Abrió sus ojos al no escuchar ruido en el templo,aseguró que ninguna de las gemas lo observará. Miró su sofá,donde yacía León dormido. Bajó las escaleras hacía su Mascota/Amigo. Lo miró y luego el cuadro...

El cuadro de ella...De su madre.

Tomó aire y de un salto entró a la melena del León. Caminó hacía la pequeña colina donde cosas,de la única e inigualable Rose Cuarzo,permanecían. Steven siempre se preguntaba:

¿Cuánto tiempo llevaban esas cosas ahí?

¿Cómo se conocieron ella y León?

¿Por qué se lo ocultó a las chicas?

Vió la camisa que su madre alguna vez uso. La tomó. Salió del León,ya que al ser un humano necesitaba aire para respirar.

Eran alrededor de las 02:00 A.M.,pero Steven abrió la puerta que daba hacia la playa .Salió sin importar que era de noche,estaba en pijama y hacia un frío que calaba hasta los huesos.

Se colocó la camisa morada encima,tanto por frío como por necesidad de la falta de su madre. La necesitaba.

Necesitaba un abrazo maternal...

Necesitaba sentir el amor de su madre...

Necesitaba decirle cuanto la quería...

Él quería que le cantará...

Él quería que le hablará de las maravillas del mundo y del cosmos...

Él quería que le contará sobre sus batallas...

En pocas palabras...

Necesitaba a su madre...necesitaba a Rose Cuarzo.

Unas lágrimas corrieron por sus mejillas.—Te necesito...—Olió la camiseta de su madre,tenía un hermosos olor a fresas,era dulce.

—Te quiero aunque no te conozca...

Volvió entrar al Templo,no solo por la necesidad de dormir,también por el frío. Se aseguró de que ninguna gema lo hubiera visto y se acostó en su cama.

Cerró sus ojos y soñó...

Al abrir sus ojos,estaban en aquella colina donde yacían flores rosas las cuales le pertenecían a Rose.

—Steven...

¿De quién era esa majestuosa voz?

—Steven

Él mencionado se giró para ver a la persona que mencionaba su nombre...

¿Era verdad?,¿Ella estaría en su sueño?,¿Cómo era posible?

—Mamá...

—Steven...

El mencionado corrió hacia donde su "madre"estaba,saltó a sus brazos y la abrazó.

—Te necesito...

—Oh, Steven. Yo siempre estoy contigo. También te necesito .Eres muy valioso para mí.

—Pero...

—Steven. Yo siempre formaré parte de tí,lo que dijo Perla no tiene por que afectarte. No importa que no me conozcas.

Steven abrió sus ojos llorosos. Si que la necesitaba.

Miró el cuadro de su madre...

–Te quiero, mamá.