Voces del pasado

"Recuerda, recuerda ese 5 de noviembre.

Conspiración, pólvora y traición.

Nadie podrá decir que tan espantosa traición y en el olvido quedó…"

A mi memoria acuden imágenes y sonidos de un pasado distante, fragmentos de una vida perdida cuyo sabor a sangre rememora palabras malditas de la historia ficticia.

Lo sé, en efecto, cuando situaciones imposibles repercuten dentro de nuestras vidas la única y sencilla frase que emana de nuestros labios es: "No es posible"

Recuerda, recuerda…

Recuerdo los gritos de dolor y terror, rostros desesperados e inocentes que pedían perdón sin ser, en realidad, culpables de ninguna acción.

Recuerdo a las madres ordenando a sus hijos que escaparan sin vacilación…

-¡Es imposible! – exclamo en medio de un grito agonizante. El hombre me observa, no puedo ver sus ojos, pero sé que me observa. Cada movimiento, pestañeo y suspiro…

-¿Qué te parece si retrocedemos 10 años? – me pregunta con voz socarrona y sujetando firmemente mi barbilla.

Recuerdos y pesadillas, ya no puedo decir que existen diferencias si es que hubo alguna…

DESAPARICIÓNES

10 años antes…

Una tormenta azota en las calles de Jump City (clima hostil que presagia el inicio de una vida llena de tormentos y dolor). Dos jóvenes héroes juegan videojuegos, uno de ellos se aproxima torpemente hacia la ventana a observar con detenimiento las gotas de lluvia que ferozmente impactan contra el cristal.

-OH, viejo, este clima tal vez no sea el peor de todos, pero definitivamente hace que el día sea ¡ABURRIDO! – se quejó Chico Bestia mirando melancólico a través de la ventana. Acto seguido, deja escapar un leve suspiro de resignación y regresa a su lugar en el sofá donde reposa un control del videojuego el cual recoge para luego oprimir el botón de "Start"-. Ni siquiera los criminales se encuentran de ánimos para salir a que les pateemos el trasero - continuó refiriéndose al joven de piel achocolatada y de gran tamaño que se encontraba a su lado -. Con decirte que ni Rob…

- ¡BUYAH! una vez más, Bestita, he barrido el piso contigo – informó Cyborg con grito victorioso al incorporarse de un salto.

-¡Eso no cuenta!

-Admítelo, simplemente no puedes estar a la altura del grande y poderoso ¡Cyborg!

-¡Exijo un recuento!

-No hablarás en serio.

-De algún modo, Robin y tú modificaron el videojuego para bloquear y arruinar todos mis movimientos.

-¡¿Qué dices?!

-No intentes negarlo. Eso explica el por qué Robin continua encerrado en su habitación siendo casi las 3 de la tarde. Lo planearon todo durante la noche…

-Bestita, lamento informarte esto, pero sufres de esquizofrenia.

-¿Qué me rociaste con Ofelia?

-Olvídalo.

-Siempre hacen lo mismo. ¡Esto es un Complot!

-Responde: ¿Cuántas contusiones has recibido durante las últimas dos semanas?

-¿Conjunciones? Viejo, no me tortures con gramática. ¿No les bastó con esa asquerosa pasta de carne disfrazada de puré vegetariano?

-¿Te refieres al paté de queso de cerdo?

-¡Esa "cosa"! ¿Por qué no me dijeron que era carne? ¡Tuve indigestión por comer eso!

-¿Tu? – preguntó incrédulo - ¡Me vi forzado a ir a la ciudad a comprar tres hamburguesas! Pero ni eso fue suficiente para reemplazar el delicioso…

-¿Delicioso? ¡Fue asqueroso! Y esperé toda la semana para vengarme. Solo que…

Al entender la mirada ansiosa del chico verde, Cyborg se decide a evaluar rápidamente los alrededores en búsqueda de algo o alguien en cuya ausencia no había advertido:

Raven, callada como siempre, se debatía entre cambiar la amarillenta página de su libro o usarlo de matamoscas contra un diminuto mosquito… una escena bastante cómica juzgó y, de inmediato, una sonrisa curvó sus labios, la misma que se desvaneció en cuanto sus ojos enfocaron a la joven extraterrestre quien, inmersa, intentaba ocultar algún sentimiento evidentemente contradictorio.

-Ha estado así toda la semana – puntualizó una voz triste a su lado –. Casi ni come, Robin debería darse cuenta, pero desde que se volvió un amargado no habla con nadie.

-¿Qué estás diciendo, Bestita?

-Solo que Star debería dejar de preocuparse tanto por "Robin-bot", debiste ver lo que le hizo ese patán la otra noche: "¡Le gritó hasta quedarse sin aire y, después, le cerró la puerta en la cara!" - dramatizó Chico Bestia haciendo ademanes torpes con las manos

-Tuvieron una discusión… no es para alarmarse. Debes entender que Robin tiene secretos… como todos y, siendo sincero, no deberías meter tus orejotas donde no te llaman.

-¡Yo no los espiaba! Salí al baño y por accidente los escuché.

-Da igual, Star es quien me preocupa.

-Sí, preocúpate porque El Capitán Investigación ha regresado.

-Déjate de idioteces.

"El Capitán Investigación" No, Cyborg aún no olvidaba la primera vez que Chico Bestia utilizó ese sobrenombre para referirse a su líder. Sin duda, los acontecimientos de las últimas semanas señalaban indudablemente que pronto tendrían que afrontar una situación similar y la indiferencia de Robin sólo podía advertir peligro... Muerte.

-Algo planea- concedió derrotado tras una avalancha de recuerdos que invadieron su mente; tomó una gran bocanada de aire y dirigió su atención a la pelirroja quien mantenía una actitud melancólica, casi derrotada. Apenas y se observaba el débil movimiento de su pecho al inhalar y exhalar mecánicamente sin preocuparse demasiado en coordinar sus demás movimientos. La observó largo rato cayendo preso de alguna clase de hipnosis que lo obligaba a evocar antiguos recuerdos de un pasado doloroso.

-… ¿Cy? ¿Viejo, me oyes? ¡Tierra llamando al Gigante de Hierro! ¡Responde!

-Ella sabe algo.

-¿Quién? – interrogó dejando entrever abiertamente su confusión ante la reacción de su amigo.

-O quizás sólo… de acuerdo, iremos a echar un vistazo- agregó haciendo una señal con la cabeza en dirección a la puerta metálica. Cinco segundos después y los dos superhéroes se encaminaron a la habitación de su líder sin decir una palabra más.

...

-Troya ardió por que los dioses así lo quisieron. Y el detonante fue una mujer – susurra junto a mí oído sujetándome con fuerza del mentón y besando mi yugular con una urgencia tal que roza en el delirio.

No reconozco este sentimiento. ¿Puede ser acaso eso que los humanos llaman "odio"? Duele... Me enfurece. A mis venas las lastima la misma sangre que las recorre líquido impuro, ¡acido del inframundo que condena mi existencia!

Sorpresivamente, algo ejerce presión sobre mi pecho deteniendo los débiles latidos de mi corazón y me pregunto si será la dulce muerte que por fin ha de llamar a mi puerta. Millones de imágenes revolotean en mi mente a ritmo vertiginoso declarando que sólo se trata de la agonía que ha tomado por ropas los destellos de la falsa esperanza; la consumen las llamas, se reduce a cenizas y de mis labios emanan dos únicas palabras: "Te odio"…

Él lo sabe y se burla, me ha obligado a pasar las noches como una simple muñeca de trapo... un juguete… una diversión perversa.

-Ahora yo poseo la manzana dorada y he de entregarla al joven e inexperto Paris – pronuncia entre gemidos y acomodando mi pierna de modo que envolviera su cuerpo teniendo estricto cuidado en no intimar más allá de su pequeño "juego".

El poder lo seduce, 10 años no han bastado para que yo comprenda la excitación que lo embriaga al destruir el mundo, más que eso, despedazar vidas.

El tiempo… la vida, todo carece de sentido, nunca antes había tomado, a ojos de la humanidad, un matiz más absurdo...

...

¡EMERGENCIA! – gritaba alarmado el joven de piel achocolatada a través del altavoz. Las puertas se abrieron tras un fuerte golpeteo dando paso a las dos Titanes faltantes.

-¿Qué sucede? - preguntó la chica encapuchada

-¡ROBIN ES UN MANIACO, UN PARANOICO OBSESIVO! – puntualizó eufórica la voz de Chico Bestia quien se extrañó ante el imperturbable semblante de su amiga que, al parecer, aguardaba serenamente por algún desenlace.

-¿Ya terminaste?

-¡Lo hizo de nuevo! ¿Es que no lo entiendes? – replicó el chico verde - ¡Tenemos que llevarlo a ARKHAM!

-¡BASTA! – intervino preocupada la joven tamaraniana interponiéndose entre sus dos compañeros - ¿Qué tratan de decir, amigos? ¿Dónde está Robin?

Nadie respondió, se miraban los unos a los otros pidiendo un poco de apoyo a sabiendas de lo que sucedería a continuación. Starfire miró suplicante a Cyborg y le pidió en silencio por una explicación a lo cual el joven cedió con esfuerzo. Caminó hacia la pelirroja y con expresión torturada le tomó del hombro...

-Star– meditó en busca de las palabras adecuadas pasándose de forma nerviosa la mano izquierda sobre la cabeza. ¿Cómo explicarlo? Se preguntó –… Él no está y no responde al comunicador.

...

-Hace años, una epifanía cambió mi visión de las cosas. Ahora estoy en busca de algo trascendente y todo se reduce a ti, dulce discordia – murmura divertido -. Dime, ¿qué sentiría tu Robin si supiera que eres mi juguete de cada noche?… ¿Intentaría asesinarme? – esa idea parecía agradarle de sobremanera.

Casi tres meses de lucidez mental, y lo único que puedo garantizar a cualquiera que envidie mi realidad es que esto no es un sueño, es una pesadilla.

Unos leves golpeteos en la puerta interrumpen el "juego" de mi verdugo y tras un severo gruñido se dispone a abrirla.

-Señor, ¿qué ha dicho? - Mis ojos los mantenía cerrados, a pesar de ello, identifiqué de inmediato esa voz insegura:

"Karras, renombrado y reconocido líder de un numeroso ejército de rebeldes tamaranianos. Nuestro matrimonio seacordó con el fin de unificar fuerzas militares".

-Nada que nos sea de interés…

-¡¿Qué le hizo?! – pregunta torturada la voz de Karras y, de inmediato, siento unas fuertes manos que sujetan mi cabeza en un vano intento por retener la hemorragia – Sangre – pronuncia aterrado. Afortunadamente, yo apenas era consciente del líquido cálido que escurría desde mi sien hasta llegar a la punta de la nariz.

-Deja de preocuparte… ella es una traidora ¿Recuerdas?...

Sé que mi experiencia de la vida es escasa y lo poco que he aprendido se ve constantemente cuestionado por las personas con una formación un tanto más estratégica.

Sin embargo, mi conocimiento acerca de las demás formas de vida se reduce a un simple patrón de conducta: "Traición-venganza"

...

Starfire permaneció estática tras cruzar la puerta; su rostro (oculto bajo su cabellera rojiza) no mostraba signos de emoción y sus ojos se mantenían fijos en algún punto inexistente sobre el suelo – Lo encontraremos, Star. Lo prometo – murmuró Cyborg detrás de ella –. Ya verás como todo saldrá bien.

-Soy la culpable- susurró dejando escapar un par de lágrimas que se deslizaron lentamente por sus mejillas.

-Por favor, no puedes culparte por todo. Robin no está, de acuerdo, pero no es la primera vez que sucede esto, es decir…

-No lo entiendes…

...

-Solamente necesitamos su ubicación. Kori, es necesario.Sabes que mi único deseo es protegerte, asegurar tu libertad... Nuestra felicidadme suplica susurrante, claramenteluchando por conseguir alguna vacilación de mi parte - Pedí que se te convocara a una nueva audiencia con el Consejo de Ancianos, una última oportunidad y eso significa que todo volverá a ser como antes…

-Deja de esforzarte – ordena Slade con marcada autoridad y de un codazo logra apartar al tamaraniano de mi lado -. Haremos esto de una forma u otra y, a decir verdad, he pensado que nos será de mayor utilidad como "carnada" - declaró y de inmediato comprendí el significado implícito en sus palabras.

Me tomó del cuello, elevó mi cuerpo algunos centímetros y, haciendo un rápido movimiento, logró arrojarme hacia el otro extremo del laboratorio donde impacté ruidosa y dolorosamente contra una vitrina de cristal quealbergaba incontables utensilios quirúrgicos.

-¡Eso no estaba en nuestro acuerdo!

- ¿Acuerdo? ¿Ya olvidaste lo que ella hizo?

El tamaraniano no contestó y se limitó a dirigir una mirada de ira antes de impactar su puño contra la pared metálica.

-Ella… - murmuró dirigiéndome una mirada significativa que sostuve con la intención de comprender su desprecio hacia mí.

¿Cuánto odio puede cultivar una persona? ¿Cuánto odio es capaz de soportar un individuo antes de perder el control?

Ciertamente, esperaba hallar esa respuesta en los ojos de Karras... Deseaba entender más no me encontraba en condiciones para enfrentarme a la realidad:

"Él parecía ser víctima de un infierno psicológico..."

Pasaron los minutos y, finalmente, el tamaraniano dirigió el resto de su atención a la expresión socarrona de Slade quien le dirigió otra mirada autoritaria advirtiéndole sobre alguna reprimenda. Karras se dio por vencido y salió dando grandes zancadas; acto seguido, escuché el deslice de un cajón metálico, y poco después, sentí el frío tacto de la punta de un bisturí sobre mi vientre.

-Lo preguntaré una última vez: "¿Dónde está?"

Slade esperó impaciente una respuesta y, aunque él sabía que nunca la obtendría, mantuvo una sonrisa de suficiencia. Arrastró un pequeño mueble con artefactos quirúrgicos hasta situarlo a escasos centímetros de mí y se sentó fingiendo serenidad…

-10 años – susurró por lo bajo -… Confío en que no habrá necesidad de explicar a detalle el papel que desempeñas, ¿cierto mi dulce Helena*? Simplemente, basta con entender que toda partida de Ajedrez ha de culminar con un "Jaque mate" – advirtió con tono severo y pronto sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal.

-Tan astuto… El simple hecho de matarte fue un movimiento que pasó como una sombra ante mis ojos – meditó sin girarse y, antes de darme cuenta, ya había sujetado sorpresivamente mi barbilla -. No te sientas mal, niña. Pues no muchos pueden presumir de una posición tan noble en esta partida.

...

Jump City 10:31 pm

-BIP-BIP

-¿Qué quieres? - contestó malhumorada la joven encapuchada.

-¡Oye! era la voz de Chico Bestia quien, tras una ardua investigación que lo había obligado a recorrer las alcantarillas de la ciudad, se reportaba a su amiga en un intento por mantener la cordura -¡Ahorra tu sermón para cuando encontremos al Paranoico! Escucha, Raven. Yo… no quiero decir nada de esto a Cy porque… bueno…

-¡Ve al grano!

-Rae, no puedo… es… es… esto es peor de lo que pensábamos. Robin… lo más seguro es que ni siquiera sepa en qué se está metiendo.

-Explícate ordenó la joven gótica con aparente serenidad.

-Cadáveres en descomposición, cientos de ellos.

-Esto es muy delicado, Chico Bestia.

-¡¿Delicado?! ¡No lo entiendes! ¡¿Cómo puedes actuar de esa forma?! ¡Yo los vi! ¡Apilados uno sobre otro! "¿Cómo puede reaccionar de esa manera?" Fue la primera pregunta que cruzó por la mente del chico verde. No estaba seguro de si envidiar o enloquecer ante la actitud antipática que acababa de adoptar su amiga.

-Tienes que calmarte y decirme dónde los encontraste.

-En los subterráneos del sector once.

-¿Cerca de las minas? - preguntó estupefacta y, a pesar de haber hecho un esfuerzo olímpico por mantener un semblante inescrutable, Chico Bestia advirtió en ella y, apenado, dejó a su mente divagar entre los horrendos recuerdos de lo que había presenciado apenas un par de horas atrás:

"Tras registrar meticulosamente el sector que se le había asignado, en su camino, tropezó con un grupo numeroso de ratas que animosas anunciaban un gran festín; las siguió con la esperanza de encontrar un cuartel criminal secreto con mucha comida o algo por el estilo, sin embargo, en tanto más caminaba entre los túneles, un olor peculiar impregnaba el ambiente. Chico Bestia sintió que su cuerpo (que había adoptado la anatomía de una rata) experimentaba una sensación similar al deseo sexual, una especie de frenesí.

Cientos de cadáveres, apilados ostentosamente como figurando una obra de arte hombres, mujeres y niños el asesino parecía no tener un interés específico en cuanto a género o edad…

-De cien a ciento cincuenta víctimas – murmuró por lo bajo esforzándose pormantener el control - y todos formaban parte de ese asqueroso rostro.

Raven meditó en esas frases incoherentes por unos segundos…

-¿Los cuerpos… tenían alguna peculiaridad?

-Si llamas "peculiaridad" a un montón de símbolos raros trazados sobre la piel, entonces sí.

-Y ¿Starfire?

-No se ha reportado. Rae, ¿qué está pasando?- la joven no contestó de inmediato puesto que no tenía una respuesta y el solo hecho de pensar en lo inútiles que resultaban sus poderes le era frustrante. Giró su cabeza en un movimiento involuntario al sentir una presencia que de inmediato reconoció como Robin. Enfocó la vista y estudió a detalle los alrededores hasta percatarse que la presencia ya había desaparecido.

-No quiere que lo encontremos…

-¿Qué has dicho?

-… es inútil– declaró ignorando la interrogante de Chico Bestia quien la miraba a través del comunicador.

-Raven…

6 de noviembre del 2008

Ciudad Gótica 6:01 am. / Mansión Wayne:

-Bienvenido a casa, señor – saludó solemne el viejo mayordomo acercando una charola con alimentos a su Amo; éste se mantenía inmerso en sus pensamientos - Perdone mi atrevimiento – indicó en un nuevo intento por llamar la atención - pero siento una profunda curiosidad por conocer los motivos de su "visita" a Jump City. ¿Tiene que ver con el Amo Richard?

-Por desgracia, sí. Y aunque era de esperarse debido al "regreso" de Zucco, surgieron algunas complicaciones…

-¿Complicaciones, señor?

-Es algo de lo cual Clark no debe enterarse.

-No comprendo, señor. ¿Qué tiene que ver Clark Kent en este asunto? – confesó el mayordomo sintiendo que un escalofrío le recorría la espina dorsal.

-La capturaron, Alfred. Ellos la secuestraron y planeaban utilizarla para catalizar la energía en su cuerpo...

-¿Y qué sucedió? – interrogó preocupado al atisbar en las facciones de su Amo - ¿Ella está…?

-En efecto, supuse que su sistema alienígeno era capaz de soportar tales niveles de radiación, y así debió ser…

-Joven Bruce…

-Estaba embarazada. El embrión era un híbrido de humano por lo que la radiación lo mató… más que eso, estalló...

San Francisco/California: 8 de noviembre 2008 / 6:24 am.

Cyborg caminaba con paso firme sin prestar atención a las gotas de lluvia que lo empapaban. Detiene su paso al encontrarse frente a un viejo y desolado edificio en cuya entrada se alcanzaba a leer con letras descoloridas "LABORATORIOS S.T.A.R."

-Es nuestra única esperanza – suspiró profundamente y emprendió la marcha…

No hacía falta explicar las condiciones ruinosas con las que se encontró a medida que se adentraba en la construcción: "Pequeños roedores que corrían despavoridos intentando llegar a sus madrigueras para refugiarse, asquerosos rincones repletos de moho e insectos rastreros y un desagradable olor fétido que se percibía con mayor facilidad en cuanto el joven caminaba sin saber qué más esperar".

-¡Hola, hay alguien aquí! ¡Estoy buscando a Silas Stone!– al escuchar unos crujidos tras de sí se gira y es atacado por un rayo que lo impacta violentamente contra un muro metálico - ¡Oye, cómo te atre…! - no hubo tiempo de reaccionar y esquivarlo, su visión se volvía borrosa en cuanto los segundos trascurrían. Una silueta grande se acercaba peligrosamente a él…

"Es el fin" (pensó y, derrotado, dejó que la oscuridad lo envolviera)

-¿Hijo? – susurró con tristeza el anciano arrodillándose a un costado del chico mitad robot quien yacía inconsciente en el suelo.

Ciudad Gótica: 8 de noviembre 2008 / 7:02 am.

-¿Raven, ya podemos volver a nuestro caliente y cómodo hogar? – preguntó soñoliento el Chico Bestia arrepintiéndose al instante tras contemplar la mirada envenenada que le dirigió la joven gótica y se limito a seguirla sin decir una palabra.

- Robin me ha bloqueado el acceso a su mente – confesó de repente dejando al descubierto la frustración que eso le causaba –, y a Starfire… no puedo sentirla.

-¿Eso qué significa? – preguntó preocupado al atisbar algo extraño y de inmediato temió por que Raven pudiese perder el control; no era común que ella se mostrara tan ansiosa y ello definitivamente presagiaba algo malo. Tantas ideas y contradicciones le hicieron perder el equilibrio al tropezar accidentalmente con un apilado de basura.

-¡¿Quieres fijarte por donde caminas?! –rugió incinerándolo con una mirada escarlata – No pretendo cargar con tus estupideces y te advierto que si te lastimas no voy a… - Calló al escudriñar en la expresión horrorizada de su amigo e intentó recobrar el control recitando algunos mantras.

-¿Raven? Lo siento, es sólo que tantas coincidencias me lastiman el cerebro.

-No existen las coincidencias. La vida toda es una gran cadena cuya naturaleza se manifiesta a la sola vista de un eslabón aislado, lo que quiere decir que alguien ha comenzado una partida de ajedrez y la verdadera pregunta que deberíamos hacernos es: "¿De quién es el próximo turno?".