Prologo:

Sentí su mano soltarse de manera cobarde de la mía,sus perfectos ojos cafés llenarse de lagrimas.Y lo supe,supe que había destruido el poco valor que su débil corazón había recuperado,el poco valor que ella había reunido para poderse olvidar de mi ¿y yo que hice? Termine de romper toda aquella fuerza que ella misma se esforzó de recuperar.

—¿Qué quieres de mi?.—Su voz se corto solo con pronunciar aquella amarga pregunta. No tuve el valor ni la decencia de mirarla,no pude hacerlo.

—Laura...

—¿Creíste que viniendo aquí todo se solucionaría?.—Pregunto en un tono tan frió que me dolía.—Victoria,¿Tan bajo has caído?.

¿Victoria? Hace mucho que no la oí decirme así,ella siempre me decía "Tori" por aquel personaje que interpretaba en Victorious,siempre ame que me dijera así pero ahora es como si nuestra historia nunca hubiera existido,como si ella nunca me hubiera conocido.

—Lau,yo nunca quise que esto terminara así.—Por fin alce la mirada,encontrándome una vez más con esos hermosos ojos cafés que tanto amaba.

—No me mires...—Suplicó.—Todo menos eso,por favor déjame sola.

—Laura,no puedes olvidar todo lo que vivimos. Esta bien,cometí un error pero volví,aquí estoy y no voy a dejarte otra vez.—Me acerque a ella,pero ella se alejo como si mi sola presencia le doliera.—Te amo,Lau.

—No.—Murmuró.—Tú no puedes amarme,esto no debería estar pasando.

—Podemos con esto juntas.—Trate de tranquilizarla al ver que se estaba desesperando.

—No...no existe un "Nosotras".—Bajo la mirada,se que esta mintiendo pero me dolió lo que dijo.

—¿Me estas diciendo que todo lo que vivimos no valió nada para ti? ¿Es verdad?.

—Tori,no lo hagas más difícil.—Me miro,y pude ver como su mirada se endurecía.— Tú decidiste que esto terminara así,tú lo escogiste a él sin importarte que me dejaras rota al hacerlo,ahora solo siento un terrible rencor hacía a ti.

—Laura,no nos hagas esto..—Podía sentir como las lagrimas empapaban completamente mi rostro,me estaba cayendo al abismo.

—¿Hacernos qué? Si tu lo quisiste así,todo fue para ti como un juego,me dabas...¿Cuál es la palabra? dolor,solo eso me causabas,siempre me dejabas sola ni siquiera un maldito mensaje de "Este juego se termino" me mandaste,solo terminaste de la peor manera conmigo haciendo que mis sentimientos por ti se pudrieran como una asquerosa manzana.

Nunca la había escuchado hablar así,no se ni donde se fue aquella chica inocente y tierna de la cual me enamore,esa Laura que estaba frente a mi no era mi estrellita de luz y se que por mi culpa ella esta destruida. Me había jurado a mi misma que la protegería de todo y de todos...y al final yo soy quien le esta haciendo más daño. Ahora solo la veía tan débil y frustrada,tan llena de ira y de rencor solo por mi causa.

—¿Qué te sucedió?...—Una parte de mi se negaba a creer que mi princesa se haya transformado en alguien sin corazón solo por mi estúpida culpa.

—Abrí los ojos,ya me canse de estar siempre persiguiendo algo imposible.

—Estas mintiendo,tu siempre dices que nada es imposible.—Le dije débilmente,obteniendo solo una carcajada sin gracia de su parte.

—Se nota que no me conoces.—La escuche decir en un susurró.

—Te conozco más de lo que tu te conoces.—Me acerqué a ella de un solo paso.—Se que le temes a los truenos desde pequeña,se que nunca dices lo que piensas ya que crees que de alguna forma es informal,se que te gusta el color rojo por que cuando tenias tres años tu abuela te regalo un hermoso vestido rojo,créeme que te conozco demasiado y además se cuando estas mintiendo. No soy tonta,Lau.

No pude seguir mirándola a los ojos,me dolía ver que aquel brillo en sus ojos había desaparecido,no tenia fuerzas ni para ver su reacción ante todo lo que le había dicho. Tenia la esperanza de que ella cedería y me perdonaría,pero se que la probabilidad de que eso ocurra es una en un millón.

—Lárgate...—Alcé la mirada sorprendida,pude ver el dolor y el rencor en sus ojos.

—Lau...

—Lárgate...no quiero seguir escuchándote.—Ella me hablo en un tono de voz que nunca había escuchado en ella,y ya me sentía miserable.

—Te amo...

—¡Vete!...

Al oírla gritar fue la gota que rebaso el vaso,sabía que todo había terminado y que no había vuelta atrás por ese maldito juego que le propuse,yo nunca pensé que me terminaría enamorando de ella ni que le haría daño,nunca lo vi venir pero ahora solo me siento tan patética que solo puedo girarme y hacer lo que ella me pidió...largarme de su vida.