Elsa acaba de girarse en la cama, era muy temprano y ya sentía el vacío el que Jack dejaba en su lado de la cama, no era que Jack fuera el tipo de persona madrugadora, sino que más bien, era el tipo de persona impulsiva, simplemente necesitaba levantarse.
Elsa lo sabia, y también sabia que se acercaba la navidad del hemisferio norte, esa navidad donde es invierno, y en el hemisferio norte siempre nevaba en la temporada de invierno (o bueno casi siempre), la chica parpadeó y se giró para ver a Jack poniéndose su polerón.
-¿Jack?- Dijo Elsa aún velada por el sueño.
-Aquí- dijo Jack poniendo su mano en la mejilla de Elsa- Aquí señora Frost-
La chica parpadeó -oh, callate- al fin lo veía a la cara -En tal caso, tú deberías aceptar el titulo de Rey-
-¿Rey de las nieves?- Dijo el chico pensativo -nah- lo rechazó negando con la cabeza.
-Debes admitir, que no suena mal- ella ahora estaba sentada.
-¿Que dirían los niños de mi?- Dijo el chico con una sonrisa.
-Pues que eres el rey más raro que existe- Dijo con intención de molestar, ambos se rieron por un largo rato.
-No te vayas- Dijo de pronto ella, mirando al piso.
-Debo irme- Dijo Jack por primera vez frunciendo el ceño -Ven conmigo-
-No estoy segura, mi lugar esta aquí, en el polo norte, cuidando de la nieve eterna- Dijo Elsa dudosa.
-Elsa eres el espíritu de libertad, deberías hacer todo lo que quieras hacer- Replicó él.
-Si, pero con la libertad también esta la responsabilidad- Elsa hizo una media sonrisa -Ademas le prometí a Norte pasar una temporada con él-
-Él no es importante- Dijo el chico
-Si, lo es y lo sabes- Dijo Elsa haciendo una media sonrisa.
Jack iba a decir algo pero se quedó en silencio al notar que alguien tocaba la puerta de la habitación de donde estaban, solo podía ser una persona.
Jack avanzó tranquilamente y abrió la puerta con una enorme sonrisa.
-Hola!- Dijo la voz alegre de Olaf.
-Hola amigo!- Dijo un sonriente Jack.
-Buenos dias Elsa, buenos días Jack- Dijo increíblemente emocionado, el pequeño muñeco de nieve -¿Que haremos hoy?-
-Yo, debo llevar el invierno por el mundo, sobretodo ahora que se acerca la navidad- Dijo Jack riendo mientras salia de la habitación, y comenzaba a bajar las escaleras.
-¿Tú vas Elsa?- Preguntó Olaf.
-No, Olaf... yo no iré- Dijo Elsa con un suspiro.
-¿Continuaras esperando?- Insistió Olaf.
-Claro que si, Olaf, claro que si- Dijo Elsa con una media sonrisa. El pequeño hombre de nieve corrió escaleras abajo intentando alcanzar a al espíritu de la diversión.
Elsa en cambio se sentó en el pasamanos de la escalera y se deslizó por el, al llegar a bajo, fue corriendo por el chico Frost, y saltó en su espalada.
Riendo le dijo – Atrapado- y luego le dio un tierno beso en el cuello.
-Hey!- exclamó Jack, intentando girar su rostro para encontrarse con el de su esposa (si, leyeron bien, ¡esposa!), pero ella lo esquivaba fácilmente estando en su espalda -Vaya hoy si que despertaste divertida- Por toda respuesta la chica simplemente sonrió y lo besó en la boca, permitiendo que sus fríos labios hicieran fricción, Elsa quita rápidamente sus labios y se baja de la espalda de Jack, el chico inhalando y exhalando, parpadeó como si acabara de despertar – Divertida y cariñosa- Agregó aún embelesado por el beso.
Elsa simplemente volvió a reír -Si eso es lo que tú crees- dijo mientras de encogía de hombros, y caminaba hacia otra habitación.
Mientras Jack se quedaba mirando una pared de hielo, de pronto la voz del pequeño Olaf lo interrumpió.
-¿Que pasa me perdí de algo?- Dijo mirando curioso a Jack.
-No... nada- Respondió el chico aún mirando a la nada.
Olaf continuó caminando hasta que finalmente se topó con Elsa, ella miraba en todas direcciones, como buscando un lugar donde ocultar el báculo que sobresalía de su espalda.
-¿Elsa que haces con el báculo de Jack?- Dijo sonando alarmado -Sin el no podrá volar...-
-Lo sé solo es una pequeña broma para que tarde más en salir- Respondió ella sonriente.
Olaf comenzó a reírse, mientras que con sus manitas se tapaba la boca, Elsa siguió avanzando por las habitaciones, mientras Olaf la seguía, ambos intentaban buscar el lugar idóneo para esconder el báculo.
-¿Elsa?- Era la voz del chico Frost -¿Has visto mi báculo?, hace un buen rato que lo busco...- Dijo
La reina y el muñeco de nieve se agacharon intentando contener la risa.
-No, Jack, no sé donde esta, ¿Has revisado la habitación?- Dijo con mucho esfuerzo la muchacha.
-Si... ¿Donde estas?- Interrogó el chico.
-Por aquí Jack- Dijo Elsa mientras se alejaba por una escalera.
-¿Donde?- Jack camino unos pasos sonriendo.
-Aquí- Elsa acaba de crear un enorme jarrón con rosas de hielo en su interior, y tras el puso el báculo.
-No te veo- Dijo Jack oculto tras un pilar, mirando meticulosamente cada rincón de la habitación.
Elsa contuvo la risa -Sigue mi voz- Respondió la chica mientras avanzaba a otra habitación.
-¡Te atrapé!- Dijo Jack tomando por la cintura a la reina, quien tubo un espasmo por la sorpresa.
-Esta vez soy yo la presa- Dijo la chica sonriendo.
-Exactamente- Respondió el muchacho con una enorme sonrisa. Y luego sus labios volvieron a unirse como una tormenta de invierno, finalmente la chica envolvió los brazos al rededor del chico, y así se mantuvieron por un largo rato.
-Y por cierto ¿donde esta mi báculo?- Recordó Jack.
-Tendrás que buscarlo- Dijo Elsa encogiéndose de hombros.
-Esta bien- Dijo Jack estrechando los ojos -Pero esta vez tú tendrás que acompañarme- Agregó mientras tiraba de la mano de su compañera, hacia la otra habitación.
-¿Esta aquí?- Dijo señalando una enorme araña de hielo, por toda respuesta la muchacha se encogió de los hombros.
-¿Y aquí?- Esta vez señalaba una fuente de agua cristalizada, la chica simplemente levantó las manos como diciendo soy inocente, sonrió y se encogió de hombros nuevamente.
-Ya lo sé, esta aquí- Dijo con confianza señalando una puerta, la chica aún muda, pero riéndose, negó con la cabeza.
-Vaya, es más difícil de lo que esperaba- Dijo el chico rascándose la cabeza -Parece que has estado hablando con Bunny- Dijo y ambos rieron, continuó caminando por la habitación hasta que casi choca con un enorme jarrón lleno de rosas.
-oh, vaya esto no estaba aquí antes- Dijo el chico sorprendido, la muchacha no podía parar de reír -Y aquí esta mi báculo- Dijo con una sonrisa triunfal sosteniendo su báculo.
-Esta bien, me ganaste- Dijo Elsa -¿Me llevaras con Norte?-
-Claro que si...mi reina Frost- Dijo el chico haciendo una exagerada reverencia.
Elsa fue a cambiarse mientras Jack buscaba a Olaf, luego de un rato se hartó de no encontrarlo y se sentó en la escalera, pero apenas lo había hecho cuando escuchó la voz de la chica.
-Bueno yo ya estoy lista, ¿Que hay de Olaf?- Dijo la chica con una sonrisa, Jack no respondió de inmediato, aún le costaba acostumbrarse a que la hermosa chica que bajaba de las escaleras era ahora su esposa.
Negó con la cabeza, y luego respondió -Aún no lo encuentro, seguramente cuando estemos apunto de irnos él aparecerá- Dijo el chico mientra subía las escaleras para acercarse a la chica.
-Esta bien- asintió ella, el muchacho se puso a su lado y le tendió su brazo, ella alzó una ceja y tomó su brazo.
Estaban en la puerta apunto de salir, cuando Olaf apareció nuevamente.
-Oigan!, espérenme- Dijo agitando sus pequeños brazos.
-Nunca te dejaríamos pequeño Olaf- Rió Jack.
Elsa se sujetó firmemente a la cintura de Jack y Jack sostuvo con una mano a Olaf y luego todos volaron rápidamente a la casa de Norte, principalmente gracias al portal que les había regalado.
Al llegar a la "casa" de Norte, él los estaba esperando junto con Phil otros Yetis.
-Bienvenidos!- Exclamó Norte mientras abrazaba a los tres -Al fin llegan-
-Si, Norte... pero yo ya debo irme- Dijo Jack mientras de soltaba del poderoso abrazo de Norte.
-Pero si acabas de llegar... ni siquiera te he preguntado por tú hermana- Dijo Norte consternado.
-Lo siento, pero así es- Respondió el chico mientra caminaba lentamente hacia atrás- Norte, por favor... mientras no estoy... Cuida a mi esposa- Dijo el chico mientras volaba lejos.
Luego de varios minutos de silencio Norte finalmente habló.
-Elsa, aún los sigues esperando...- Fue interrumpido.
-Si, Norte, sigo esperándolos... sé que volverán, yo lo sé- Habló Elsa mientras miraba al piso.
-Bien, es hora de mostrarte tú habitación- Habló Norte, para cambiar de tema.
No era la primera vez que la chica recorría el taller de Norte, pero si era la primera vez que se quedaba a alojar, y se preguntaba como serian las habitaciones para los visitantes. Miraba cada puerta intentando adivinar cual era la suya, pero no logró concentrarse demasiado, puesto que Norte le habló todo el tiempo.
Finalmente y luego de subir por un ascensor y varias escaleras, llegaron al "ático".
-Esta iba a ser al habitación de Jack, si él deseaba quedarse a vivir conmigo, pero ahora que tú estas aquí, creo que es perfecta para ti, hay un reloj que sonará cuando debas bajar a cenar- Dijo Norte con una gran sonrisa mientras le entrega una llave -Bueno ahora te dejaré para que la explores- Agregó Norte mientras de daba media vuelta para irse.
-Gracias señor Norte- Dijo Elsa haciendo una pequeña reverencia.
Norte soltó una carcajada -No seas formal, pequeña, después de todo somos familia- Dijo mientras se iba.
Elsa se quedó acunando la llave en su pecho un momento y finalmente la introdujo muy lentamente en la cerradura.
Al abrir la puerta descubrió que era mucho más grande de lo que parecía. De alguna forma estaba dividida en tres espacios, además del baño, había mucho que ver pero la chica sintió que la habitación era demasiado grande para ella y estaba abrumada. Miró en todas direcciones buscando a Olaf, pero el muñeco de nieve había desaparecido, otra vez. Intuía que estaba con los elfos.
Rápidamente bajó escaleras hasta encontrarlo, pero el lugar estaba misteriosamente vacío y temía haberse perdido.
Oía un ruido lejano, pero no sabia de donde procedía, continuó caminado, hasta que se encontró con un enorme globo terráqueo, se quedó mirándolo con curiosidad. De pronto la luz de la luna entró con fuerza.
-Norte- llamó Elsa alarmada al notar que algo en el piso se movía, y de un extraño compartimento salia un pilar con una roca brillante.
Kaixo!
Este es mi segundo fic y quería aclararles que será una especie de continuación de Los Guardianes de Arendelle, y que van a salir algunos personajes inventados por mi, y que lo más probable es que haya un triangulo amoroso...
Eso!, espero que les haya gustado y si les gustó, agradecería mucho que comentaran
Tarba