Seguro que no me conoces.. Para que sepas así soy yo: tengo el cabello rojo, dicen que como la sangre, mis ojos son de color azul como el cielo y mi piel blanca... blanca... blanca normal, creo.

-¡TALA!-

Si ese es mi nombre, el cual acaban de gritar a todo pulmón. Y la persona que grito es mi madre, pero a veces la gente nos confunde y a veces yo mismo me confundo, por ejemplo: Cuando mi mamá y yo salimos a pasear, las personas le dicen a ella.

-Que hermanito mas hermoso tienes- claro que hablan de mi. Y mi mamá no los corrige, no se porque. Ella siempre dice que tiene 21 y lleva diciéndolo mas de 5 años, dice el tío Spencer, y ahí esta la confusión, porque a veces le digo mamá y a veces: Sasha y ahí viene mi regaño, como el que me dará. Cuando grita mi nombre tan alto, tan alto, tan alto, es porque ya sabe de mis travesuras.

Pero no las hago solo, tengo una amiga, tenemos la misma edad. Se llama o mas bien sus papás le pusieron Kaisir, no entiendo que papás le ponen un nombre extraño y raro a su hijo, ella lo detesta, es por eso su diminutivo... Kai. Su tono de cabello es muy raro, es doble color, sus ojos es de color violeta.

Kai y yo, siempre nos metemos en líos, pero nadie nos comprende, como la vez que entre los dos nos comimos un pastel.

Era la fiesta de cumpleaños de mi tío Spencer, mamá lo celebro en la casa y yo invite a mi vecina y amiga Kai. Como la fiesta no había empezado, nos enviaron a ver televisión, nos encontramos con un programa divertido. En el cual las personas, comían un pastel y cuando lo acababan encontraban un premio. Al principio no pensamos en nada seguimos viendo. Pero al rato paso algo que nos llamo la atención.

-Bien chicos, el pastel ya esta aquí y también un premio para los dos.- Mamá se fue, Kai y yo nos miramos y pensamos lo mismo.

-¿La cocina?- pregunte, ella solo asintió.

Era un pastel realmente grande, y la boca se nos hizo agua, su cobertura era de chocolate, y tenía chispita de colores en la orilla. Se veía muy, muy delicioso, e idéntico al de la televisión, de seguro también tenía un premio adentro como dijo mamá. Kai reviso que mamá o el tío Spencer no vinieran.

-No hay moros en la costa- me murmuro. Busque dos cucharitas, tuve que subirme en un banco para sacarlas. Le di una a Kai y juntos subimos a la mesa, arrodillándonos tomamos la primera cucharada del pastel, sabía delicioso. El pastel tenía relleno de fresa, seguimos con la segunda cucharada, debíamos llegar hasta el fondo del plato para encontrar el premio que dijo mamá que traía el pastel. Pronto nos habíamos comido toda la orilla.

-Probemos con la parte de en medio- me dijo Kai, ella podría tener un plan, casi siempre los premios de la televisión estaban en medio y si nos comíamos esa parte pronto sabríamos que nos habíamos ganado.

No lo dudamos mucho, comimos rápido para ver pronto nuestro premio, pero entonces llego mamá con tío Spencer. Los dos nos cacharon con la cuchara en la boca...

-TALA- grito mamá y supe que había problemas, Kai sonrió dulcemente, ella siempre era perdonada porque ponía esa mirada del gato con botas que aprendió cuando vimos Shreck. Tío Spencer nos miraba serio pero sabía que por dentro estaba riéndose, ya que mamá nos trajo un espejo y nos hizo vernos, yo tenia toda la boca manchada de chocolate y en los dientes tenía las chispas de colores que me los pintaron. Kai tenía chocolate hasta en la nariz, porque ella tomo una gran parte redonda con sus manos, sus cachetes también estaban manchadas y sus dientes estaban de colores, mas que los míos. Me reí de ella, pero de nuevo mamá me regaño por el puchero que le hizo Kai.

-¿De quien fue la idea?- pregunto mamá, yo sabía que habíamos sido los dos, y entonces el castigo sería pequeño.

- Tala- Kai me acuso, dejándome con la boca abierta, eso no era cierto, porque los dos tuvimos la misma idea.

-Tala Ivanov, estas castigado sin televisión por dos semanas. Solo me cruce de brazos, molesto, no era justo ese castigo, Kai también tuvo culpa, la misma mitad que yo.

-No habrá pastel- hablo al fin el tío Spencer, divertido.

Nos faltaba poquitititititititito para encontrar el premió en el pastel.

Pero al cabo de un rato empezó a dolernos el estomago, era un dolor feo y las tripas me sonaban, parecía que mi estomago rugía y no entendía porque. Kai también le dolía, se quejaba que no podía caminar y se quedo acostada en el piso, sobándose su estomaguito.

Mamá dijo que el dolor fue por comer tanto pastel, pero en el programa que vimos, ninguno de ellos se quejaba de dolor y encontraban un premio, y eran felices por siempre, eso decía Kai.

Pero he aprendido mi lección, si comes mucho pastel, te duele el estomago.

Y el premio... nunca obtuvimos un premio... solo castigo.


Este fic, tratara de Tala siendo un niño, la edad pueden ponérsela ustedes, se los dejo a su imaginación.

Tratara de sus aventuras junto con su amiga "Kai"... jijiji... veremos que mas sucede.