Luka.
¿Qué estaba sucediendo?. Adrien estaba junto a Alya preguntándose aquello. No entendían el porqué todos estaban amontonados en la entrada, y nadie parecía prestarles la suficiente atención, ni siquiera Chloè que incluso estaba junto a Marinette sin comentar algo despectivo, ambas parecían ansiosas por algo, impacientes.
Se escucharon los ruidos de pasos y fue cuando llegó Jullieka junto a un pelinegro parecido a ella, salvo que más alto.
Casi sin perder tiempo, todos se lanzaron hacia el chico confundiendo a Alya y Adrien a tal punto que no entendían lo que pasaba.
¿Quién era él? ¿Alguna celebridad? Ni siquiera cuando llegó Adrien se había armado tal revuelo.
Ambos vieron cómo Chloè se lanzaba a abrazar al chico murmurando un "Lukie" y es que lo que no sabían es que el chico había sido el primer amor platónico de ella.
_Rubia_ respondió el chico soltándose de ella para luego sonreír ampliamente al ver a la única cara conocida que aún no lo había saludado. Avanzó a grandes zancadas y abrió sus brazos para envolver en ellos a la azabache de de dos coletas que sonreía con un sonrojo _Tanto tiempo, mi linda Cielo_ sonrió el chico de ojos avellanas al pronunciar el apodo cariñoso viendo esos ojos del color del cielo.
_Te extrañé, Luka_ murmuró la ojiazul contra su pecho.
A Adrien no le gustó eso. No, para nada.
¿Porqué se estaban abrazando tanto?.
Enfurruñado a más no poder, se cruzó de brazos y miró la escena con una clara mueca de enfado.
Separense, SEPARENSE, SE-PA-REN-SE. Sus ganas de gritar la palabra eran cada vez más fuertes.
¿Por qué su amiga lo estaba abrazando?.
Nino se acercó unos minutos a Alya y Adrien y comenzó a hablar con entusiasmo.
_Él es Luka, hermano mayor de Jullieka. Todo el curso era muy cercano a él, en especial Marinette, a ella la adora_ comenta con una sonrisa divertida _Hace unos tres años se fue junto a su padre pero tal parece que volvió_ finaliza su explicación y vuelve junto al grupo.
Alya parecía sorprendida, pues su mejor amiga parecía haberse olvidado de mencionarle sobre su existencia. En cambio, Adrien estaba muy molesto, demasiado.
¿Por qué tiene que adorarla? Marinette es su amiga, suya, no de él.
Oh, él debía mostrarle cuán suya era su querida amiga.
Ese tal Luka debía comprender que había perdido su lugar, ahora Adrien era su amigo. Y como buen amigo que era debía evitar que otros chicos ocupen su lugar. Sólo él podría ser su amigo, ningún otro chico, él debía ser el único.
Era algo que sentía que debía hacerlo. Aunque no lo consideró correcto.
_¿Qué tal si hoy luego de clases te paso a buscar para una buena hora de videojuegos?_ propone el pelinegro sonriéndole ampliamente a Marinette.
La chica le devuelve la sonrisa dispuesta a aceptar cuando Adrien considera que la situación es suficiente. Él ya venía soportando demasiado todo esto.
No dejaría que ese Luka le robase a su amiga Marinette. Es muy molesto tener que verlos abrazados y sonriéndose felices sin tener en cuenta que a él le molesta, eso es muy egoísta por parte de ambos. A su punto de vista.
Poniendo una enorme y falsa sonrisa en su rostro, el rubio se encaminó hacia ambos mientras se paraba junto a Marinette, demasiado cerca para la estabilidad emocional de la chica. El pelinegro frunció el ceño ante la interrupción del chico pero luego relajó las facciones, pues es la primera vez que lo veía.
_Hola, soy Adrien. Luka, ¿No?_ preguntó extendiendo la mano para luego darle un saludo _Admito que recién me entero de tu existencia pese a que pareces ser buen amigo de todos_ comentó él haciendo énfasis en la palabra "buen" para darla a entender que nadie había hablado de él.
_¿Mi Cielo no te habló de mi? Oh, me rompes el corazón Mari_ habló él en broma haciendo sonreír nuevamente a la ojiazul que estaba bastante tensa por la cercanía del amor de su vida.
Cómo extrañaba a su mejor amigo. Después de Alya, claro. La morena la mataría por no admitir ser la más importante entre ambos.
Adrien lo entendió, realmente lo hizo. Tanto enojo por la cercanía de ambos, esas ganas de ser él quien la abrazara. Eso sólo significaba una cosa: estaba celoso.
A lo largo del tiempo lo negaba diciendo un "es sólo una buena amiga" sin darse cuenta de la verdad. Marinette era como su hermana. La quería tanto que comenzaba a tener los típicos celos de hermano mayor.
O eso creía él, aunque por el momento era mejor dejarlo en la ignorancia. Después de todo, celos fraternales o no, Adrien se encargó personalmente de que durante el año su hermanita no estuviera a solas con ese patán.
Fin.
