Los personajes de Vocaloid no me pertenecen
Primer sentimiento: Odio.
Eran los dos. Los dos estaban metidos en ese crimen. Eran cómplices y sus manos estaban manchadas. Pero esa era la ley, "Si no matas, te matamos", si no mataban a ese empresario, ellos dos morirían. La chica se encontraba arrodillada frente al cuerpo ensangrentado, mientras en su mano derecha poseía una navaja que había atravesado el corazón de la víctima. Un chico, de mucho parecido a ella, se acerco y la abrazo por la espalda.
-Len...mate…soy una asesina…- Balbuceo la chica mientras de sus ojos comenzaban a salir lagrimas.
-No lo eres, Rin- Le contesto mientras la abrazaba más fuerte-Era él o nosotros…-
La chica se dio vuelta en los brazos de su hermano. Comenzando a secar las lágrimas con la camiseta de su hermano, que poseía manchas de sangre, al igual que sus manos.
-Len…prométeme que siempre me querrás- Le pidió a su hermano. Este asintió.
-No importa que pase Rin, siempre serás mi hermana- Pero esa promesa no duraría mucho.
-¡Apresúrate Len!- Gritaba una rubia de 5 años mayor que antes, en sus manos traía dos bolsas que parecían estar llenas de dinero. Atrás de ella venia un chico cargando con el mismo material que su hermana, pero a diferencia de ella, lo dejo caer.
-¿¡Que haces, tonto!- Le pregunto mientras se detenía y lo reprochaba -¡Teníamos mucho dinero ahí!
-Rin, la tonta eres tú- Le dijo mientras se acercaba lentamente y decididamente a ella-¿No te das cuenta?-Siguió hasta un callejón que no había salida. Rin estaba acorralada. En ese momento, Len saco de su bolsillo un teléfono. Y rápidamente marco un número, sin dejar de mirar a la mujer.
-Sí. La tengo en frente mío, gracias oficial- Al escuchar esa palabra, Rin se asusto.
-¿Pero qué…? ¿¡Que hiciste, Len?- Le grito.
-Lo siento, hermana. Dinero es dinero. Acepte trabajar con la policía, parece que si te entregaba me darían una gran recompensa- Rin no lo asimilaba, solo quería… despertar. Su hermano no la había traicionado ¿Verdad? Dejo caer lentamente las bolsas en el piso, luego se fue acercando lentamente a su hermano…
Cuando la policía llego, no había ningún rastro de los dos hermanos. Pero gracias a un perro de ellos, pudieron encontrarlos a ambos… muertos. Estaban a poca distancia, y los dos tenían una herida profunda en el corazón. Llevaron los cuerpos a examinar, y el informe quedo en que la mujer, había atacado primero con su navaja, a lo que el chico respondió de igual manera. Al mismo tiempo, cada uno le clavo al otro su arma, llevándolos a la muerte.
Proximo sentimiento: Envidia
