Disclamer: Bleach es de Tite Kubo u.u
Esta historia solo es uno de mis sueños guajiros. XD
-Te Amo Porque Te Odio-
Los rayos del sol comenzaron a traspasar por la blanca cortina, su habitación, la cual no era demasiado pequeña ni demasiado grande, se comenzó a alumbrar con el calor del magnífico astro. Los pájaros cantarines lo anunciaban, ya era una nueva mañana. Se talló los ojos, y comenzó a abrirlos lentamente, miro su reloj: eran solo las 7:30, bastante temprano para ser sábado. Volvió a intentar dormir, pero el sonido del teléfono timbrar lo molesto, opto por no contestar. La contestadora hizo su trabajo y la dulce voz de una chica tuvo presencia en la habitación –
-Eeh...eto… ¡Buenos días Kurosaki-kun! Bue-bueno, espero no despertarte porque es muy temprano, si te despierto lo siento mucho. No, no te disculpes, solo habla – El chico suspiro cuando se escucharon pequeños murmullos que la chica se dirigía para ella misma – Etto…Bueno solo quería comentarte que… que los chicos y yo hemos planeado…ya sabes por las vacaciones y todo eso, ir de vacaciones a el bosque, porque porque suena muy divertido ¿no? Hay cabañas para dormir y todo, jeje en fin…suena divertido y quería saber si te interesa… SITEINTERESABAIRCONNOSOTROS, si quieres ir con nosotros claro…si no tienes ya algunos planes ¡espero que no! ¿ s-si te parece buena la idea?. Bueno, pasaríamos allá tres semanas tal vez, porque despues tendríamos que ver lo de la universidad y todo eso. ¿Qué molesto verdad? Pero para disfrutar las vacaciones suena divertido. Espero que te interese. Ya sabes iríamos todos, Sado-kun, Asano-kun, Tatsuki-chan, Chizuru-san, Ishida-kun, ¡y yo! Jeje bueno, espero tu llamada ¡To-todos queremos que vayas Kurosaki-kun!… cuídate mucho ¡adiós!
Era su imaginación, ¿o ese había sido el mensaje de contestadora más largo de la historia? Volteo a ver la pequeña maquina.
¿Un viaje de vacaciones?
Sonaba problemático. Completamente diferente a las tranquilas vacaciones que esperaba tener antes de la masacre que era la universidad. Los únicos viajes que en verdad conocía eran cuando salía con su familia, peleas por todos lados, burlas, bochornos, disputas, gritos, etc… la mayoría causadas por su extraño padre. No, definitivamente no iría, tendrían –sin mucho sacrificio – ir sin él. Pasaría todas las vacaciones en su casa y ese era un hecho.
Volteo una vez más al reloj, eran las 7:39, seguía siendo demasiado temprano, intento volver a dormir cuando –
-¡Good morning Ichigo!
-¿Qué mier… - El chico no pudo articular algo mas, ya que un enorme pie masculino dio directo en su cara. - ¡Joder! ¿Cuál es tu problema viejo loco? – Le dio un puñetazo en la cara, mandándolo a volar hacia el otro lado de la habitación, sin embargo eso no era suficiente para detener al hombre, quien se levanto.
-¿Ichigo? – Sus ojos comenzaron a lagrimear. - ¡Soy tu padre! - Saco un pañuelo beige de su bolsillo y busco otra cosa más dentro de el. - ¡Masaki! ¡Tu hijo es un insensible! ¿¡Como puede tratar a su padre de esta manera!? – El viejo le hablaba a una pequeña foto, con el rostro de una mujer, que había sacado de su bolsillo.
-¿Qué mierda? – El chico miro a su padre. - ¡Joder! ¡Estás loco! – Su ceño completamente fruncido, se había arruinado su primera "tranquila" mañana de vacaciones. Con todo eso de la mudanza, aun no se podían llamar vacaciones.
-¡Oh Masaki! – No presto mínima atención a su hijo, seguía ocupado chillando. - ¡Que horrible desgracia venir a visitar a nuestro hijo… - Chillo aun mas, mientras veía la fotografía. - … y no encontrar ninguna mujer a su lado! – El chico golpeo una vez más a su padre, esta vez dejándolo completamente desmayado y con la fotografía en la mano.
-¡Ichi-nii! Haz dejado a papá muy herido – La pequeña castaña se acerco al hombre que yacía tirado en el suelo.
-Bien hecho. – Dijo una pequeña pelinegra. – Ya me había hartado. Todo el viaje hablando sobre las vacaciones y las mujeres con las que debías estar en ese momento.
-¡Ah! – Ichigo estaba demasiado molesto como para contestar. – Pero… ¿Qué carajos hacen ustedes aquí? – El chico estaba a punto de explotar.
- ¡Que vocabulario! – Hablo la pelinegra, mientras volteaba a ver a su "melliza" curar la herida de su padre, volteo hacia el chico y se abalanzo hacia su cabeza. – ¡Veníamos a ver si tu pelo ya era normal….pero veo que no! ¡Sigue siendo igual que una zanahoria!
Una vena comenzó a palpitar en su sien. – Bueno, ya lo comprobaron… ¡CONOCEN LA PUTA SALIDA!
-¡Masaki! ¡Nuestro hijo nos odia! – Así es, el viejo ya había despertado. - ¿Qué hice mal? ¡Perdóname Masaki! ¡Su actitud grosera hacia su familia, sin mencionar su…su falta de masculinidad!
-¡Cállate idiota! – Volvió a estampar su puño contra su padre. - ¿¡Por qué no te callas de una puta vez!?
-¿Por qué callarme? ¡Si soy el más decepcionado de todos! ¡Mi hijo es gay!
-¡Carajo! ¡Ya cállate viejo, no soy gay! – Volvió a golpearlo. ¿Qué acaso su padre nunca se rendía?
-Entonces… ¿Dónde está mi nuera? ¿Dónde están mis nietos?
-¡TENGO 19 AÑOS! - Seguía golpeándolo, ¿Dónde estaba su maldito botón de apagado?
-¡Por favor Ichigo! ¡Esa no es una excusa! Tu madre y yo, a tu edad…
-¡No quiero escuchar eso! – Se puso colorado. - ¿Qué coños hacen aquí?
-Ahh… ¡Si, eso! – Dijo su padre. – ¿Recuerdas que son vacaciones?
El chico asintió, mientras esperaba lo peor. – No se piensan queda…
-¡NOS QUEDAREMOS CONTIGO ESTAS VACACIONES! – Gritaron la castaña y el viejo, mientras la pelinegra se lamentaba en silencio. Aunque muy en el fondo estaba feliz, podría molestar a su hermano por un rato.
-Pero…pero – Tenia que formular algo rápidamente. –
-Nos quedaremos aquí, tu hermana Yuzu quería venir, ya que en Karakura no hay tantas actividades… ¡Y prometí las vacaciones pasadas que se divertiría en estas!
-¿Tu percepción de vacaciones divertidas es venir a molestarme?
-¡No seas grosero Ichigo! ¡Somos familia! Y si, un poco. – Dijo su padre rascándose la nuca. – ¡Desde que mudaste todo ha sido tan solitario!
-Así es Ichi-nii, ¡Ya no se escuchan ruidos ni golpes! – Hablo la pelinegra con burla.
-Me fui hace 5 días. – Cinco días que había disfrutado TANTO.
-Bueno, en fin. Nos quedaremos aquí. – Hablo su padre.
-Pero… - Tenia que inventarse algo en serio.
-¿Pero qué? – Lo miro su hermana Karin.
-Pero ya ten-tenía planes. - ¿Cuáles planes? ¿Despertar a las 11:00 am? ¿Leer 300 libros? –
-¿Qué planes? – Pregunto su familia al unísono.
-Bueno yo… iré con unos amigos al bosque, como vacaciones…rentaron cabañas y todo. – De ir a un viaje con sus amigos, a estar con su familia…MIL VECES EL VIAJE.
-¿Habrán chicas sexys? – La mirada de su padre se volvió lujuriosa y deseosa de saber la respuesta a su pregunta.
-¡Ya cállate! – Esta vez fue la pelinegra quien golpeo al viejo.
-Lamento arruinar sus planes… - Ahora solo tenía que esperar a que ellos se largaran y no regresaran nunca más, no tenía que ir necesariamente al viaje, solo debía cerrar bien su apartamento.
-No hay problema Ichigo…ve – Le miro de una manera extraña. - …diviértete.
Le miro con el ceño fruncido. – Supongo que buscaran un hotel. -
-Jaja ¡No gastare dinero si hay un apartamento! No te preocupes, lo cuidaremos en tu ausencia. – Se dirigió a la puerta y se fue, dando por terminada la plática.
-En seguida preparo un delicioso desayuno Ichi-nii. – La castaña salió de la habitación, seguida por su hermana.
-Carajo – El pelinaranja mascullo entre dientes mientras tomaba su teléfono y marcaba el número.
-¿Moshi moshi?
-Ohayo Inoue, reci…
-¡Ohayo Kurosaki-kun! ¿Recibiste mi mensaje? ¿Quieres ir? Porque me – Paro un momento – nos enca-encantaria que fueras. Jeje
El pelinaranja dejo salir un suspiro y rodo los ojos. – Claro Inoue, suena…divertido.
-¿En serio? ¡ESO ES ASOMBROSO! En realidad pensé que no querrías ir. Pero bu-bueno, los chicos acordamos irnos mañana temprano, ¿está bien? Sería como a las diez de la mañana… ¿O más temprano? ¿O tarde? Como quieras jeje… Nos veríamos en casa de Ishida-kun.
-Ehh, está bien la hora. Bueno adiós… - Estaba a punto de colgar.
-¡Kurosaki-kun! – La chica le hablo.
-¿Si? – Suspiro una vez más.
-Gra-gracias por querer ir. – La chica se escuchaba nerviosa.
-¿Por qué lo agradeces?
-Eto…Jeje adiós.
-Aja adiós.
Carajo, ¿Cuándo Inoue dejaría de comportarse así? A veces simplemente no la entendía… muchas veces le habían comentado que ella quería algo más que amistad con él, pero lo tomo como un estúpido rumor. Lo más extraño era que despues de años que la conocía y sabia la fascinación que tenia por ser chef, le dijo algo completamente diferente ese día.
.-.-.-.-.-.-.-.-Flash back-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
-¡Kurosaki- Kun! ¡Ohayo! – La chica corría en su dirección, con su maletín en la mano.
Ichigo opto por esperarla. – Ohayo Inoue.
-¡Ohayo Kurosaki-kun! ¿Cómo amaneciste hoy? Jeje.
-Muy bien gracias. – Siguieron caminando.
-Pff…me canse bastante jeje. – Se puso roja al voltear a verle. – Oye Kurosaki-kun, me preguntaba. Bue-bueno quiero decir, por curi-curiosidad… ¿A qué universidad iras?
-¿Eh? Bueno, fui aceptado en Tōdai*. En la facultad de medicina… ¿Por qué?
-¿¡En serio!? – La chica hablo bastante extraño y actuando muy nerviosa. - ¡Parece que te veré por allí! –Le sonrió nerviosa.
-¿Entraste? – Su cara demostraba que estaba sorprendido, no creía que la chica era estúpida, pero en realidad él pensaba que ella optaría por gastronomía. No cocinaba muy bien, bueno a decir verdad, más que comida, eran experimentos raros los que ella realizaba.
-¡Sí! Me costó mucho trabajo… - Le miro con cara agotada. -… ¡pero lo logre! ¡Y también estoy en medicina! – Agacho la mirada sonrojada y murmuro. - Pa-parece que el des-destino nos quiere jun-juntos.
El chico la miro por un momento, extrañado por su actitud e ignorando lo que acababa de decir. – Pero pensé que querías estudiar gastrono…
-Bue-bueno Kurosaki-kun – Dijo nerviosa. – Me voy, adiós. – Comenzó a correr por los pasillos de la escuela, chocando con uno que otro compañero y puerta adornada con anuncios del baile de graduación.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-Fin Del Flash Back-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Bueno, tal vez esos rumores estaban en lo cierto... no, o simplemente ella había cambiado de idea. Era posible ¿Cierto?
-¡Ichi-nii! ¡A desayunar!
-Hai, hai ya voy.
Se dio una ducha rápida y se vistió, una simple playera negra y unos pantalones. Despues bajo a donde su familia ya había comenzado con el desayuno. Se sentó y comenzó a comer. Pero pronto al pelinaranja le surgió una duda –
-¿Cómo mierdas entraron? – Dirigió la mirada a su padre.
-¿Crees que te daría un apartamento…sin siquiera tener una llave de este?
-Pero papá, ni siquiera usaste la llave, la olvidaste… - Hablo la castaña, pero despues se tapo la boca al ver lo que estaba a punto de decir.
-Entonces ¿Cómo entraron?
-Ichi-nii ¡Tienes el apartamento muy limpio! – Interrumpió Karin para evitar el enojo que sentiría su hermano al saber cómo ingresaron.
-Claro que sí, no vayan a arruinarlo mientras no estoy.
-Claro que no Ichi-nii, ¡Yo nunca haría eso!
-No eres tú la que me preocupa, Yuzu. – Volteo a ver a su padre con el ceño fruncido.
-¿A qué te refieres hijo? – Con total indiferencia.
-¡Me refiero a ti loco! ¡No quiero que hagas desorden!
-¡Claro que no! ¿Me crees capaz de algo así?
-La última vez que fuiste a un hotel… - le vio con desgano. - …TE ENCONTRARON en un sillón, en el casino, con un sombrero de bombero y sin playera.
-¡Ahh! ¡Pero eso fue diferente! ¡Fui con Urahara-san! ¡El sí que sabe parrandear!
-Se suponía que iban por negocios.
-Exacto. – Le miro completamente feliz. – Nota la palabra clave…"SE SUPONIA" Además, ahora vengo con tus hermanas.
-Como sea. – Dejo su plato en la cocina, despues de lavarlo, antes dándole las gracias a su hermana. Se dirigió a la sala para ver un poco de televisión.
-Más vale que no hagas algo estúpido. – Hablo la pelinegra. – Ichigo habla en serio.
-¡Masaki! ¡Tus hijos me molestan!
-¡¿QUE MIERDA?! – Se escucho un grito desde la entrada del apartamento. - ¡¿Tiraron mi puerta?! – El chico estaba que echaba humos.
-¿Cómo querías que entráramos?
-¡PARA ESO ESTA EL PUTO TIMBRE! ¡DESTRUYERON MI PUERTA!
-Esos son solo pequeños detalles Ichigo. – Pronto el chico golpeo a su padre mandándolo hacia la pared.
-¡Carajo! – El chico subió a su habitación, esperaba con ansias el día de mañana.
Caminaba por los largos y limpios pasillos del hermoso edificio que llamaba hogar, todos vacios, solo sus pasos era lo que se podía llegar a escuchar y el ligero canto de algún pájaro que vivía en los arboles de su jardín. Paro en una gran puerta, era el momento, no podía ser tan difícil pedirle algo a su propio hermano.
Toco tres veces la gran puerta de madera que estaba frente a ella. -Nii-sama ¿Puedo pasar? – Se escuchaba nerviosa, pero no debía estarlo, ella era una Kuchiki y no podía estar nerviosa frente a la cabeza de dicha familia. Esperaba que Nii-sama escuchara razones y supiera que, como cualquier joven normal, debía salir y no solo estar atrapada. ¡Son vacaciones! Es decir, pronto comenzaría la horrible universidad y allí debía de dar el cien por cierto, necesitaba vacaciones que no relacionaran el estar en casa y ser – de vez en cuando – visitada por sus amigos.
-Adelante, Rukia. – El hombre estaba sentado en su escritorio, con un montón de papeles a su lado, aunque bien organizados. ¿Cómo podía trabajar tanto? Bueno, ser dueño de una de las cadenas de más grandes de todo Japón era bastante, pero podía tomarse un descanso ¿no? – Que se te ofrece. –
-Nii-sama, solo venia a pedirte algo. – El pelinegro asintió, mientras su mirada seguía dirigida a los papeles que estaba revisando. La chica continúo.
-Bueno, quisiera pedirte permiso para que yo y unos amigos, visitemos la casa de campo en el bosque, por motivo de vacaciones.
El silencio inundo la blanca habitación, mientras la chica esperaba su respuesta.
- Tres semanas – Por fin el pelinegro hablo, sin voltear a ver a la chica.
-Arigato Nii-sama – Tres semanas, estaba bien. Tal vez regresaría antes.
-Avisare a los que cuidan la casa de campo, para que preparen todo para su llegada. – Volteo a ve a la pelinegra. – Puedes retirarte.
-Hai Nii-sama. – Se levanto de su asiento y se dirigió a la puerta, despues de ello la abrió y se retiro.
Comenzó a caminar, una vez más, por los aun desolados pasillos. Una vez que estaba lo suficientemente lejos, como para que Byakuya le escuchara grito de alegría.
-¡Sí! – No esperaba el momento en el que llegara allá. Su celular comenzó a timbrar, tomo el pequeño aparato y pulso el botón verde, contesto
-¿Moshi moshi?
-¡Rukia! ¡Hola! Estamos todos los chicos aquí en la casa de Momo-chan ¿Por qué no pides permiso al amargadito de tu hermano para que vengas? ¡Estamos divirtiéndonos de lo grande!
La pelinegra dejo salir una pequeña risa. – Lo siento Rangiku-san pero acabo de pedir permiso a Nii-sama para ir a la casa de campo… ¡Y me dijo que si! Así que no podre pedir permiso para otra cosa.
-¿En serio? ¡Chicos el amargadito dijo que si! ¡Nos vamos de vacaciones! ¡¿Ahh?! Si, si ahorita. – La chica hizo una pausa. – El cabeza de piña quiere hablar contigo, te lo paso.
-De acuerdo, avísales a todos.
-¡No soy cabeza de piña! – Hizo una pausa. - ¡Rukia! Entonces si te dieron permiso, ¡eso es genial!
-Así es Renji, me dio permiso. – Abrió la puerta de su recamara y se acostó en su cama. –mañana y me dio permiso por tres semanas.
-¿Solo tres semanas? ¡Pero si tenemos muchas vacaciones! – El chico suspiro desecho.
-Corrección, ustedes tienen muchas vacaciones. Recuerda que Momo-chan y yo tenemos menos.
-Jajaja cierto. – Se escucharon gritos por parte del otro lado del auricular. – Bueno tengo que colgar Rukia, nos vemos. Adiós.
-Sí, adiós.
La chica colgó y dejo al lado de su cama el pequeño aparato. Unas vacaciones, justo lo que necesitaba, esperaba con ansias el día en el que se iría.
*Tōdai: Universidad de Tokio.
Bueno, una pequeña introduccion. Acepto tomatazos o felicitaciones xD segun sea su opinion al respecto ^^
Estoy un poco nerviosa... ¬¬ De acuerdo me muero de los nervios, esta es mi primera fic. Jajaja diganme si solo sirvo para leerlas y dar opiniones u.u
sayonara.
