Disclaimer: Hetalia no me pertenece, los 2P! tampoco.
Aclaraciones: Esta historia tratará sobre pequeños momentos en los cuáles el 2P!Alemania y el 2P!Italia conviven como pareja viviendo en la misma casa. No es ningún AU doméstico ni nada, aunque pueda parecerlo. No habrá lemon, pero es Rating T por el lenguaje y posibles cosas implícitas (?).
Sin más que decir, comencemos :D
—¿Sabes? A veces es muy aburrido estar aquí—se quejó Italia—Sobre todo cuando estás ocupado y ni te apareces.
—Entones vete—respondió Alemania.
—No. Porque cuando estás, no es tan aburrido—suspiró, y fue directo al punto—Creo que deberíamos tener una mascota.
—Ya tengo mascotas.
—Sí, perros, en la casa de tu hermano Prusia. Me refiero a una mascota para los dos.
—Bueno... siempre quise tener un Husky Siberiano... (*)
—¡Espera! ¿No iremos a tener un perro, verdad?
—...Natürlich (**)—respondió el alemán, encogiéndose de hombros.
—¡Cuando decía "mascota", me refería a un gato! —exclamó Italia.
—Ni loco—gruñó el otro—No quiero un gato.
—Yo no quiero un perro.
—Podríamos buscar otro animal.
—No, ¡quiero un gato! —protestó el italiano—Son fáciles de cuidar, son buenos cazadores, y pueden quedarse quietos a mi lado mientras leo.
—Pareces un niño malcriado. No tendremos un gato.
—¡Ni un perro!
—Italien!
—Germania!
Ambos permanecieron fulminándose con la mirada el uno al otro.
—¿Qué tiene de malo un gato? —interrogó Italia.
—¿Qué tiene de malo un perro? —contraatacó Alemania.
—Maldito alemán—gruñó.
—Si de verdad te sientes solo, un perro es mejor que un gato.
—Los perros son molestos.
—Los gatos son irritantes.
—¡Tú eres irritante! —exclamó el castaño, molesto.
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—Italia, ¿qué es esto? —preguntó el rubio, sosteniendo al pequeño felino que se encontró sobre su cama. Éste le arañaba el brazo, y rugía como tigre enano.
—Un gato, capitano. Cualquiera con dos dedos de frente se da cuenta—se burló el otro.
Alemania suspiró.
—Cambiaré la pregunta—anunció el germano—¿Qué hacía el gato en mi cama?
—Nuestra cama—corrigió el país mediterráneo—Yo lo puse ahí.
—¿Porqué?
—¡Te dije que quería tener un gato!
—¡Creí que nos pondríamos de acuerdo!
—No pidas utopías—gruñó Italia del Norte.
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—¿¡Qué es esta cosa!? —chilló la nación italiana, señalando la puerta—¡Tiene el tamaño de una vaca!
—Un perro, liebe. Cualquiera con dos dedos de frente se da cuenta—se burló el rubio, tal como lo había hecho el otro el día anterior.
Al ser víctima de su propia burla, el rostro bronceado del mediterráneo adquirió un extravagante tono rojo. El alemán disfrutó enormemente de eso.
—Y no exageres, las vacas son más grandes—continuó el más alto, acariciando al perro.
—Es un mastodonte—refunfuñó Italia.
—Bueno, tú tenías un gato. Yo tengo un perro—se defendió Alemania—¿Qué tiene de malo tener dos animales en la casa?
—No son sólo dos... son tres si te contamos a ti.
—¿Desde cuándo me tratas de animal?
—Desde que se me da la gana...
Y continuaron discutiendo, como perro y gato, acertada analogía en este caso. Mientras, tanto el perro que había traído el alemán, como la pequeña bola de pelos felina que pertenecía al italiano, se observaban fijamente entre sí, sin saber cómo reaccionar con el de la otra especie.
—¡Ese perro gigante se comerá al gatito! —decía el mediterráneo, obviando su exageración.
—¡Los perros no comen gatos, imbécil! Es inofensivo. Mira, hasta parece que se llevan bien—señaló el centroeuropeo, apuntando con su dedo al lugar dónde el gato jugueteaba con el perro.
Y al final de todo, Italia del Norte aceptó tener dos animales en la casa.
—Dos y medio si te contamos a ti, Alemania—le recordó al poco tiempo, y el aludido no supo si era más insultante ser tratado como o como "medio".
(*) Raza de perro. Son muy parecidos a los lobos. Probablemente lo sabían, pero nunca está de más aclararlo ^^-
(**) "Naturalmente" en alemán.
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Y aquí el primer drabble :D Espero que les haya gustado, y nos vemos en el siguiente~.
