Hola pues este es mi primer fic, hace un tiempo lo publique, con otra cuenta, pero he decidido retomarlo.

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PROLOGO

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En los tiempos antiguos, tiempos del Milenio de plata. Existió un poderoso imperio, conocido como el Reino Solar. El reino Solar se encargaba de los asuntos políticos, fuera del sistema solar. Mientras la Luna procuraba la paz dentro del mismo.

Entre el Sol y Mercurio, había un pequeño conjunto de asteroides; Solaría. Solaría era la sede del reino Solar.

El gobernador de Solaría, era un hombre alto y de musculatura marcada, de lacios y cortos cabellos, de un rubio dorado, la barba corta y los ojos dorados, contrataban con el cobrizo de su piel, y lo hacían poseedor de una atractiva apariencia propia de los descendientes del linaje solar; era el rey Apolo.

A su lado gobernada la reina Andrómaca. Era joven, una muchacha de rostro pálido, rasgos finos. Tenía una larga cabellera, de un tono rojizo, como el fuego. la cual se recogía altamente en una cola de caballo, muy por encima de la nuca. Sus ojos azules brillaban con una expresión cálida y llena de bondad, grabada en su rostro. Ella había sido princesa de un lejano planeta, antes de convertirse en reina del Sol.

Ellos tenía un hijo, el único, su primogénito. El príncipe Febo. Un pequeño niño de cinco años, idéntico a su padre, de cabello dorado y ojos celestes como los de su madre.

El príncipe tenía como guardianes a cuatro guerreros, cuatro jóvenes aprendices. Que eran entrenados por los actuales guardianes del rey.

Todo era paz y tranquilidad, ambos reinos se encargaban de gobernar sabiamente dentro y fuera del sistema solar. Pero algo ensombreció aquella felicidad. El sacerdote del reino solar, Zoser, vio en sus premoniciones la destrucción de reino solar. No por alguna guerra ni por algún enemigo simplemente porque así tenía que ser, la vida del astro solar llegaba su límite y debía renacer, pero eso significaba la destrucción del pueblo solar, que era el centro de vida más cercano a ellos. Sin embargo, fue muy tarde para dar alguna alarma, o advertencia.

El poderoso Titán planetario, libero todo su poder destruyendo Solaría, y acabando así con el pueblo y el linaje solar.

O si habría sido, de no ser por que el pequeño príncipe, se encontraba, el Milenio de Plata.

Quedando como único sobreviviente, y guardián de un antiguo y poderoso linaje.


AÑOS DESPUES.

El príncipe Febo vivía feliz con sus tíos en el reino lunar. El rey Lander, hermano menor del Rey Apolo, se había hecho cargo de el, de entrenarlo y guiarlo por un camino espiritual. Para el completo control de su poder.

Pero en esos tiempos de paz, el sistema solar recibió un poderoso ataque por parte de la fuerza más oscura del universo un ente llamado

Thanos, un ser tan perverso y vacío, como no había otro en el cosmos.

—Serenity, sabemos lo que el busca—Hablo el rey de Luna, sus ojos dorados brillaron llenos de rabia—Debo detenerlo.

—Pero...—La Reyna lo miraba llena de angustia—No se que haría si te perdiera.

—Desde que Apolo, no esta es mi deber encargarme de todo esto. Además no quiero alarmar a los demás reinos, este maldito ser ha decidido solo comunicarse con nosotros—Dudo un segundo antes de continuar—Lo quiere a el, solo te pido algo pase lo que pase no dejes que el abandone la Luna, no dejes que Febo se entere de todo esto—La miro y se acerco para besarla, a ella y a su pequeña hija que dormía en sus brazos.

—Recuerda que te amo Lander y que te estaremos esperando.

El rey Lander junto con algunos guerreros lunares viajo los confines del sistema solar cerca del planeta Plutón. Se libro una batalla donde el rey estaba perdiendo.

Pero, si que el lo esperada, de la nada apareció el joven príncipe del Sol, acompañado de sus guardianes y de Orión, su consejero.

—Que haces aquí Febo debes irte de inmediato.

—No, no lo hare—Miro a su tío, sus ojos brillaban con determinación—No te dejare solo, además es a mi a quien busca, esta también es mi batalla.

La batalla se equilibro y en cierto momento parecía que los guerreros de la luna ganarían. Los guerreros oscuros fueron cayendo por montones.

Pero aquel ente del vacío, hizo estallar todo su poder, formado un gran núcleo de energía oscura, matando en el acto al rey Lander, a los soldados que aun estaban en pie, a los 4 guardianes, y a Orión, dejando solo con vida, a un malherido a Febo.

Febo vio que todo estaba perdido. Sintió dentro de si algo. Un fuego que lo recorría por completo, un poder que se urgía por salir, por explotar.

—SAGRADO CRISTAL INFINITO, DAME EL PODER PARA ELIMINAR LA OSCURIDAD Y POTREGER ESTA GALAXIA—En su frente brillo dorado el símbolo solar—¡EXTINCION SOLAR!

Una gran explosión lleno el lugar, y el sistema solar se vio iluminado completamente. En aquel espacio vacío Solo quedo el cuerpo inerte del ultimo hijo del Sol, extinguiéndose como polvo de estrellas.


EN LA LUNA.

Mientras abrazaba su pequeña hija , la reina Serenity veía a lo lejos un resplandor, sabía lo que significaba, un dolor en su pecho y la lagrima que corría por su mejilla se lo decían.

La profecía se había cumplido la raza solar se extinguía por completo. Los últimos dos apolónitas habían muerto.


Bueno pues este es el prologo de mi historia, tengo una y mil ideas de cómo seguirá.

Aureo-Chan