Disclaimer: El universo de Crepúsculo no me pertenece, ya que es propiedad de Sthepanie Meyer. La trama es mía al igual que algunos personajes creados por mi. Y el fic es sin ánimo de lucro, sólo para entretener a los lectores.

MAS ALLA…DE TU AMOR.

Este será un fic cortito, espero les guste, creo que me estoy aficionando a los tristes, bueno, les dejo el capitulo. Esta historia se sitúa en la fiesta de dieciocho años de Bella en casa de los Cullen

Besos

Bella Cullen H.

Emmet había ido por mí a la casa, me dijo que Alice y Edward habían tenido que salir para traer mi regalo. Enfurruñada, subí, anhelaba tener a Edward junto a mí. Era una realidad, no podía vivir sin mi Edward, y al pensar en Alice, me dio miedo, esa pequeña granuja podía hacer mil diabluras y no sabia con que saldría esta vez. Pero a todos los amaba. Incluso Rosalie, si aunque no lo crean a ella también. Porque a pesar de su hermosura, Edward nunca la amó, su amor es mío.

Al llegar a la casa de los Cullen todo estaba adornado a lo Alice: En grande. Me sentí abrumada con los lazos vaporosos de seda rosa y las velas por doquier dando un aspecto muy romántico. El pastel en la mesa era descomunal, ya sabía que había sido idea de Alice.

Esme muy contenta me dio su regalo al igual que Carlisle y Emmet junto con Rosalie, Jasper sonrió y me entregó el suyo. Me sentí abochornada, no me gustaban los regalos, pero a insistencia de Esme, abrí el de ellos.

Todo pasó tan rápido que aún no lo comprendo bien. Al jalar el listón, mi dedo se cortó con él, brotó una sola gota de sangre y justo en ese momento, sólo sentí una fuerza demoledora que me hacia caer mientras un dolor agudo en el cuello, y luego algo caliente que brotaba de mi. No pude sentir que cayera nada pues Jasper era quien se había arrojado sobre mi, entre Emmet y Carlisle trataron de quitármelo de encima, mientras el succionaba mi vida rápidamente, cuando por fin lograron apartarlo de mi, casi estaba sin vida, los ojos de espanto de Esme y Rosalie se reflejaron como grandes espejos, donde me pude ver. Yacía tirada en el suelo, con un gran hueco en mi cuello, donde estaba la yugular. Rosalie salió para ayudar a Emmet y Carlisle entró para ayudarme, Era un espectáculo desolador, Esme gritaba desesperada, mientras Carlisle trataba de salvarme, fue inútil. Antes de expirar pronuncie su nombre:

-Edward…-no alcancé a decir más, vi una sombra borrosa que llegaba a mi y luego oscuridad. Había muerto.