Naruto y sus personajes son obra de Masashi Kishimoto. Lo único que me pertenece es la idea y la historia, las cuales hago sin ánimo de lucro, con el fin de entretenerme y entretener a quien quiera leerla.


Nota de la autora: Bueno, éste fic se me ocurrió no sé cómo y no sé cuando ¡Pero se me ocurrió! Y aquí dejo todo lo que ha venido a mi mente. Espero no perturbar a nadie jajaja. La verdad es que empecé a hacer este fic porque me he fijado que no hay muchos fics actuales donde se concentren todas las parejas; y yo siendo una fanática de la lectura erótica, pues qué mejor que hacer esta serie de cortos sobre la vida sexual de todas y cada una de las parejas canon de Naruto.

¡Sin más, espero que sea de vuestro agrado!

Recordad que iré actualizando sin fecha fija, así que si seguís la historia podréis recibir alertas de las actualizaciones. (De paso me hacéis feliz)

Que disfrutéis de mis locuras.

PostData: ¡Gracias Rukiamk por ayudarme con el título! xD


Icha Icha Canon

Prólogo

Cuando se acaban las ideas.

POV General.

Yacía sentado en su silla con las piernas cruzadas, uno de sus codos apoyado sobre la mesa que tenía enfrente le hacía ver pensativo, mientras su mano tecleaba palabras sin sentido, aporreando los botones del ordenador portátil. ¿Cómo había llegado a ésto? Se revolvió el cabello con frustración. Tenía que entregar el siguiente libro Icha Icha el próximo mes y no tenía ni si quiera un título. Llevaba tres meses intentando recopilar ideas... Pero ninguna le acababa gustando y siempre borraba todo lo que tenía escrito.

—Kakashi, ésto no es propio de ti.— Un largo suspiro salió de sus pulmones.

Resignado, se levantó para ir a la cocina a comer algo; no tenía hambre pero el estrés del momento sólo le hacía querer llevarse algo a la boca, aunque fuera un poco de helado.

Se sentó en el sofá de la sala de estar y encendió la televisión. Tomó una buena cucharada de helado de vainilla y volvió a suspirar. Eran cerca de las cinco de la madrugada, ni si quiera él sabía qué hacía viendo la televisión a éstas horas, sólo hacían porno y teletienda y tenía comprobado de antemano que el porno ya ni le excitaba porque sabía que no le aportaría absolutamente nada a sus ideas, su cabeza estaba vacía.

Después de media tarrina de helado y zapping entre tres o cuatro canales con vídeos para adultos, un anuncio de la teletienda llamó su atención.

Agarró el mando a distancia para darle algo de volumen.

—¿Webcams?— Se incorporó en el sofá y por primera vez en mucho tiempo prestó atención a lo que anunciaban.

Un artefacto pequeño era capaz de grabar vídeos y con un utensilio aún más pequeño que conectabas al ordenador, podías ver lo que estaba sucediendo a tiempo real. De pronto, se le encendió una bombilla en su apagado cerebro ¿Y si espiaba a parejas reales? Sería una perfecta ayuda para su libro, y no lo hacía porque fuera un pervertido, sólo porque quería inspiración, y no hay nada mejor que algo natural, sin saber que son observados... Sí, eso sería lo mejor.

Se levantó del sofá tropezándose con sus propias zapatillas y cayó de rodillas ante el televisor. El precio de ese utensilio era excesivamente caro... Pero tenía que comprarlo, le sería realmente útil, lo sabía.

A la mañana siguiente, el timbre de su puerta despertó al ninja-copia, miró el reloj perezosamente; las nueve y media de la mañana ¿Quién en su sano juicio...?

—¡El paquete!— Se levantó de la cama rápidamente, bajó las escaleras y al abrir la puerta ahí estaba.

Un repartidor de correo urgente yacía de pie, con unos papeles en la mano y el paquete en el suelo.

—Firme aquí, y aquí.— Sin mucha gana de hacer su trabajo, el repartidor le entregó un bolígrafo y un pequeño cartón para que pudiera apoyarse al firmar.

—Gracias, ten un buen día.— Kakashi se despidió con una sonrisa -tapada por su máscara- y agarró el paquete del suelo.

Entró en casa y se dirigió de nuevo a su habitación.

Enchufó el portátil y siguió todas las instrucciones para poder instalar el USB en el ordenador; luego encendió la webcam y una pequeña ventana se abrió en el ordenador

—Así que no era un timo...— Se dijo a sí mismo.

Con los ojos abiertos como platos, Kakashi hacía movimientos extraños y difíciles para comprobar que ese artilugio funcionaba. Rió para si mismo y pegó un bote de alegría.

—¡Esto es el mejor invento de la historia!— No paraba de saltar y mover los brazos, no cabía en sí de su asombro.

Espiar la intimidad de otras personas no estaba bien, pero debía terminar su libro en menos de un mes porque sino los editores le crujirían vivo, y a parte necesitaba el dinero.

Miró el reloj de su mesa de noche, eran las once y cuarto de la mañana; volvió a mirar la webcam. Se sentó en la cama y pensó con detenimiento quiénes serían sus primeras víctimas; y qué mejor que estrenar sus artilugios con sus propios pupilos.

—Bueno, Sasuke se fue de la villa durante bastante tiempo y acaba de volver, aunque sea por unos días...— Pensó para sí mismo. —Un hombre que ha estado lejos de su mujer tanto tiempo, sería un buen primer capítulo para mi libro.— Se colocó una mano en su mentón y sonrió. —Bien, espero que no les importe a los Uchiha que vaya a hacerles una visita rápida.— Rió para sí mismo.

Se vistió y guardó cuidadosamente la webcam en su bolsillo para que no se notara.

El sonido de un timbre resonó en toda la residencia Uchiha.

—¡Kakashi-sensei!— Una mujer con el cabello rosado abrió la puerta sonriente.

—Hola Sakura, venía... de visita.— El peli-blanco torció sus labios en una media sonrisa.

—¡Por supuesto, entra!— Dijo entusiasmada.

Kakashi se metió una mano en el bolsillo y agarró fuertemente la cámara.


Sé que no es mucho, pero éste es el prólogo. Luego vendrán todos los lemmons xD. Y no sé si lo estáis esperando más vosotros o yo, porque adoro cuando escribo y recibo comentarios, ayuda mucho a seguir adelante y no dejar una historia a la mitad.

Con éste proyecto quiero hacer un capítulo para cada pareja, donde Kakashi recopila ideas para hacer su nuevo libro Icha Icha, ya sabéis, las novelas eróticas que comenzó Jiraya -joderquelloroporquémurió-.

Sin más, espero que os haya gustado.

¡Próximo capítulo: Lemmon SasuSaku!