Free! no me pertenece~

Pareja: NagiRei

Rating: T

Advertencias: situaciones cómicas y calientes(?)

¡Clases Extras!

Capítulo: 1/5

Razonamiento Verbal

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—¡Auch! —Exclamó Nagisa al ser golpeado en la cabeza por el libro de Rei—… sensei~ no sea malo conmigo.

—Concéntrate en lo que te estoy diciendo.

—Qué abruptividad~

—Esa palabra no existe.

—¿Eh? Entonces… qué abruptancia. Qué abruptitud. O… ¡qué abruptación!

—"Qué abrupto".

—Oh~ Rei-chan, tú lo sabes todo, ¿No es así? —Nagisa comentó con admiración, asomando su cabeza por encima de la almohada y mirando a Rei con ojos curiosos, como los de un niño pequeño.

—No lo sé todo, sólo sé un poco más que tú —respondió Rei, acomodando sus lentes—. En realidad no sé ni el 1% de todos los secretos y maravillas que componen al mundo, pero aun así, sé muchas más cosas de las que Nagisa sabe.

Sin embargo, había cosas que sucedían frente las narices de Rei y aun así no lograba comprender. Una de ellas era entender la razón por la que Nagisa se quedaba maravillado cada vez que Rei tomaba un libro y lo abría en una página al azar. Ni siquiera había comenzado a leer algunas palabras cuando Nagisa ya se encontraba dormido: la voz de Rei parecía tener algún efecto somnífero o había otra causa inaudita que aún no había podido descifrar.

Por ahora, la única razón por la que Rei permitía que Nagisa acariciara su cabello, era porque estaba acostado en su cama ayudándolo a estudiar. En cualquier otra situación, Rei hubiese tomado sus libros y simplemente se hubiese largado de la habitación de Nagisa. Pero no podía hacer eso, pues su deber y objetivo era ayudarlo para que aprobara el examen de ingreso a la misma universidad que él, y de esa forma pudiesen permanecer juntos por más tiempo.

A Rei le parecía esplendida la idea de que Nagisa fuese a la misma universidad que él. Dudaba certeramente que eso fuese posible teniendo en cuenta lo complicadas que solían ser las pruebas de ingreso, pero si había algo en lo que Rei tenía fe, era en sus habilidades para enseñar a las demás personas.

—Nagisa, ¿Estás escuchando lo que estoy diciendo? ¿Estás entiendo alguna de mis palabras?

—Tu cabello está más cuidado que el de Gou-chan.

—¡Nagisa-kun! —Exclamó Rei enojado, levantándose de la almohada puesta en las piernas de Nagisa, en la que tenía apoyada su cabeza hace unos instantes—. Oye, te voy a hacer una pregunta y quiero que la contestes con mucha honestidad. ¿Quieres entrar a la misma universidad que yo?

—Sí, quiero estar junto a Rei-chan… ah~. —Respondió, soltando un bostezo al final de la oración.

—Entonces tienes que estudiar mucho para la prueba de ingreso. —Sentenció.

Nagisa se encogió de hombros, restándole importancia al asunto.

—Hago trampa. —Resolvió con facilidad.

—¡No puedes hacer trampa, morirás si haces trampa!

—No voy a morir por copiarme un poco, ese es un mito que tienen los nerd —Rei entornó sus ojos ante el comentario de Nagisa—. No me mires así, Rei-chan… yo he hecho trampa muchas veces en los exámenes y he salido ileso.

—Nagisa, mírame… —Rei puso su gesto más serio y tomó a Nagisa por los hombros, acercando sus rostros con severidad—… esto no es lo mismo que en la preparatoria, ésta es una prueba de ingreso para entrar a una de las universidades más estrictas de la prefectura.

—Pasaré —dijo Nagisa, esbozando una sonrisa tan segura que incluso Rei fue incapaz de objetar—, porque tú serás mi profesor.

Se separaron y Rei soltó un largo suspiro, derrotado.

—Bien, lo primero es probar tu razonamiento verbal.

—Verbal… verbal… verbo. ¡Verbo! —Exclamó Nagisa, como si hubiese descubierto algo absolutamente fascinante—. Eso tiene que ver con la boca, ¿verdad?

La pregunta descolocó a Rei.

—Bueno —La obviedad le había hecho dudar en responderla, pero al ver el gesto curioso de Nagisa, decidió tomársela en serio—, ciertamente las palabras salen de tu boca, pero…

De pronto, sin previo aviso, tan repentinamente como una ráfaga de viento en verano, Nagisa tomó con ambas manos las mejillas de Rei y, atrayéndolo hacia su propio rostro, posó sus labios encima de los suyos. Rei abrió su boca, sorprendido por el repentino ataque. Nagisa aprovechó entonces para introducir su lengua y profundizar el contacto. El beso se extendió unos cuantos segundos, en los cuales ambos acariciaron sus labios con lentitud, y luego se separaron paulatinamente, sonrojados.

Nagisa limpió la diminuta línea de saliva que había quedado en su barbilla y luego curvó una sonrisa amplia.

—¿Y bien? Soy muy bueno, ¿verdad?

—¡Esperaaa! —Rei acomodó sus lentes, que en el ataque repentino se habían doblado, y se permitió recapacitar en lo que apenas acababa de pasar—. ¿Por qué me besaste repentinamente?

—Pues, tú dijiste "razonamiento verbal", así que yo…

—¡"Razonamiento verbal" es una cosa y "razonamiento sexual" es otra, no confundas! —Rei estaba completamente contrariado. ¿Por qué Nagisa nunca podía tomarse en serio sus clases? Siempre que se proponían estudiar, terminaban haciendo todo lo contrario, y lo peor era que Rei no se podía negar…

…por que Nagisa era demasiado caliente como para siquiera pensar en la idea de rechazarlo.

—Hmm~ mira, sensei, parece que tu boca me reprueba, pero esta parte de aquí me aprueba con excelentes calificaciones. —canturreó Nagisa palmeando descaradamente la entrepierna de Rei, quien con sólo un beso ya se había puesto tan duro como una piedra.

Rei se rindió al ver aquella sonrisa pícara de Nagisa. Dejó los libros a un lado y se quitó los lentes.

—Dejemos las clases hasta aquí por ahora.

Nagisa no tenía razonamiento verbal para nada, pero aun así, era muy bueno persuadiendo.