LOS PERSONAJES NO ME PERTENECEN, PERTENECEN A STEPHANY MEYER, LA HISTORIA ES MIA AUNQUE ALGUNAS SITUACIONES SON PROPIEDAD DE STEPHANY MEYER
NUESTRO AMOR, NUESTRA DECISION
1.- EL BAILE
Edward Cullen, de 18 años de edad está en el último curso de la preparatoria, está esperando a su "supuesta novia" para ir al baile, el no quería ir con Tanya, en realidad no quería ir, pero mucho menos con Tanya, hubiera preferido ir sólo que mal acompañado, y para colmo Jacob Black compañero de clase de Edward iba a llevar al amor de su vida a ese baile, Isabella Swan, cuando se entero casi lo mata pero luego pensó que él no era nada de ella.
No había intentado nada por 3 motivos, 1º porque era la mejor amiga de su hermana y 2º porque era la hermana de su mejor amigo y 3º porque creía que era algo joven, a sus padres no parecía importarles o eso le había dicho Emmet, mejor amigo de Edward y hermano de Isabella, a través de Emmet también se había enterado que Isabella iba por obligación, por motivos muy parecidos a los de él.
Edward intento quejarse y evitar el compromiso en el que su padre le había metido, el Doctor Carlisle Cullen y el Doctor Eleazar Delani eran los dueños y directores del hospital de Forks, dado que el Dr Delani no tenía hijos varones, si tres hijas de las cuales la mediana iba a estudiar enfermería, y que el Dr Cullen tenía un hijo y una hija y su hijo iba a estudiar medicina, decidieron que para evitar conflictos en un futuro por la dirección del hospital, lo mejor era que sus hijos se casaran, Edward y Tanya.
Edward no estaba de acuerdo con esa decisión y así se lo hizo saber a su padre, pero este no le dio opción, Edward quería estudiar salir con sus amigos y elegir a su mujer y que esta fuera la mujer que ama, preferiblemente Isabella, Bella para los amigos, por su parte Tanya no se oponía, ella pretendía hacer su vida antes y después de casarse y no le importaba casarse con Edward porque era guapo y tenía dinero pero no iba a renunciar al resto de sus conquistas. Edward lo intento todo pero no pudo zafarse, así que estaba esperando a Tanya para ir al baile.
Cuando Tanya bajo Edward ya llevaba esperándola 15 minutos, estaba un poco desesperado, no le gustaba la impuntualidad, y mucho menos en una situación en la que él no quería estar. Debía reconocer que ella estaba guapa, era una mujer muy guapa, rubia, pelo largo, hermosas curvas, alta pero le faltaba algo en su mirada, le faltaba ángel.
Edward como caballero que era alabo su belleza y se fueron en dirección al baile de graduación, después de esto solo le quedaba una semana de instituto y se iría a Nueva York que es donde iba a estudiar medicina, durante los años de estudio su relación con Tanya sería prácticamente platónica y a ella no le importaba, ella se quedaba en Forks porque estudiaría enfermería en Port Ángeles y allí tendría todos los chicos que quisiera.
En el otro extremo del pueblo otro chico esperaba por una chica, Jacob Black esperaba que Isabella bajara, ella no le permite llamarla Bella porque ella decía que solo podían llamarla así las personas a las que ella quería, Bella era un año menor pero como su padre y el de Jacob querían casarlos, ella iba como su novia, también iba Emmet con su novia Rosalie, el tendría que haber salido con la hermana de Jacob, Rebeca, pero tanto Emmet como Rebeca se habían negado, Emmet se había enamorado de Rosalie y le daba igual no heredar la empresa, el estudiaría informática y mecánica industrial como Rosalie, ya que ambos eran unos portentos con los coches, cogían utilitarios y los convertían en coches de lujo tanto estética como mecánicamente.
Cuando Isabella y Rosalie bajaron a encontrarse con sus parejas ambos se quedaron de piedra, ambas estaban muy hermosas, Rosalie vestía un vestido rojo palabra de honor, corte imperio que la marcaba el pecho con mucho estilo, luego era ajustado hasta las rodillas donde tenía una pequeña falda, corte sirena, los zapatos eran negros y el pelo lo llevaba recogido en una cola en cascada que dejaba ver lo largo de su melena, Isabella llevaba un vestido azul rey, con tirantes finos, ajustado a la cintura y con una falda con vuelo y varias capas de tul, los zapatos eran color plata y el pelo lo llevaba suelto y retirado de la cara. Cuando los chicos se recompusieron se llevaron a las chicas hacia el baile.
Al llegar al gimnasio del instituto, lugar donde se celebraba el baile, las dos parejas Swan se encontraron con Edward y Tanya, Edward casi hiperventila al ver a Bella, pensó que no había mujer más guapa en el mundo que ella, no era tan alta como Tanya, ni tenia los pechos tan grandes, pero tenía un cuerpo muy bonito y proporcionado, sus rasgos eran dulces y sus ojos grandes y profundos y tenía un resplandor que le faltaba a la belleza insustancial de Tanya tenía Ángel.
Cuando llevaban mas o menos una hora en el recinto Edward y Bella se quedaron solos y Edward pensó que era ahora o nunca, total no tenía nada que perder, en una semana se iría, por lo que si le rechazaba no habría problema, y por su hermana decidió preocuparse luego, el problema podría venir de Emmet pero Bella valía el riesgo.
Se armo de valor y la invito a pasear por los jardines del instituto, cuando llegaron a la fuente se sentaron, Edward respiro fuerte y le cogió la mano a Bella temiendo su rechazo, pero este no llego lo que le dio el valor suficiente para hablar
E: Bella, escúchame y no me interrumpas por favor, cuando acabe si no quieres volver a verme lo entenderé. Bella se que puede parecer que Tanya es mi novia, bueno técnicamente lo es, pero solo es fachada, mi padre me obliga a salir con ella por el hospital pero yo no la quiero, de hecho la detesto, se acuesta con todo aquello que tiene pantalones y no le importa que yo lo sepa.
Bella se estremeció ante el comentario y yo me apresure a aclarar la situación. Bella yo no lo he hecho ni lo hare, ni siquiera la he besado ni pienso hacerlo.
Bella yo estoy enamorado, pero no de Tanya, estoy enamorado de ti, te amo, eres mi vida, se que dicho así suena muy fuerte, pero es la verdad, no sé si podre vivir sin ti y sé que es complicado, muy complicado.
Mi padre me obliga, tu padre te obliga, yo empiezo la Universidad y tú sigues en el instituto, pero si me quieres aunque sea un poco podremos con ello. Llevo tanto tiempo enamorado de ti, casi desde que eras una niña, que no me importa esperar un poco más, todo el tiempo que tú me pidas.
Respire hondo otra vez, haciéndola entender que había terminado y que esperaba su respuesta, me miraba fijamente pero no podía interpretar su expresión y eso me ponía muy nervioso.
B: Edward, dije todavía sin creerme todo lo que me había dicho, pero dado que él se había sincerado yo también lo haría. Edward repetí, yo también te quiero, estoy enamorada de ti desde hace un par de años, pero pensé que me verías como una niña, y a demás Tanya siempre estaba rondándote, yo no quiero a Jacob, ni siquiera dejo que me toque, me da asco, el de momento lo respeta porque solo tengo 16, mi padre me obliga a salir con él, pero yo he conseguido que retrase la boda hasta después de la Universidad, a Jacob no le hace gracia pero Emmet les convenció que era muy joven y que era mejor que esperáramos a ser más madura.
Sé que te vas a la Universidad, y a mí me queda un año de instituto pero si tu quieres, y yo quiero, podemos hacerlo juntos.
Edward sonrió de lado a lado, su cara se ilumino y se acerco poco a poco a Bella avisándola de lo que pretendía hacer, y la beso, el beso era tierno y dulce, pero cargado de todo el amor que se tenían y cuando se separaron por la falta de aire ambos sonreían abiertamente sabiéndose correspondidos en sus sentimientos.
Después de unos cuantos besos Edward decidió que era hora de volver, primero para no descontrolarse e ir mas allá, y también porque ambos habían ido con otras personas y no podían desaparecer durante mucho tiempo. Decidieron quedar el sábado en Port Ángeles y hablar ellos dos solos sobre cómo iban a llevar la situación y planear su futuro más inmediato.
Con ese sentimiento de euforia propio del amor correspondido, junto con el de culpabilidad por engañar a sus parejas, aunque no los amaban los dos eran muy respetuosos y habían ido al baile con ellos, se dirigieron al gimnasio de nuevo y justo antes de llegar vieron a una pareja teniendo sexo, no se dieron cuenta que eran Jacob y Tanya hasta que se acercaron un poco más.
Al principio reaccionaron con rabia pero Edward los freno y dijo que no merecía la pena, y pasaron de largo entrando al gimnasio, bailaron mientras sus parejas tenían sexo esperando que volvieran para irse a casa.
Al final la noche resulto muy bien tanto para Edward como para Bella, aunque nadie excepto ellos dos sabia porque. Unos minutos después sus parejas aparecieron por separado y se fueron a sus respectivas casas.
Esa noche tanto Edward como Bella durmieron felices y deseosos de verse al día siguiente.
