Bienvenidos a un mundo de los hijos de Happy Tree Friend. Primero quiero aclarar que esta historia no es 100 por ciento mia (lo escribi porque fanfic me odia) esta historia era de mi hermana Lini (que en paz descanse) siempre quise saber en que terminaba asi que le pedi que me la diera para yp terminarla espero les guste :)

Lo que este entre comillas son "pensamientos" y lo que este en assterisco es *doble personalidad*

HTF no me pertenece ninguno de sus personajes. Pero los hijos de ellos (desde hoy) son de mi propiedad 1313.


Todo comienza con una joven peliverde de ojos color esmeralda en su casa.

- Mamá… repíteme lo que me dijiste – insistía con cara de preocupación.

- Te quedaras viviendo sola en esta casa… – repetía una vez más la madre de la peliverde.

- Pero, pero... ¿me dejaras con mi… hermano? – interrogaba aun preocupada.

- No, él se ira a vivir con su novia – respondía mientras hacia los últimos arreglos para marcharse.

- O sea que la casa será para mi sola… – comentaba viendo el lado bueno de la situación.

- En realidad... – giraba los ojos nerviosa – encontré una persona que quería arrendar una habitación, asique yo le ofrecí el cuarto de tu hermano...

- ¡¿Qué?! – Gritaba exaltada - Me dejaras sola… Viviendo con un tipo desconocido Ó.Ò

- No te preocupes... se llama Luffy y tiene 15 años, como tú, es increíble – comentaba la madre para tranquilizar a su hija – es como el hermano gemelo que nunca tuviste, es idéntico a ti... hasta tiene el pelo largo y…

- Pero… ¿hasta cuándo será esto? – interrumpía la oji-esmeralda.

- Bueno… no se todavía, pero necesito vivir más cerca de mi trabajo – decía tomando sus maletas – el joven llegara a las cinco en punto.

- ¡QUE!... – ya no aguantaba más esta decisión la estaba haciendo enfadar – tan pronto pero si son las tres…

- Si... y quiero que limpies – ordenaba por última vez a su hija – el viene de EEUU, recién llego y quiero que le cocines algo rico... ah, se me olvidaba, la renta se la cobraras tú, son $100.000 por mes, eso servirá para compensarte por dejarte sola.

- ¿Y quién me pagara el colegio?… – preguntaba aun sin entender porque su madre la dejaba sola.

- Yo, te dejare la mensualidad en el banco, tú solo la vas a buscar… - respondia a su inquietud – y por cierto, este niño aportara con la luz y el agua, ya que trabaja de traductor y también le pagan en la práctica.

- Pareciera que lo quieres de hijo… "estoy celosa" – pensaba sin demostrarlo a la vez que cruzaba los brazos.

- Bien hija, me voy… – volteo por última vez para mirar a su pequeña hija – ¿ya te sabes mi numero cierto?

- Si – contestaba de mala manera - ya vete… "no me dejes sola"... yo me se cuidar sola – respondía segura de sí misma.

La madre de la chica se despide y luego se va. Luego de un rato la peliverde de largos cabellos empieza se sienta en el sofá masculinamente a ver la tele mientras comía cereal…

- ¡Ach!... ¿cómo es posible que mi propia madre haga esto?... – gritaba con pequeñas lágrimas en sus ojos.

- *No te preocupes ahora tienes más libertad* - una vocecita hacia su aparición.

- ¿Quién te pidió tu opinión? – interrogaba hablándole al aire.

- *Confía en mí, ahora podrás hacer lo que quieras sin que te castiguen después* - se defendía contra el mal genio de la peli-verde.

- Sabes qué… ahora somos solo tú y yo, y nada nos detendrá – contestaba secándose las lágrimas.

- *Bien dicho nena*

DING DONG (suena el timbre)

- ¿Quién va? – consultaba a la voz en su cabeza.

- *Ve tú, yo no soy real*

- Tuche… está bien, iré a ver quién es – se levanta del sofá con mucha flojera para ver quién era el que molestaba su discusión interpersonal. La muchacha sale al patio para ver quién era, en la entrada había un joven de pelo verde pero corto no como había dicho su madre y ojos color pardo claro.

- ¿Usted es la señora Flaky? – Preguntaba el joven – soy el hijo de su amigo Lifty, el que se fue a

- No, no soy Flaky y no conozco ningún Lifty – respondía de enojada a la vez que se apoyaba en la pared – soy su hija Flappy – mencionaba al fin su nombre – y tú debes ser el miserable gringo que tendrá que vivir aquí.

- Hay, que linda bienvenida – decía de manera sarcástica – me vas a dejar entrar o no.

- Tienes suerte de que ande de buen humor – camina a la entrada y abre la puerta.

- Se nota – comentaba el joven mientras entraba al patio – y… ¿no me darás un recorrido de tu pequeña casa?

- Grrr… "pequeño tu..." – pensaba en voz baja – como tú lo dijiste, no necesitaras un recorrido ya que es pequeña... adentro hay de todo, puedes usar lo que quieras, pero pobre de ti que te comas mi cereal y creo que no es necesario decir que no puedes entrar a mi habitación – musita molesta mientras se dirigía a la salida.

- ¿A dónde vas? ¿Puedo ir contigo?, así aprovecho de conocer una parte de esta ciudad – consultaba de manera cortes para romper el hielo.

- No y que te importa... si la quieres conocer ve solo yo no soy tu niñera – Flappy cierra abruptamente la puerta y se va caminando a la casa de una amiga.

- Mmm… - el joven miraba con el ceño fruncido a la peliverde – ¿dónde estará su cereal? – se preguntaba con el fin de hacerle un daño mínimo por la hermosa bienvenida que le había proporcionado.

Mientras tanto en la casa de la amiga de una amiga de la muchacha, llega sin avisar un chico de cabellos plateados y ojos color miel.

- Hola – saludaba a las dos chicas – ¿de qué están hablando?

- Hola Lummy, estaba contando lo que me hizo mi madre – Narraba su triste historia la pobre Flappy – me abandono con un tipo desconocido en mi casa, es todo lo que odio, peli-verde, ojos claros, femenino y responsable, ¡ah! – gritaba para enfatizar – y para empeorarlo también puntual.

- Amiga, tu – Su amiga de cabellos azules iba a hablar pero Lummy le tapa la boca con sus manos.

- No le digas que también es peli-verde y de ojos claros - le susurro al oído a Shindid a lo que ella asiente con la cabeza.

- Y además tiene pinta de casanovas – adicionaba con un tono burlón – ¡lo odio!

- ¿Y tú mamá no sabe nada de él? – pregunto Lummy.

- No sé – miraba al techo en busca de una respuesta – eso es lo peor de todo, podría ser un pervertido que está en busca de una víctima…

- O quizás sea un asesino en serie y… am… ¿me escuchan? – Mira a las dos chicas que se estaban babeand – ¿Por qué siempre me ignoran? T.T

- Oigan, pero... se podrían ir a quedar a mi casa, porfisss – ponia cara de perrito suplicante para que la acompañaran – no quiero estar sola y si me llegara a pasar algo… T-T

- Esta bien… - decia el peli-blanco – yo no tenía ganas de llegar a mi casa hoy... - decía Lummy.

- Tu papá es Lumpy ¿cierto? -pegunto Flappy.

- Si… - contestaba algo apenado – eso explica mis ojos color miel.

- Ya veo por qué no quieres llegar a casa – comentaba Shindid, a lo que Flappy le causo mucha gracia, Lummy no demostró lo mismo (¬.¬) – ¿y el color de tu pelo es por tu madre? – Pregunto – es que me gusta ese color tan natural ^w^

- Eeh… – este se ponía nervioso y ruborizado – si es de mi mamá – de pronto una diarrea verbal salió sin querer – la que estuvo en el psiquiatra.

- Aaaa esa es Lammy... salió en un reportaje de locos… - comentaba Flappy interesada por el tema.

- Sí, la que se imagina un tal Mr. Pickles ¿verdad? – añadía la peli-azul.

- Pero no la heredaste ¿cierto? – consultaban algo macabras las dos chicas.

- No... Para nada… jeje - respondía con una risita nerviosa - "¿Por qué?… ¿Por qué te apareces detras de ellas Sta. Klepis?" pensaba un poco preocupado.

- Ya vamos a mi casa... tengo cerveza y cigarros... - susurro Flappy con una mirada de malas intenciones.

- ¡Por supuesto que vamos! – comento entusiasmada la oji-azul.

- Pero… ¿no se enojara tu papá Shindid? – musitaba algo preocupado el peli-plateado

- Mientras él no se entere no pasara nada – decía sin importarle las consecuencias – eso es lo malo de tener un superhéroe en casa, quiere que todos sean buenos y cosas por el estilo.

- Ya vamos antes de que oscurezca – interrumpió Flappy – quiero aprovechar cada momento alcoholizándome.

Al llegar a casa de Flappy, esta estaba roja como un tomate, la sangre se le subió a la cabeza de golpe al ver lo que había pasado en su tan preciado hogar.


Bueno espero les haya gustado este proyecto, subiré los capítulos cuando pueda y si no les gusto bueno será no más po, seguiré subiéndolo igual XD, en fin saludos y gracias por leer.