Momentos
Serie de viñetas Chuck/Blair
Disclaimer: Gossip girl y sus personajes no me pertenecen. Solo los utilizo para contar esta historia, la cual si me pertenece, sin ningún animo de lucro
N/A: Me arranco a publicar, este fic son una serie de drabbles situados en diferentes temporadas (escritos cronológicamente), pequeñas escenas perdidas que perfectamente pudieron pasar, en su mayoría escritas desde el punto de vista de Chuck. Espero que os guste. Un beso.
1ª temporada
Capitulo 1: Mujeriego
La cama es demasiado placentera como para levantarse e ir a comer con su padre. No le gustó que rechazase su propuesta sobre el Victrola tan rápido, y después una gran dosis de alcohol y sexo, su lecho, solitario en esos momentos, es la mejor forma de recuperar el ánimo perdido.
Extiende uno de sus brazos y toca lentamente las suaves sabanas que le cubren. Y no puede evitar pensar. Ya no sabe cuantas mujeres han pasado por su cama. Perdió la cuenta hace demasiadas... y tan solo tiene 17 años. Pero no importa. La edad es relativa, y él tiene el poder.
Nada parece tener límites. Hacer lo que quiere y cuando quiere. No tener que responder ante nadie. Es su vida y a él pertenece el elegir como vivirla.
La puerta del dormitorio se abre, y una brillante cabellera castaña entra deprisa.
- ¿Qué haces metido en la cama? – dice poniendo los brazos en jarra
- Te estaba esperando – contesta Chuck picaramente
Blair pone los ojos en blanco y se acerca un poco más.
- Nate me contó lo de tu padre… ¿estas bien?
- Perfectamente…
- ¿Has estado bebiendo? ¿Verdad?
Chuck levanta una mano y junta sus dedos pulgar e índice en señal de que un poquito, Blair menea la cabeza.
- ¿Y crees que quedándote aquí encerrado conseguirás algo?
- No estoy encerrado… solo descanso – musita – esta será la única noche de vida de mi cabaret… tengo que estar en plenas facultades para disfrutarlo.
La muchacha suspira y se da la vuelta, dispuesta a marcharse. Esta a punto de coger el pomo de la puerta, cuando la voz de Chuck la detiene:
- ¿Irás esta noche?
- Claro… - asegura – Nate no quiere perdérselo.
Chuck asiente mientras la observa marcharse. No le ha gustado su respuesta. "Nate".No entiende porque. Quizás, porque ella fue la única que confió en su sentido para los negocios, o tal vez porque después de tantos años ha desarrollado un sentimiento fraternal hacia ella, que parece que no ha sido reciproco.
Malhumorado, se levanta de la cama, camino al aseo, mientras su mente le hace prometerse que nunca tendrá novia. Para poder vivir su vida sin dar explicaciones, para poder ser libre… y cuando el espejo que hay frente al lavabo le devuelve su reflejo, se intenta auto convencer de que las novias son para la gente débil que teme envejecer sola, no para Chuck Bass.
Suspira. No lo dirá nunca, pero él también tiene miedo de envejecer solo.
