Disclaimer: Inuyasha, Sengoku O Togi Zoushi es propiedad intelectual de Rumiko Takahashi.
Fanfarrón
por Onmyuji
—¡Kagome! ¡Mira lo que gané para ti! —Kouga se acercó a la azabache de apenas 10 años de edad, que se giró en dirección al origen de esa voz y encontró a su compañero de clase acercándose a ella con una sonrisa y un bonito canguro de peluche con un gran listón rojo.
La pequeña le miró azorada mientras una sonrisa comenzaba a dibujarse en sus labios. Luego miró directo a sus ojos azules, indecisa—. ¿Para mí?
Higurashi Kagome, la niña más (en su opinión) bonita de todo el cuarto grado, le miró como si estuviera a punto de cometer la maldad de quitarle un dulce. Pero ella le gustaba y por esa razón no le molestaba que tomara el premio.
El mismo que le tomó 26 intentos atacando patitos de hule con una pistola de agua y por el cual se había perdido ya la mitad de las atracciones a las que sus amigos, Ginta y Hakkaku, ya habían disfrutado sin él.
—Todo tuyo. —Repitió el niño de coleta alta, mientras Kagome le sonreía dulcemente, enternecida por la acción.
—¡Hey, Kagome! —Pero luego escuchó esa molesta voz.
Y cuando él y la niña se dieron vuelta para buscar esa desagradable voz que podría reconocer en cualquier parte, a cualquier hora y en cualquier momento, no supo exactamente cómo reaccionar.
Porque a escasos metros de donde él había logrado reunirse con la linda Kagome, el desagradable perro sarnoso de Inuyasha (el mejor amigo de la niña) se acercaba, sonriente y triunfal, llevando en las manos el oso de peluche más grande de toda la feria.
El que él había querido ganar sin mucho éxito.
—¿Este está bien para ti? —Cuestionó el niño de cabellos plateados y ojos dorados como el sol, mientras la sonrisa de Kagome se ensanchaba de emoción.
Kouga se cruzó de brazos con indignación. Porque ya sabía que a Kagome le gustaba Inuyasha, y el susodicho gustaba de ella también. Era obvia la manera en como el otro niño se desvivía por hacerla sonreír con cualquier cosa. Y era obvio que entre ambos había existido una rivalidad por la niña, prácticamente desde que se conocían.
—Fanfarrón. —Murmuró en voz baja, más celoso que otra cosa. Decidido a probar que también era digno de ser notado; y repitiéndose a sí mismo que él no se retracta ni se rinde.
Y por patanes como Inuyasha, menos.
Fin.
PS. Me siento como oxidada en el fandom y con una de mis OTP x.x por eso mi idea fue hacer algo así como una suerte de pequeña escena, inspirada en una serie de imágenes que vi en tumblr que abarcaban algo casi parecido a esto xD aunque no sé, no sé si hay algo que no me convence o qué x.x ¿ustedes qué opinan?
Estaba saliendo de mi bache emocional/inspiracional, pero creo que canté victoria demasiado pronto x.x así que aquí estoy de nuevo, desperezando los dedos, a ver si escribiendo pequeños drabble/viñetas, se me destraban las ideas y comienzo a escribir en forma x3!
Les agradezco sus comentarios, siempre son bien recibidos :3
Nos leemos muy pronto n.n
Onmi.
