Summary: Derek y Stiles empiezan a sentir algo entre ellos, pero ninguno quiere aceptarlo.
Capítulo 1. -Algo incontrolable empezaba a pasar-
Stiles estaba desesperado por encontrar el bestiario que les ayudaría a saber qué era esa especie de lagartija que lo había paralizado en el garaje. Pero, aunque Allison le había dado las llaves y se detenía a buscar con un loco, intentando dejarlo todo intacto, no encontraba nada. Y había dejado a Lydia llorando y esperándole fuera.
-El libro, el libro, el libro-negó mientras seguía concentrado-No hay libro.-Sacó el móvil y le envió un mensaje a Allison.-"Aquí no hay nada"-pendiente de la pantalla no había notado que la imponente figura de Erica estaba enfrente él, no es que no le atrajera pero tampoco le caía bien.-¡Dios!-exclamó sorprendido al verlo, dando un sobresalto-
-Hola Stiles-dijo solamente como si eso lo dijera todo. Se había metido en problemas, de los que él solo sabía meterse y todo por ayudar a su mejor amigo, Scott.
Erica lo forzó a caminar por los pasillos oscuros, agarrándolo por la oreja, de camino a la piscina. Ella estaba más fría que de costumbre, alzaba con la mirada alta y ni si quiera miraba al pobre Stiles. Entonces todo encajó, iba a llevarlo hasta Derek. Stiles maldijo mentalmente, ¿por qué siempre tenía que estar presente en todo? ¿Para responderle o gritarle con sus malas maneras? Derek Hale era algo más que un maleducado para su gusto, y no entendía desde dónde nacía toda la ira que sentía hacia Stiles. Y él perdiendo el tiempo mientras que Lydia esperaba fuera, ¿por qué le tenía que pasar esto?
Maldito Derek Hale.
Pero lo que no sabía era que no sería la última vez que lo maldecía.
Los pasillos estaban poco iluminados, por no decir totalmente oscuros como la boca de un lobo. Rió para sus adentros, era una broma acertada, aunque no quería sentirse como en la boca de un lobo. Se imaginó en la boca de Scott o de…Derek, deshizo ese pensamiento de su mente.
No puedo plantearme eso ahora mismo, debo librarme lo más rápido posible de Derek para ver a Lydia, eso ó para sí, satisfecho y con una mueca de triunfo por ese pensamiento.
Los tacones de Erica eran el único sonido que Stiles escuchaba, aunque...al él le parecía escuchar una pelota de baloncesto botando. ¿A qué venía todo esto?
De pronto vio una luz azul y supo adónde se dirigían, a la piscina. Cuando entraron en la habitación, Derek apareció ante sí. Recurrió a su sarcasmo como última defensa para no sentirse débil.
-¡Estás ahí!-cuando Erica lo soltó añadió con una sonrisa falsa-¡Gracias!
Algo le daba mala espina ya de por sí, ¿por qué querría Derek hablar con él?
-Stiles.-pronunció su nombre con ira y alegría a la vez, mientras sonreía y arqueaba la ceja izquierda. ¿Cómo podía él combinar la ferocidad e ira que estaba demostrando con una media sonrisa como aquella? Tenía que admitirlo, era una sonrisa impresionante. Quizás era una de las cosas que volvía locas a las chicas por él.
-Derek-hizo una especie de reverencia con petulancia, pero manteniéndose con la mayor frialdad posible que pudiera manifestar en su cara.
-…¿Qué fue lo que viste en el taller?-Continuó él, tan directo al grano como siempre. Le echo una mirada de arriba abajo, o eso le pareció a Stiles, para luego fijar su mirada en la pelota que había tenido en sus manos. Eso era lo que había escuchado, la pelota botar. Puede que no tuviera los ultrasentidos de Scott, pero los suyos se estaban desarrollando.
Se preparó para mentir, y alzó la cabeza, relamiendo sus labios como hacía siempre, estaba muy nervioso y enfadado a la vez.
-¿En el taller?-alzó las cejas, lo que hizo sus facciones mucho más graciosas-Pues… varias infracciones muy graves que estoy considerando ir a denunciar a medio ambiente.- mordió su labio y negó con la cabeza, como diciéndole, "ahí la llevas".
Derek permaneció impasible por unos segundos mientras Erica esbozaba una sonrisa sincera,la verdad es que había tenido su gracia. Stiles era gracioso, muy gracioso. Eso le desagradaba a Derek y lo sacaba de quicio aún más, ¿por qué le había tenido que tocar lidiar con este humano irónico y sin gracia para su gusto? No lo entendía, Stiles podría haber nacido en otra ciudad, mucho más lejos, y no haber molestado su casi eterna existencia. Pero no, el destino le enviaba esta dura prueba. Luchaba contra las ansias que tenía de arrancarle la cabeza.
La pelota que se hallaba en sus manos, le pareció de pronto muy interesante, solo para asustar y forzar a Stiles. Sonrió maléficamente , pasando sus dedos por ella. Hasta que, con sus garras, consiguió que se desinflara.
-¡Madre mía!-exclamó bajo Stiles, algo asustado, más de lo que mostraba en realidad. Stiles tragó saliva incontrolablemente, cuando Derek volvió a mirarlo fijamente a los ojos. Sus ojos verdes que transmitían fiereza e irritación, acompañados de la encantadora sonrisa que ya había mencionado antes.
-No insistiré-dijo, soltando la inservible pelota y mirándolo tan fijamente que Stiles quiso salir corriendo y no mirar nunca atrás, pero no podía mostrarle miedo. Eso era peor.
Negó interiormente, menos mal que Derek no podía leer sus pensamientos. Derek, alias el gran alfa amargado, estaba allí para sacarle información sobre la lagartija, cómo si él supiera algo.
-A ver,la cosa era bastante escurridiza, la piel oscura-estaba concentrado, pensando en los más detalles posibles para que lo dejaran irse.-como con manchas y creo que tenía escamas-Derek y Erica lo miraban fijamente.-¿Es suficiente?-sus pensamientos se dirigieron a Lydia llorando-Porque necesito ir a hablar con alguien…
Derek lo miró, intimidante y con las cejas alzadas. Su expresión transmitía que aún no podía irse, y, es más, parecía que quisiera ablanzarse sobre él y arrancarle la cabeza. Stiles tragó saliva nervioso.
-Mmm… eh… de acuerdo, vale, los ojos-murmuró algo distraído porque podía vislumbrar los colmillos que sobresalían por sus labios, no debía enfadarlo más. Debía darle lo que quería y lo dejaría tranquilo.-Los ojos eran… amarillentos-Erica mira a Derek, dándole a entender que no se fiaba mucho de la información de Stiles.-y rasgados. Tiene..-comenzó a decir Stiles sin darse cuenta de que la lagartija que lo había atacado en el garaje estaba allí, encima de ellos, en una pared.-dientes y, ¡ah! también tiene…-Derek levantó la mirada hacia el bicho que estaba describiendo el joven, aún serio, y en shock.-cola. ¿Estáis bien?-Stiles los observó cuidadosamente.- Esperad, ¿lo habéis visto?-los señaló a ambos, que estaban callados y algo sorprendidos por la criatura que estaba encima de ellos.-Se os ha quedado la cara como si supierais de qué os hablo-dijo mientras alzaba un poco la voz.
Pero las miradas de ellos no estaban fijos en Stiles, sino en un punto más lejano, más…arriba. Decidió seguir la vista de ellos, dándose la vuelta, y se iba a arrepentir de esto último.
Lo que vio, fue exactamente lo que acababa de describir, sobre ellos, cerniéndose sobre ellos. Y esta vez, Stiles no reprimió su miedo, tembló un poco al verlo. Derek se fijó en él, era humano, débil.Y si… le pasaba algo a Stiles, Scott le mataría. Se dijo para sí mismo, aunque estaba mintiéndose, no lo ayudaba por eso.
Entonces, la criatura gritó, abriendo sus fauces colmadas de dientes delgados y finos, como los de los vampiros, pensó Stiles. El muchacho hizo un ademán de moverse para huir,pero, en vez de eso se reunió con Derek y Erica. La criatura saltó, profiriendo otro grito, y arañando a Erica con sus garras envenenadas. Erica Salió volando hasta la pared y no pudo moverse. Derek se irguió, alerta, mientras empujó a Stiles.
-Lárgate-le gritó en un amago de protegerlo, pero esto solo hizo que la criatura consiguiera darle un zarpazo en el cuello.-
Esto lo dejó aturdido por un momento, y se dio la vuelta para mirar a la criatura, sin saber qué ni cómo había pasado. Fue Stiles quién se dio cuenta.
-Derek, tu cuello-dijo éste, provocando que la reacción del lobo fuera llevarse la mano a él. La criatura retrocedió, mientras Stiles conseguía echar el brazo inerte de Derek sobre sus hombros. Notó, al roce con el cuerpo de él, la enorme musculatura que él tení se dijo para sí que esa era otra de las razones por las que volvía loca a las chicas, y maldijo a su padre por ser tan esmirriado cómo él. Ya podría haberle dado unos músculos cómo los de Derek…
Derek se dejó llevar por Stiles, que andaba como podía por el filo de la piscina, evitando a la criatura, y pensó que era irónico que la persona al que él debía proteger en ese momento, estuviera agarrándolo y cumpliendo lo que él no podía.
Corrían como podían por la sala, huyendo.
-¿Qué es eso?-preguntó casi sin mover los labios, la mirada de Stiles se paró en ellos y, los admiró por un segundo en su mente. Por eso respondió confuso a la pregunta de él-
-No lo sé.-dijo sin pensar en nada mientras seguía avanzando por el filo.-¿lo ves?-le preguntó el muchacho-
-No, pero date prisa, llama a Scott-le gruñó el alfa, notando como sus extremidades dejaban de funcionar, como anestesiadas. Encontró esta inmovilidad algo asfixiante. Stiles metió la mano en su bolsillo para coger el móvil, pero éste se le resbaló así que se agachó para cogerlo sin darse cuenta de que dejaba caer a Derek dentro de la piscina.-Stiles,¡cuidado!-dijo él mientras caía al agua, indefenso. Stiles miró el móvil, a la criatura acercándose lentamente y luego adónde había caído Derek. ¿Qué podía hacer?
Se tiró para salvar al maldito Derek, de lo que se iba a arrepentir. Cuando consiguió sacarlo del agua concluyó en sus pensamientos que el alfa pesaba demasiado, su musculatura era una desventaja, no podría aguantar mucho. Echó su brazo sobre su hombro e intentó avanzar hasta el móvil. El roce con el cuerpo de él y mojado, le incomodaba demasiado pero no iba admitirlo.
-¿Dónde Está? ¿Consigues verlo?-le preguntó algo confuso mientras avanzaba-
-No-dijo Derek mirando como podía, con el pelo empapado cayéndole por los ojos y jadeando a más no poder-
-Tal vez se haya ido-dijo él intentando no desconcentrarse por el roce con el hombre lobo. ¿Por qué eso le desconcentraba? No entendía nada. Escupió agua mientras la mirada de Derek acababa en sus ojos.-¿No?
-O tal vez no-dijo con solemnidad y preocupación a la vez, sin mover nada los labios, lo que hizo que Stiles volviera mirarlos, como si no fuera posible sentir mayor incomodidad.-
Los minutos en el agua se hacía cada vez más incómodos y difíciles para alguien tan poco entrenado para Stiles, que no podía sujetar a Derek por mucho más tiempo. Su respiración se iba agitando por el esfuerzo y Derek lo miró aún más preocupado. Se sorprendió de que, aunque estará inmóvil, el rostro de Derek estaba más expresivo que nunca. Preocupación, eso expresaba, ¿por él? No, seguro que sería por salvar su propio culo de hombre lobo. Entonces pensó algo mientras lo observaba, la verdad es que no era su rostro, eran sus ojos. Sus ojos verdes, en los que no se había fijado hasta ahora, los que transmitían sus emociones.
-¿Me vas a sacar antes de que me ahogue?-dijo con reproche mientras intentaba mirar a otra cosa que no fueses Stiles, porque él también lo miraba estaba poniendo nervioso.-
-¿te preocupa ahogarte?-dijo el chico llamando de nuevo la atención del lobo alfa amargado-¿No te has fijado que esa cosa de ahí tiene los dientes afilados?-añadió con su toque particular de sarcasmo mientras la señalaba con la cabeza. Derek volvía a mirarlo fijamente, como no había hecho nunca, fijándose en él.
-¿No te has fijado que estoy paralizado de cuello para abajo y que no hago pie?-exclamó aún más enfadado, volviendo a intentar no mirarlo-
-Vale, vale.-concedió Stiles, llevaba razón. Derek 1, Stiles 0. Miró hacia todos lados, jadeando muy fuerte. Lo que llamaba la atención de Derek, inexplicablemente para este mismo.-No lo veo.-dijo nadando hacia el lugar dónde estaba el móvil y arrastrando como podía a Derek consigo.-
A Derek se le cerraban los ojos de cansancio y cerraba la boca para que no le entrara agua.
-¡Espera, espera, espera!-le gritó, haciendo que parara. La criatura había vuelto a aparecer y se acercaba a la piscina, lentamente-
-¿A qué espera?-dijo mirándolo a los ojos, confuso. ¿Qué planeaba esa cosa? ¿Qué era esa cosa?
La criatura fue a meterse en el agua, pero algo la detuvo. Ambos la miraron y luego volvieron a coincidir miradas.
-¿Has visto eso? No puede nadar-objetó Stiles, muy observador, reflejando los pensamientos de Derek. La criatura los acechaba algo furiosa, dando vueltas por el filo más cercano a ellos.
Derek casi se hundía y Stiles sentía todo el cuerpo agarrotado, y jadeante.
-Oye, Derek, no creo que pueda aguantar más tiempo.-miró el móvil cada vez más lejano, o eso le parecía a él.-
Derek siguió la mirada de él y se alarmó, él no podía hacerle eso.
-No, no no no. ¡Ni se te ocurra!- le gritó casi al oído y a Stiles se le escapó un gemido de dolor-
-¿Podrías confiar en mí?-dijo él impulsándose un poco hacia arriba para poder seguir sujetando a Derek. Solo debía llegar, coger el móvil y llamar a Scott. Volviendo a tiempo para salvar a Derek de la profundidad de la piscina olímpica.
-No.
-Oye, soy el que te está ayudando, ¿o no lo ves?- dijo este mirándolo fijo. Derek asintió pero no muy convencido.
-Sí, ¿ y cuándo la parálisis desaparezca quién luchará contra eso tú o yo?-dijo intentando hacer que le dolieran esas palabras, como humano debilucho que era. Pero Stiles no se amilanó.
-¿Y por eso te estoy ayudando durante dos horas?-dijo mirándolo a los ojos de nuevo, por un segundo se perdió en ellos. Definitivamente el cansancio se estaba apoderando de su cuerpo y le causaba alucinaciones.-
-Si tú no confías en mí, yo no confío en ti.-dijo Derek con lengua viperina. O sea, que había una mínima oportunidad de que Derek confiara en él. Vale, y en ese momento, con un tipo de salvaje lagartija mutante queriendo matarlos,¿ de qué le servía? Gruñó exasperado. Se sentía como en la película de Spiderman, siendo la muchacha indefensa a la que Spiderman debía ayudar. ¿Dónde estaba Scott-Spiderman para ayudarlo?¿Y qué estaba haciendo?-Peor tú me necesitas para sobrevivir, por eso, no me sueltas.-le disparó para herirle, solo lo estaba haciendo por conveniencia según Derek.
Bueno, quizás sí lo hacía, ¿pero quién era él para recriminarle algo así, si siempre hacía las cosas para sacar algún propósito o beneficio de ellas? Stiles lo miró a los ojos, pensativo mientras intentaba no tragar agua. Definitivamente, se hundía cada vez más, estar en mitad de la piscina parados, no era fácil. Debía actuar. Soltó a Derek quién gritó su nombre antes de sumergirse inmóvil hasta el fondo de la piscina. Empezó a nadar como podía hasta el borde de la piscina, pero la lagartija estaba esperándolo. Alcanzó el móvil lo más rápido que pudo y avanzó hacia dónde estaba Derek de nuevo, sin mojar el móvil. Empezó a marcar el teléfono como podía, con una mano mientras se mantenía en la superficie con la otra. La línea dio como llamada y Scott cogió al segundo toque.
-Scott-gritó al notar que él había cogido, pero solo recibió de él un "no puedo hablar", tras esto le había colgado. Stiles, puso cara de asco y de resignación, tirando el móvil al fondo de la piscina.
¡Derek! Debía ayudarlo, ahora solo lo tenía a él para salvarse. Se hundió y lo agarró como pudo de la cintura hasta llevarlo a la superficie.
-Dime que lo has cogido.-dijo él más ofuscado que antes, parecía que iba creciendo por momentos.-
-Bueno…-dijo Stiles jadeando de nuevo porque Derek pesaba mucho. Empezó a nadar hasta que se le agarrotaron los músculos.-No aguanto más necesito sujetarme, se fijó en el trampolín y pensó que le serviría. Frenéticamente empezó a nadar hacia él. Derek solo emitió un gruñido como respuesta. No podía moverse ni protestar así que, ¿para qué malgastar energías con el cabezón de Stiles? Ya lo había demostrado, lo había dejado hundirse solo por una cabezonería suya. Derek empezaba a pensar y a admirar a Stiles, por muy flaco que parecía era mucho más fuerte que cualquier humano. Lo había estado sujetando dos horas. Era increíble. Se dejó llevar por él. Pero Stiles no atinaba a agarrarse, no le quedaban fuerzas y estaban hundiéndose.
Ambos se sumergieron en la piscina, pero una mano los sacó a ambos. Dejándolos inmóviles y casi desfallecidos al filo de la piscina. Ese algo gruñó, era Scott, ambos lo reconocieron. La mala suerte es que Stiles había caído encima de él, Derek, sobre su pecho y oía los latidos con fuerza de él, seguro que sería por la impotencia. Se fijó en que también estaba jadeando como él. Este le dirigió una mirada para que se apartara de él, pero Stiles negó con la cabeza, no podía moverse del cansancio. Escuchaban a Scott hacer ruido con la criatura que aullaba o algo parecido. Mientras él intentaba sentirse lo menos incómodo posible encima de Derek, es que había caído hasta entre sus piernas y notaba todo lo que no quería notar del hombre lobo. Stiles miró a Derek a los ojos, sorprendido, mientras escuchaba un espejo romperse y recordó como antes se había sumergido en ellos. Lo había atribuido al cansancio pero, ¿y si no era eso en realidad?¿y si..? No quería ni pensarlo. La criatura huyó y Derek recuperó la mayor parte del control de su cuerpo, Stiles notó algo duro antes de que lo separara de su lado con manotazo, dejándolo aturdido. Ambos acabaron mirando a Scott, algo jadeantes, que dejaba el cristal que tenía en la mano.
Continuará...
