Notas de la autora: He vuelto. Sí, un "he vuelto" es más preciso escribir que un simple "hola". Lamento que "Pasante" esté en un status de… ¿espera larga? Se podría decir que sí, es eso. Realmente es algo difícil admitirlo, pero me ha costado mucho continuar con ello. Y no es porque no tenga inspiración sino que… estoy exigiéndome mucho en el siguiente capítulo, que conforme escribo algo, inmediatamente lo borro porque pienso que no causará gran impacto, así que de ante mano una disculpa. Espero que les guste este nuevo proyecto, que se lo dedico a una persona que es muy preciada para mí, a pesar de no conocerla en persona y estar en otro país (risas), pero realmente es como una hermana cibernética, mi amiga y colega de fanfics, Necrara-darkmoon.
Disclaimer: Las chicas superpoderosas Z no me pertenecen, lamentablemente. Mi historia está hecha sin fines lucrativos.
Advertencias: Horror. Mucho horror. Asesinatos. Y mi toque favorito de suspenso. Probablemente un poco de OoC, y un Universo Alterno
Goodbye or hello – Perfect Hell
Prólogo
El joven de piel pálida y ojos verdes se encontraba frente a la computadora que había dentro de su oficina, ya habían transcurrido más de cuatro horas, pero él no parecía tomar en cuenta esto. Tecleó una dirección y frunció levemente el ceño al ver el anuncio que aparecía en la pantalla de su computador.
"La página WEB que ha solicitado, ha sido dada de baja debido a que infringía las normas cibernéticas situadas en la gran red. Por orden del FBI, ha sido cancelado cualquier contenido de la misma."
—La gran red. —susurró Butch, quería soltar una gran carcajada y a la vez aventar el computador al suelo, podría hacerlo… pero no quería tener ahí a sus hermanos preguntándole que le había pasado. Escuchó los pasos de alguien acercarse por el pasillo de la gran casa, sus ojos se desapartaron de la pantalla, escuchó que tocaron la puerta enseguida de una voz femenina detrás de ésta.
—Cariño, tu padre ha llegado.
La voz preocupada de su prometida Evangeline, hizo que sus ojos se desapartarán un momento de la pantalla de la computadora y soltó un resoplido haciendo que el mechón que cubría parte de su rostro se levantará un poco.
—Iré en un momento. —dio una respuesta corta y bastante fría, esperando que con eso su prometida se alejará de ahí sin insistir más.
Sabía que a él le molestaba que le interrumpieran en sus horas de trabajo; y no era para más, su concentración debía ser total, para no cometer algún tipo de error por el que tuviera que ser reprendido. Butch se encargaba de la administración financiera de las empresas textiles de su familia.
La familia Akamiya, una familia adinerada que dedicaban su vida al trabajo. Su hermano mayor, Brick, era el que se encargaba de arreglar los problemas comerciales que llegaban a tener las empresas que raramente había alguno, y si lo había, Brick se encargaba de resolverlo al momento. Boomer, su hermano menor se encargaba del mantenimiento de los sistemas de las empresas y de la supervisión del funcionamiento de la maquinaria.
Él por su parte ayudaba administrar la economía, Butch se encargaba del control de pagos de los trabajadores, de la compra de maquinarias nuevas y lo más importante, de los contratos internacionales de la empresa y las futuras asociaciones que pudiera tener o más bien que le pudieran convenir a la empresa.
Su trabajo no requería estar en las empresas, más que para ciertas reuniones de tomas de decisión. A Butch de cierta manera no le molestaba su trabajo, su padre les había inculcado que: "el dinero no crece en los árboles". Todo lo que tenía su familia lo había logrado con sus propios esfuerzos, aquel que dijera que hacer algo con esfuerzo era en vano, era porque seguramente no puso el suficiente esfuerzo en su vida.
Butch era un joven bien parecido, rico e inteligente; si algo podía detestar de su vida es el estar comprometido con Evangeline Wellz, la hija de uno de los empresarios más famosos en Japón. Interés propio, por supuesto.
Evangeline era una chica hermosa, pero simplemente Butch era un desinteresado, al menos de ella. ¿Amor? Como si realmente eso existiera en su mundo. Brick, estaba a meses de casarse con la hermana mayor de Evangeline, su pelirrojo hermano lucía cada día más infeliz conforme pasaba el tiempo. Pero según su padre, uno debía tener prioridades ante todo.
No es como si realmente esperase a encontrar al amor de su vida. Al contrario, sabía que eso no existía. Su vida no era un cuento de hadas, en donde él era el príncipe dispuesto a proteger o encontrar a la princesa en peligro. Él desde su punto de vista, se clasificaba como un ser horrendo, a pesar de todos las buenas cualidades mencionadas.
El amor es una de las grandes mentiras del mundo. O eso pensaba, él simplemente había aceptado la oferta de matrimonio por conveniencia, y sí, la palabra "oferta" no estaba de más, ya que para él no era más que un simple negocio a cambio de, un simple trato. Evangeline era hermosa, pero bastante cabeza hueca a su parecer. ¿Qué si habían tenido sexo? Sí, lo habían tenido. Puro placer vacío, sin ninguna emoción más que la mera calentura hormonal.
Butch tecleó otra página y frunció el ceño al ver que aparecía el mismo mensaje que la página anterior. Se recargó sobre el respaldo de su gran silla, y miró la pantalla de su computadora, cerró sus ojos y negó con la cabeza. Eso era jodido.
En sus ratos libres, solía pasarse por las páginas pornográficas o que mostraran algún acto indebido. Golpes, violencia, humor negro o vídeos bien empleados en que se follaban a alguna puta de manera explícita y a la vez oculta. No es que fuera un psicópata, ni un sádico con fetiches extraños pero… ver eso lo hacía sentir un poco más normal.
Debido a todo el dinero en el que se vio envuelto desde pequeño, no sabía realmente como vivían las personas del barrio bajo; sin embargo, de algo estaba seguro… se divertían en grande. Más de lo que él en su vida lo haría.
Un pequeño sonido lo hizo abrir un ojo, y se reincorporó abriendo ambos, al ver un anuncio aparecer en forma diminuta en la parte inferior derecha de la pantalla.
"La vida puede llegar a ser muy deprimente algunas veces. Las personas siempre buscarán hacer más miserables a otras para sentirse bien con ellas mismas. Este es un lugar miserable, en el que puedes disfrutar de esos momentos. ¿Puedes lidiar con ello?"
Butch arqueó una ceja, podría ser que se tratase de algún tipo de virus o alguna broma de algún loco cibernético. Movió el cursor de su mouse al botón de cerrar y se detuvo antes de dar clic en él.
—Miserable. Justo como siento mi vida en algunos momentos.
Butch miró la pequeña ventanita en donde tenía el mensaje y quedó pensativo por un momento, miró la memoria externa y principal de la computadora, la desconectó para que no sufriera ningún tipo de daño la información y dio clic en la ventana.
Miró que enlazaba a un tipo de juego, lo cual lo hizo reír un poco… con que se trataba de eso nada más. Una pequeña ventana parecida a los SIMS* apareció, pidiéndole que eligiera un sobrenombre y creara un avatar.
Él, un empresario, metido en ese tipo de juegos. Pero, ¿por qué no? No es como si tuviese algo de malo, tal vez de vez en cuando podría jugar como un mocoso en ese raro sitio.
—Elige un nombre. Nudillos. —Butch soltó una risa ante esto, bueno… no se le había ocurrido un apodo mejor. Anteriormente, cuando era un adolescente, iba a un instituto privado, en el cual no era ningún santo. Más de cuarenta narices rotas gracias a sus poderosos nudillos. Después de eso, habían preferido que estudiase en casa, aunque pelear ya no era lo suyo… pero si había una oportunidad no la desaprovecharía para mandar a cualquiera que lo llegase a provocar al hospital.
Empezó a crear su avatar y dio clic en "crear", trato de hacerlo semejante a él, esperando que eso lo hiciera sentir menos estúpido, aunque sabía que parecía más lo contrario. Un personaje extraño con el nombre de "Him", el cual no sabía definir si era hombre o mujer, ni siquiera sabía si representaba a un ser humano ya que en vez de manos eran unas extrañas tenazas de cangrejo, le dio la bienvenida.
"Bienvenido a Good bye or hello, hay varios tipos de salas públicas en las que puedes entrar, pero hay salas en las que necesitaras ser invitado por alguien para ingresar a estas. Las reglas son simples has amigos, conócelos y ellos te mostraran cosas bastante interesantes. Pero ten cuidado con los tipos de amistades que formas, evita preguntas personales al menos que estés dispuesto a correr el riesgo. ¿Entendido?"
Butch pulso el botón de "okay", arqueó una ceja al mirar al personaje hermafrodita desaparecer. Su avatar se ubicó en el centro de una ciudad virtual y Butch empezó a "caminar" por la ciudad, ese juego era muy parecido a los juegos de interacción social, pero había algo diferente. Algo un poco más perturbador.
—Hmm… que extraño…—dijo Butch, para sí mismo mirando los nombres de las salas que tenían. Hizo una mueca e ingresó a una que tenía por nombre: "Delicious Eyes". Miro que se encontraban aproximadamente más de cuarenta personas en esa sala y se sorprendió un poco, generalmente siempre se encontraban en esos juegos a uno o dos.
Butch miró al avatar de alguien que se decía llamar "Carnicero" avanzar al micrófono como si realmente fuera a hablar y un globo de diálogo apareció en el personaje.
"Bienvenidos, queridos colegas del horror y amantes de la carne. Les he preparado una nueva función, por favor disfruten de mi nueva creación…"
Butch miró un vídeo empezar a reproducirse y se echó para atrás, negando con la cabeza. ¿Acaso era ese sujeto? Sólo podía verse la boca de éste y no precisamente del avatar, si no de la persona real, la que controlaba a ese "carnicero", devorando lo que parecían ser unos ojos, Butch esperaba realmente que no fueran de un humano. El vídeo estaba enlazado directamente, por lo que significaba que eso estaba pasando justo en ese momento.
Miró a todos los personajes aplaudir, y "gritar" emocionados… él sólo pudo salir de ahí. Butch respiró agitadamente, eso había sido demasiado aterrador; podía sentir su corazón latiendo con fuerza, tenía ganas de vomitar, pero sobretodo… tenía curiosidad.
—Butch, cariño… tu padre me mandó a buscarte de nuevo. ¿Vas a venir?
La voz de Evangeline lo sacó del shock en el que estaba, miró la puerta y suspiró para tranquilizarse.
—En un momento voy, estoy guardando algo. —dijo Butch, un poco más tranquilo. Miró la página en la que estaba, tomó su computadora portátil la enlazó con su computadora y pasó la información de esa página a su laptop. Borrando cualquier rastro de la computadora principal, sonrió levemente, apagó ambas computadoras y salió a saludar a su querido padre.
Reviews?
SIMS* Juego de interacción social.
Nudillos. Copyright mi querida Necrara.
Nos leemos el siguiente capítulo.
