- Yuu-chan, huyamos juntos. - zafiros verdes se encontraron con unos ojos azules penetrantes.
- Mis compañeros, Mika, no los puedo abandonar. - admitió algo que jamas diría frente a sus compañeros.
El vampiro tomo las manos del oji-verde y lo acerco hacia si.
- Yuu-chan, ellos saben cuidarse solos... Vámonos los dos juntos a un lugar lejos de todo esto. - apunto con la mirada el ecenario que los rodeaba.
Vampiros matando humanos, humanos matando vampiros, muerte, sangre, sufrimiento, dolor. Todo eso era lo que rodeaba a ambos chicos tomados de las manos mirandoce a los ojos.
- y-yo.. - el oji-verde no se reconoció a si mismo al notar que temblaba y tartamudeaba.
Mikaela alzo al estilo princesa a Yuu a una velocidad increible, mientras Yuu desenvainaba su espada y mataba a un vampiro que salto hacia ellos.
- Yuu-chan... Vamos..
Yuu no contesto solo se dejo llevar alzado notando que Yoichi, Kimizuki y Shinoa intentaban seguir el paso de Mika.
- ¡Virgen idiota, safate! - le grito Shinoa, o mas bien, fue lo último que escucho pues perdió el conocimiento.
