Adóptame!:D

Capitulo 1:

Eran las 7 de la mañana, hace unos días acababa de terminar el 2 año de secundaria, y empezaban las vacaciones de verano, aun que acabaran de iniciar, tenia aun que levantarme temprano y alistarme para hacer la rutina de siempre, no podía darme el lujo de dormir hasta tarde como los chicos normales.

Me levante de la cama y me fui a bañar, me puse un pantalón de mezclilla desgastado y un camisa negra también desgastada, unos tenis negros con rayas blancas, al igual que mi demás ropa era vieja, pero estos se encontraban en mejor estado. Peine mi cabello, muy peculiar por cierto pues estaba en pardo y era de tres colores: rojo, negro y mechones rubios, a la vez que combinaban perfectamente con mis extraños ojos color rubí.

Cuando termine de alístame, vi que mis compañeros estaban todavía dormidos, así que decidí despertarlos, pues tenían también deberes que hacer:

-Vamos despierten—les dije tranquilamente, pero como solo vi que se taparon la cabeza con las sabanas y me ignoraron, grite:—Carlos, Ramón! ARRIBA!—al decir esto ambos se levantaron con un sobresalto por el susto.

-Vamos Yami!...es muy temprano y es vacaciones no podemos dormir más?—me dijo Carlos rascándose sus ojos color café claro.

-Si es verdad!...por una vez en el año podemos empezar tarde los deberes?—me dijo Ramón con todo su pelo rubio despeinado.

-Saben que no se puede…todos se levantan temprano para cooperar en la casa…así que andando!—dije con las manos en la cintura, al ver que no los dejaría quedarse más tiempo en cama ambos se levantaron, pero cuando iba a salir por la puerta uno de ellos me detuvo:

-Yami por cierto…FELIZ CUMPLEAÑOS!—dijo Carlos mirándome con una sonrisa amplia.

-Es verdad, FELICIDADES!...hoy cumples ya los 15 años verdad?...y dime, que es lo que harás el día de hoy?—me pregunto Ramón con una cara que demostraba mucha curiosidad.

-No lose, creo que nada, como vez no tengo mucho dinero—dije tratando de no demostrar ninguna emoción para restarle importancia, pero puede ver en ambos que su sonrisa se iba desvaneciendo.

-Eso no es justo…hoy deberías pasártela de lo mejor!—dijo Ramón con una expresión de tristeza.

-No te preocupes, ya veré como pasarla bien el día de hoy aunque no hagamos nada en grande…verán que nos divertiremos—cuando termine de decir esto, vi que ambos volvieron a sonreír—bien ahora levántense y no pierdan más tiempo que ya es tarde.

Ramón y Carlos eran niños buenos, tenía años, ambos los avían abandonando en el orfanato desde pequeños al igual que a mí. Espero que dentro de poco encuentren a una familia que los quiera mucho y no vallan a estar como yo, ya con 15 años y sin ser adoptado. Yo soy el más grande de los niños de este lugar, pues aquí hay mucha gente que suele adoptar niños, pero alguien con 15 años como mi caso, es muy difícil, cada año que transcurría era menos las posibilidades de encontrar a una familia, no es que no haya tenido oportunidades, es que tenía un gran problema: tengo un don de ver el aura y pensamientos de la gente, por lo que a veces solía asustar a las personas que querían adoptarme, por suerte aprendí a controlarlo gracias a la señorita María, la encargada del orfanato, ella es la única de este lugar que lo sabe, es muy comprensiva y ya había tenido tiempo atrás un caso similar al mío, pero fue demasiado tarde cuando ella se percato de mi "peculiaridad", ya había perdido mucho tiempo.

Fui a la cocina, puesto que era el más grande y me tocaba cocinar, me había hecho un buen cocinero, así que ayudo todo el tiempo en la cocina.

-Buenos días Yami como estas?...y feliz cumpleaños!—me dijo la señorita María con una sonrisa.

-Buenos días y gracias, estoy bien, aunque algo adormecido todavía- le dije sonriéndole, tenía que admitirlo, a pesar de estar acostumbrado a esta rutina, a veces no podía evitar sentirme soñoliento por las mañanas.

-Mmm… jaja me extraña de ti, siempre te despiertas con muchas energías por las mañanas- dijo mirándome con cara de curiosidad.

-No, no se preocupe, es que anoche no podía dormir, eso es todo, tuve algunas pesadillas y por si fuera poco casi me caigo de la cama- dije mientras me rascaba la cabeza.

-Y se puede saber que eran esas pesadillas?...digo si no te incomoda contármelo- me miro con una cara de preocupación, ella sabía que no era de las personas que tienen malos suelos y menos de los que se caen de la cama.

-Si no hay ningún problema, sabe que le tengo mucha confianza como para contarle- le dije con la cabeza abajo mientras tomaba un cuchillo para empezar a picar las verduras en una mesa-Tal vez le suene algo tonto, pero soñé que me quedaba solo en el mundo…- le dije mirando por una ventana que estaba enfrente de mí, cuando note una mano que se posaba sobre mi hombro, al voltear me di cuenta que era de la señorita María.

-No te preocupes Yami, no estarás solo ya lo veras, aun hay tiempo de que consigas una nueva familia, veras que pronto llegara, en todo caso aquí siempre estaré yo para cuidarte- me dijo con una expresión tierna. Ella me había confesado que se había encariñado tanto con migo que quería adoptarme, pero ella ya tenía tres hijos y su economía no alcanzaría para otra boca, por eso no cumplía con los requisitos necesarios para adoptarme, pero aun así me trataba como si fuera su hijo.

-Muchas gracias- sentía que las lagrimas seme saldrían en cualquier momento, la quería de verdad como a una madre y me dolía que no pudiese serlo, además sus hijos también eran como hermanos para mí. Baje un momento la guardia y unas lagrimas rodaron por mis ojos, en ese momento baje la cabeza, y de un momento a otro María me abrazo.

-Todo estará bien ya lo veras- también la abrase y llore un momento en su hombro- bien Yami, vamos a hacer el desayuno que se nos hace tarde- me separo tiernamente de ella y con una linda sonrisa nos pusimos manos a la obra, terminamos haciendo chilaquiles para desayunar.

Una vez terminado el desayuno y lavado los platos, fui a barrer el patio, para esto ya eran las 9 de la mañana y ya llevaba la mitad del patio, solo me faltaba la oficina de la directora del orfanato (la de la señorita María) que estaba junto a la entrada. Cuando estaba a barriendo cerca de la puerta alcance a escuchar que María estaba hablando con una mujer, me asome levemente para ver, era una muchacha muy bonita, de pelo largo y café, apenas pude ver su rostro, pero pude percatarme que tenía unos hermosos ojos café claro.

-Así que desea adoptar a un niño, y como de qué edad te gustaría?- dijo María a la muchacha.

-Si, así es, pero no tengo una edad especifica- callo un momento y se tomo la barbilla para luego seguir- creo que uno de los procedimientos de adopción viene que podemos los nuevos padres interactuar un poco con los niños para poder elegir mejor a un niño que se lleve bien con nosotros, verdad?

-Si, pero como usted no tiene una edad especifica, tendría que ver a todos los niños, aquí podrá encontrar a niños muy buenos y agradables de todas las edades, los niños más grandes que están aquí llegan de los 11 y 15 años – le dijo con una sonrisa muy amplia- entonces…cuando le gustaría venir para interactuar con ellos?.

-Si no recuerdo mal, los niños empiezan sus vacaciones desde hoy, además es fin de semana, cree que podría venir hoy mismo a las 3 de la tarde? – dijo la muchacha con una voz que demostraba lo ansiosa y emocionada que se encontraba.

-Me parece perfecto, para entonces habrán terminado sus deberes del día y tendrán tiempo para alistarse, se los comentare en seguida, se pondrán felices- la miro fijamente y la abrazo como si la conociera- me da mucho gusto que te animaras a adoptar, veras que encontraras a un buen niño.

En ese momento me extraño tanto el hecho que la abrazara, pues ella solía traer a sus amigas en vez en cuando al orfanato y a esa muchacha nunca la había visto por aquí, además que era mucho más joven que las demás amigas que suele tener, fácilmente podría ser mi hermana.

Cuando menos lo pensé caí al suelo, pues me había agachado demasiado para poder ver por la ventana sin que me vieran, caí justamente enfrente de la puerta haciendo mucho ruido, pues tire junto con migo el recogedor, que me ensucio todo de polvo y tierra, lo cual provoco que ambas voltearan.

-Yami! Te encuentras bien? - dijo María asustada desde dentro.

-Sí creo que si- dije todo adolorido y con los ojos cerrados, pues la tierra me había caído en los ojos y no me dejaba ver. Cuando de repente sentí una mano que me tomaba de la muñeca con la intención de ayudarme a levantar, era una mano pequeña y re confortadora, en ese momento "mi don" me permitió sentir una sensación de tranquilidad y paz, por lo que creí que era María, pero cuando abrí los ojos, lo que vi me dejo perplejo, era la muchacha que me miraba desde arriba, con unos ojos curiosos y una linda sonrisa.

-S-si- apenas pude responderle, de verdad eran ojos muy lindos y me dejaban sin aliento.

-Tienes lindos ojos- dijo nuevamente, a lo que solo le asentí, seguía sin poderle contestar, además que la pena por haberme caído y ser descubierto espiando me empezaba a embargar, volteo a ver a María- bueno María te veré a la hora que acordamos, tengo que irme-se volteo nuevamente a mí, y hasta ese entonces me percate que no me soltaba la muñeca aun, me sujetaba suavemente- supongo que a ti también te veré no?, María me ha hablado de ti y de todos los demás, así que espero poder pasar un rato también contigo, bueno cuídense ambos- en ese momento al fin me soltó la mano y salió por la puerta, sin antes decir adiós con una seña de mano.

Bueno esta es mi primera historia, quería hacer una un poco más "extraña" por así decirlo, es que esta seme ocurrió en un momento que estaba hablando sobre adopción con unas amigas, pues la idea de adoptar siempre me pareció buena, y como ven a Yami aquí es un huerfanito jeje (creo que lo recalque mucho en este episodio jeje), bueno sigan leyendo para ver que pasa…una cosa es segura, tendrá momento de angustia continuamente (o al menos eso planeo jeje).

Bueno espero que este cuento sea de su agrado y dejen sus comentarios para saber que tan buena soy en esto y de cómo va el progreso de la historia. Tratare de continuar lo más pronto posible, debido a que acabo de entrar a la escuela y ya me dejaron unos proyectos…que híjole!...jeje pero tengan paciencia…que si tendré ratos de ocio jeje.

Nota: los trámites de adopción y esas cosas…me las invente…pero creo que no estoy muy lejos de la realidad jaja

Sin más que decir…cuídense bye.