dicen que escribir cartas es un arte muerto.

-Luan por favor, no es el momento.

Con más expectativa aun los chicos tomaron el pedazo de papel que estaba dirigido a su padre y siguieron leyendo.

Encima de un papel arrugado con letras grandes y mal escritas se leía lo siguiente.

Lynn tenias razón, no logre hacerlo, por favor no vuelvas jamás.

-¿Eso es todo?-pregunto Luna confusa.

-obviamente, esta carta estaba dirigida a nuestro padre, solo el sabría lo que significa-contesto Lisa pragmática.

-¿entonces qué hacemos?

-creo que jamás sabremos lo que trataban de decir-contesto Lori desilusionada.

-hay un lugar donde podríamos descubrirlo, en Olds Castle.- respondió Lincoln con decisión.

-¿estás loco?, no vamos a ir a un pueblito en quien sabe donde solo por una carta.

-además la carta nos indica que no vayamos.

-pero, es… ya saben, por papa.

-la respuesta es no-dijo Lori llevándose la carta para poder tirarla después.

-no es justo Lori.

-la vida no es justa, ya deberías saberlo.

Y mientras su hermana se dirigía hacia su habitación Lincoln siguió la carta con la mirada, sabía que no sería la última vez que la vería.