Galia despertó asustada en la penumbra de su habitación, su corazón le decía que algo pasaba, segundos después escucho un fuerte ruido "Espina… Murtagh" pensó con pánico.
Salió de la cama y en camisón sin calzado ni abrigo salió corriendo de su habitación, no necesitaba luz, conocía el camino perfectamente a la parte mas alta del castillo, el lugar que albergaba al gran dragón rojo y a su jinete. De prontó escuchó el grito de dolor del dragón y corrió aun más rápido, sin aliento llego a la parte alta del castillo y abriendo la puerta que daba a las murallas, el viento helado la golpeo desorientándola y tirándole el cabello hacia el rostro.
- ¿Qué crees que estás haciendo?- exclamó una voz masculina
Sin hacer caso a la voz, se despejó el rostro y avanzó decidida hacia la gran mole que se distinguía en la penumbra
- Espina esta bien? Esta herido? Murtagh?- preguntó ya cerca
- Estará bien, si nos ayudas – dijo Murtagh
-Claro, dime que hacer
-Solo pon tu mano sobre la mía y la magia se encargará del resto
Galia observó al dragón y vio que tenía diversos cortes y que temblaba, también percibió que Murtagh estaba agotado, entonces puso su mano sobre la de Murtagh y sintió como la energía salía de ella para ir a través de Murtagh hacia Espina curándole los múltiples cortes, se dejo llevar por la sensación y un gran sopor y cansancio que laenvolvían la obligo a cerrar los ojos porque se entia caer.
-Galia, despierta!!!
"Galia"
Ella abrió los ojos y se encontró en brazos de Murtagh y detrás de él se encontrabá el gran rostro del dragón rojo.
-No sé qué hacer contigo, si no fueras como mi hermana y te quisiera tanto, te molería a palos por lo necia que eres, como se te ocurre dejarte llevar y si te hubiera extraído toda tu energía, te habría matado.
-Confio en ti – río burlonamente
Un cosquilleo en su mente le dijo que Espina quería comunicarse con ella, debía ser algo importante para el ya que sabía que Galia protegái su mente en todo momento. Abrió su mente por unos momentos y sintió la furia del dragón en su mente
" muchacha insensata, casi te mueres, como eres tan irresponsable y encima andas por el castillo en ropa de dormir..".
Galia cerró su mente y le dijo al dragón
-Lo siento mucho solo es que estaba preocupada por ustedes, pero cuéntenme que ha pasado, te encontraste con el traidor y su dragona.
-si y resulta que – respondió él secamente
En ese momento apareció en el umbral del recinto el rey Galbatorix
Galia se inclino ante él murmurando " mi señor"
El rey sin mirarla dijo
-Galia ve a tu habitación, Murtagh debe explicarme porque esta aquí sin la dragona.
Sin atreverse a contradecirlo Galia salió silenciosa sin ninguna respuesta y muchas dudas en su cabeza.
