HISTORIA EN RETROCESO

Antes que nada, aclaremos lo obvio, Kyo Kara Mao no me pertenee para mi mala suerte.

ADVERTENCIA: Este fic no solo contiene tematica Yaoi, tambien contiene Mpreg, si no es de tu agrado no leas.

Para todas (y todos por si hay algun chico por aqui) quienes lo pidieron, aqui esta la continuación de "Insomnio", espero que la disfruten tanto como aquel.

Aclarando puntos: Este fic se compone de una serie de One-shots, que relatan la historia del bebe de Yuuri y Wolf, pero como nos lo dice el titulo, lo hace de una forma inversa.

Dedicado a todas las personas que me dejaron un review en "Insomnio"


Abrió los ojos alertado por el sonido que inundaba la habitación. Volteo a ver a su pareja solo para comprobar que se encontraba profundamente dormido, en verdad que debía de estar muy cansado para no despertar ante el llanto. Aparto un poco las sabanas y se levantó con dirección a la cuna que descansaba a los pies de la cama.

—Shh, Shh, Ya Etienne — Calmó, tomando al pequeño entre sus brazos —Papi esta aquí. Vamos Eti-chan no querrás despertar a papá ¿Verdad?

Siguió caminando por la habitación, meciendo suavemente al bebe rubio, hasta que sintió una mano sobre su hombro.

—Gomen, te despertamos —Su pareja había tenido mucho trabajo los últimos días, por eso no había querido despertarlo con el niño.

—No te preocupes —besó los rubios cabellos y extendió los brazos para tomar al pequeño, quien al sentir el cambio, abrió sus ojos negros para encontrarse con una mirada igual a la suya.

Dejo de llorar, para emitir un feliz gorgojeo, lo más que a sus cinco meses de vida podía conseguir, mientras un pelinegro le hacía gestos.

—Se parece mucho a ti, por eso prefiere estar con tigo —Se quejó su compañero.

—Más bien se parece a ti, por eso le gusta estar entre mis brazos — le sonrió de manera picara — Claro que el si lo admite ¿Verdad pequeño? —Mientras mecía suavemente su preciada carga que comenzaba a bostezar.

—Henachoko — le hubiera gritado, pero no quería despertar al pequeño que comenzaba por fin a cerrar los ojos.

El pelinegro solo sonrió y se estiro para darle un pico al otro, que asintió satisfecho.

—¿Puede quedarse con nosotros esta noche? Por favor.

—Yuuri, Si no podemos hacerlo dormir en su cuna, no podremos hacerlo dormir en una habitación propia— Trató de hacerle razonar, pero al ver el puchero del Mao ( nadie en el reino podría imaginar a su majestad todo poderoso haciendo caras tiernas para convencer a su pareja de algo), terminó cediendo.

—Gracias Wolf —y sosteniendo al bebe con un solo brazo acerco el rostro de su esposo para darle un beso más prolongado.

Se acomodaron en la enorme cama, el niño en medio de sus padres, recibiendo el calor de ambos. El ojinegro sabía que su compañero tenía razón y que debía de dejar de acostarlo con ellos, pero no podía evitarlo… en especial últimamente que había estado tan ocupado que apenas y si había tenido tiempo de ver a su familia.

—Espero que tu puedas ser más firme con el que yo Wolf, o terminara siendo un pequeño malcriado —suspiró en dirección a su dormido esposo.

El resto de la noche transcurrió sin mayores novedades, hacía algunos años, Shibuya había descubierto que el mal dormir del hijo menor de Cheri-sama se aplacaba si lo tenía entre sus brazos; también cuando su hijo dormía con ellos, el rubio se quedaba quieto, como si su instinto le dijera que ahí estaba el pequeño, lo que no era de sorprender a decir verdad, puesto que había sido Wolfram quien lo había gestado.

Para cuando el sol hizo su aparición por el horizonte, el pelinegro ya estaba en pie nuevamente. El día anterior le habían quedado algunos documentos por revisar y esperaba poder hacerlo antes del desayuno.

El rubio despertó un rato más tarde, alertado por unas manitas golpeando su cara. Abrió los ojos para encontrase con unos grandes ojos negros que le miraban con impaciencia.

—Etienne, tienes hambre ya, ¿verdad? — le preguntó mientras lo levantaba para acunarlo en sus brazos.

—Wolfram ¿Estas despierto? — se escuchó una voz desde afuera de la habitación.

—Pasa Greta— Por la puerta ingreso una joven de alrededor de 15 años —Mira pequeño, tu hermana ha venido a saludarte.

—Hola Eti-chan —lo tomó en brazos, mientras le hacía morisquetas— Yo me encargo de él papá, arréglate o llegaremos tarde a desayunar.

—Gracias.

La castaña se llevó al infante a la otra habitación (la que realmente le pertenecía al pequeño) para cambiarlo, mientras que el hacía lo mismo con su persona.

En la entrada del comedor se encontraron con Gwendal, quien sin decir nada extendió los brazos para tomar a su sobrino. Greta se lo paso sin decir nada, pero una sonrisa extraña afloraba en sus labios y sus mejillas tenían un delicado tinte rosa.

Wolf parpadeo un poco fuera de si… no importaba cuanto tiempo pasara nunca podría acostumbrarse a ver a su Aniue con el pequeño en brazos y ofreciéndole mimos; afortunadamente para la castaña… no sabía lo que su padre diría si se diera cuenta de sus sentimientos.

Ya en la mesa, se hizo evidente que Yuuri no había bajado aun a desayunar, de modo que su esposo se decidió a traerlo, le importaba un comino que fuera el rey, tenía la obligación de al menos desayunar con su familia, de modo que lo iba a arrastrar al comedor ¡¡¡Aunque tuviera que jalarlo de las orejas!!!

—¡¡ENCLNQUE!! —Abrió la oficina con un sonoro portazo —No me importa que tanto trabajo tengas, el desayuno ya… ¿Yuuri?

Se quedo estático por unos momentos ¿En donde estaba su pareja? Se acerco con cuidado al escritorio repleto de documentos, para encontrar que bajo una pila de hojas se encontraba el susodicho, estaba profundamente dormido y no parecía molestarle el estar enterrado en el trabajo… literalmente hablando.

El rubio sonrió con cariño, jamás lo admitiría ate nadie, pero la entraba mucha ternura cuando veía así a su compañero. Ahora que pensándolo bien…

Retrocedió sobre sus pasos y cerró la puerta suavemente asegurándose de atrancarla bien con el pasador, de cualquier forma estaba seguro que su hijo no les extrañaría por un par de horas al menos…

OWARI


Antes que me digan nada por el OoC, tengan en cuenta que tienen 5 años más y un bebe de 5 meses, no es raro pensar que han madurado (aunque sea un poco).

Otra cosa, aunque no viene al caso, no me gusta que los bebes lleguen a la casa y ya tienen su cuarto, a mi ver deberían dormir en el cuarto de sus padres un par de meses (o de perdis a que pase la cuarentena); si bien hasta yo admito que Yuuri es un poco exagerado al dormir todavía a Eti-chan en su cuarto...

Espero que haya cumplido con las expectativas ^^ y les haya agradado. Como ya dije la historia se compone de una serie de one-shots, van a ser 5 o 6 todavía no estoy muy segura. Tambien me gustaría hacerles una pregunta, ¿Qué prefieren, que cuando Wolf se de cuenta que esta embarazado ellos ya esten casados, esten planeando la boda, o simplemente siguen comprometidos (claro que su relación es mucho más.... he... profunda)?

Proximo capitulo: "Etienne"