Sueño con serpientes,

con serpientes de mar,

con cierto de mar y de serpientes,

sueño yo.

Sueño con serpientes, Silvio Rodríguez

Marca de serpiente.

Lo busca para que la lastime, para que la destruya poco a poco: Dientes, lengua y manos ayudando a sacar rosas de sangre de sus venas, violetas con hojas verdes en la piel de leche. Ella gime, lágrimas escapando de sus ojos mientras echa la cabeza hacia atrás, los dientes de él tan agudos como sus palabras en su cuello, donde palpita el ritmo de su vida, su mano moviéndose a un ritmo frenético entre sus piernas que están por vencerse.

- Di mi nombre... – le susurra, sus labios extrañamente suaves en el caracol de su oreja, moviendo su cabello levemente antes de penetrar con la lengua su oído, la mano que sostiene su cuello, como si fuera un cachorro desobediente, tensándose en la cabellera, haciéndola bruscamente para atrás, besando y mordiendo con tanta fuerza su cuello que siente la piel romperse para que él, como vampiro, lama las gotas escarlata con cuidado y lentitud, permitiendo que una recorra el camino por su hombro, su clavícula, y se pierda por el valle entre sus senos.

Lo busca porque la hiere igual que él.

- Draco...-

Y cuando él sonríe, Ginny casi puede ver la marca de la serpiente de Tom Riddle en su rostro.