Este fic participa en el reto #57 'Bastardía' del Foro 'Alas Negras, Palabras Negras'.

Y no, no soy George R.R. Martin, solamente juego con sus personajes.


Orys Baratheon
Señor Supremo de las Tierras de la Tormenta


El dolor era lo que más recordaba de aquel bastardo de Lord Wyl. Ni su rostro ni su voz. Sólo el dolor físico del acero al cercenar su muñeca, y después el de la pérdida. Le hizo sentirse incompleto desde entonces. Le convirtió en un tullido de por vida.

Él lo había tenido todo. Y ese dorniense le arrebató la mano de la espada.

Pero había conseguido cobrarse la deuda.

Le cortó la mano al hijo de su eterno enemigo como rembolso. La otra mano y los pies se los cortó en concepto de usura.

Ahora el Señor de la Tormenta moría en el camino de vuelta, entre dunas y con las heridas de la guerra aún sangrando. Pero regresar a aquella tierra maldita y llameante había valido la pena.

Orys partió del mundo contemplando los miembros amputados que colgaban del techo de su tienda, con una sonrisa en los labios.