Si piensas que los personajes son mios... pues gracias me alagas, pero no -.- son de stephenie Meyer (si lo se, yo tambien la odio para hacerme soñar con Edward todas las noches sin poder conseguir uno) Sin embargo la trama es todita mia, no me la quites porfas!


capitulo 1: las reglas siempre cambian.

Todos cometemos errores. Aun si no queremos.

Esas palabras se vivían repitiendo en el diario de Edward

Pov Edward

10 de octubre.

Diario:

Siempre te he dicho que se siente gay escribir en ti y hablarte como si fueras un jodido psicólogo, sobretodo porque solo eres un pedazo de papel. Tuve ese jodido sueño otra vez. Mierda, que no puedo dejar de soñarlo y ya. Me está convirtiendo en un psicópata. No, la verdad es que ya era psicópata de antes, lo admito pero ahora… ¿Qué es lo que le sigue a psicópata?...

En fin, me estoy convirtiendo en algo más que un psicópata. Emmett me está pegando más seguido por eso, así que al final del día termino con algún que otro cardenal. Gracias a eso estoy empezando a odiar a Emmett. ¿Qué mierda le vio Esme para adoptarlo?... bueno además de su jodida generosidad, su ingenuidad, su bondad, su graciosidad (¿existe siquiera esta palabra?), y todas las cosas que terminen con "dad" y dejare de decir las cosas buenas que tiene porque me parece extremadamente gay.

Alice no me dirige la palabra desde hace dos semanas. DOS JODIDAS SEMANAS! ¿Qué le pasa? Yo no le hice nada a ella… ni a ella ni a nadie. Siempre que le pregunto qué mierda le pasa me responde "¿y a ti que te importa imbécil?" No lo sé, podría ser algo que le hice y le molesto pero ¿Qué mierda le hice? yo sé que no soy el mejor hermano que se puede tener, ni tampoco el mejor hijo, ni el mejor amigo. Sé que cometí muchos errores… aun los cometo pero todos cometemos errores, aun si no queremos. Con ella es con la que menos me peleo y ahora viene a enojarse conmigo así porque si… sabes que Alice… te puedes ir a la mierda tú también al igual que Emmett y su maniática sonrisa.

Me olvide de decirte… ya nos instalamos en la nueva casa. La casa tiene su cosa. Si me entiendes, es bonita con un gran jardín y está alejada del pueblo… por suerte. Esme se la pasó todo el día llamándonos a Emmett y a mí para que la ayudemos a colocar los muebles. no fue gran cosa, la verdad es que Emmett hacia la mayoría de las cosas, yo la ayudaba a colocar los tornillos para los cuadros o una que otra cosa con los porta retratos.

Me voy, Esme quiere que hable con ella.

Edward.

Baje las escaleras tardando cinco segundos en cada escalón. Era una torpe manera de no tener que enfrentar la conversación que tenia para darme Esme. Esta vez podría ser por el mal comportamiento, para advertirme que no intente hacer nada malo o simplemente para lamentar tener que reprocharme seguidamente. No era su culpa, yo me portaba mal era simplemente eso.

Las escaleras de la casa eran de un color beige y de madera. Diferentes a las de Seattle las cuales eran de vidrio. Toda mi nueva casa tenía esa tonalidad de colores, beige, blanco y color crema. A mí me daba igual, podía ser hasta color amarillo patito y a mi seguiría sin importarme pero a Alice y a Esme no les daba igual, querían que todo esté a la perfección, cada almohadón en su lugar, ni más ni menos centímetros. Es jodidamente más psicópata que yo. Bah… probablemente este exagerando. Busque a Esme en la cocina pero no la encontré allí. Aun me costaba identificarme con las cosas de la nueva casa. Me quedaba más de un segundo mirando los lugares como si jamás los hubiera visto. Por primera vez le pude echar un verdadero vistazo a la cocina, nada mal, aun con ese tono rustico que Esme había querido probar.

Así que, en la cocina no estaba. Entonces tendría que estar en el escritorio. Camine con pasos indecisos hacia allí.

-Siéntate Edward, tengo que hablar contigo- dijo Esme con esa voz de "esto se está poniendo serio" Esme solo me ponía esa voz a mí. Jamás se la vi usándola con Alice ni menos con Emmett… pffs…después me decían que no hacían diferencia.

Me senté en el sillón de cuero color marrón oscuro de una forma muy cómoda para ser un sillón y para estar delante de una mujer seria. Pero fuera o no fuera una mujer seria Esme era mi madre… si, lo era porque aunque yo fuese adoptado… creo que ella me quería… no lo sé creo que sí.

-¿qué pasa Esme?- pregunté ansioso. Su silencio me acuchillaba y su mirada ni hablar.

-¿Te gusta como ha quedado la casa?- preguntó tranquilamente mientras agarraba de la mesa de café su tasa. Yo la mire confundido… que mierda? ¿Qué si me gustaba la casa?

Pues esta buena, tiene su espacio, me gusta más aquí que en NY o Seattle.

Cállate imbécil.

-huh… si, tiene decoración muy rustica. Prefiero esta que la anterior- respondí encogiéndome de hombros. Esme no me quito sus ojos color verde de encima.

Solía pensar que Esme era un ángel… no, de veras que lo pensaba. O sea ¿Quién no pensaría eso? Una hermosa mujer vestida con un vestido blanco te saca de un asqueroso e inmundo orfanato para poder adoptarte.

Recuerdo bien ese día. A veces lo sueño. Esme vestía de blanco, era un vestido y yo simplemente la miraba. Pensé que alucinaba… pero yo lo dije, cometemos errores, para mí su mayor error fue subestimarme. Pensar que yo podría ser un hijo perfecto para ella. Esme no me odia y yo odio que no me odie porque… mierda… no lo se. nadie me detesta por comportarme como me comporto, nadie piensa en devolverme a un orfanato o en echarme de casa.

-Me alegro que te agrade aquí Edward, después de todo, lo compramos pensando en el bien de ustedes- recompuso la conversación y yo me desperté de mis pensamientos íntimos para mirarla.

-si… bueno…huh…¿eso es todo?- pregunté confundido. Ella negó. Por cierto momento pensé que me dejaría ir igualmente pero su gesto serio no cambio para nada y eso me incomodaba.

-Hay algo más de lo que quisiera hablarte- bueno…claro, era de esperárselo.

-aha?

-Edward, yo se que estos últimos años han sido difíciles para ti- más difíciles de lo que crees- no sé cómo decirte esto…- no cerró sus labios estaba como paralizada. ¿Qué diablos me quería decir?

-Esme solo dilo ¿si?- ella se quedo callada unos segundos mirándome curiosa. debería ser por mi ansiedad.

-quería decirte que con Carlisle estuvimos hablando. La gente de aquí no es como la de Seattle o Nueva York, ellos son buena gente Edward, los chicos del instituto…bueno, puede que ellos tengan sus actos de rebeldía cotidiana pero son buenos. No me malinterpretes Edward, no es que piense que les harás algo, yo se que nunca fuiste una mala persona… solo algo… rebelde- me quedé mudo. Rebelde… esa palabra era tan rara. ¿yo rebelde? es decir, todo lo que había dicho Esme era verdad pero no quería causar ningún revuelto aquí ¿valía la pena? Ella misma lo había dicho "son gente buena" es decir, gente aburrida.

-continua… como que no termina aquí ¿verdad?- me aseguré. Esme por primera vez en este momento incomodo me brindo una tierna y materna media sonrisa que me lleno de esperanzas… ella si me puede querer…¿Por qué no habría de?

Pregunta idiota, todos saben por qué.

Muy cierto

-entonces te quería pedir un gran favor… no hagas nada, nada… inapropiado- meditó un segundo sus mismas palabras, apuesto a que meditado no fue lo que quiso decir- ¿sí?... Edward, queremos comenzar de nuevo, sin problemas, ni suspensiones, ni expulsiones… ni reformatorio. Nada por el estilo, tu comprendes. Yo ya hable con Claire y Roger, sus hijos dicen que el instituto está muy lindo. No es tan grande como la secundaria de Nueva York pero les va a agradar… solo hazme el favor. No lo sé, socializa de buena manera, haz amigos de verdad, puedes traerlos a casa si quieres, siempre y cuando mantengas tus notas altas- finalizo. Pffs… ¿amigos aquí? Esme me estaba pidiendo un cambio radical en mi actitud. Me molesto como había dicho la palabra inapropiado, no sé si quiera si esa palabra era la correcta. No era un mal chico, es que mi familia era demasiado buena… mierda que eran buenos.

Solo me habían expulsado una vez y fue en Washington, dio la casualidad que a Carlisle lo habían transferido a Nueva York. Allí no me habían dado este discurso de no hacer las cosas mal… es que las reglas siempre cambian. Recuerdo que en el instituto aquel me habían suspendido unas… solo dos veces. Exagerados. Rosalie había sido suspendida dos veces más que yo, pero es que la señorita era porrista y era jodidamente buena por la cual no la podían sacar del instituto. Sin embargo ella había sido suspendida por su actitud, no por su comportamiento como yo… además Rosalie no fue reprochada, ella no es la oveja negra de la familia. Solo un poco fría con un pasado condenado, nada más. Es por cierto la novia de mi hermano. Todavía no sé como un juguetón como Emmett termino con una jodida muchacha frívola con mirada penetrante. Sus ojos azules, no son como el mar, son fríos como el cielo o el hielo y de verdad que te asustan. Claire y Roger son los padres de la princesa de hielo y su mellizo, mi mejor amigo… y lamentablemente novio de Alice, Jasper. Se habían mudado aquí hace unos meses antes que nosotros.

Odie con toda mi alma a Claire cuando le conto a Esme lo "hermoso

y verde" que era Forks. Forks era definitivamente mi infierno mismo, una mierda… eso le había dicho a Emmett. Cuando llegamos, me pareció un lugar… bueno, estaba lleno de verde, como había dicho la madre de Jasper. Definitivamente no es mi color favorito pero se ve lindo aquí. Había un pequeño pueblo y a una millas estaba Port Ángeles un pueblo un poco más grande… ¿lo malo? tenía un mini centro comercial. Para Alice la palabra mini era insignificante, la jodida muchacha nos terminaría llevándonos a Emmett y a mí de todos modos. No importa que este enojada conmigo, parece que lo hacía a propósito. Me empujaba a ir de compras para luego fulminarme con sus grandes ojos color negro… así eran, negro carbón.

De todos modos, no importaba que Alice me arrastre a un centro comercial y me ignore durante todo él paseo o que Esme me imponga todas las reglas que se le plazca, yo tendría que comportarme bien, igualmente. No por ellos si no por mi. Ya la había pasado mal jodiendo todo y llendo a él reformatorio y no quería volver allí.

Accedí todas las condiciones que me impuso Esme como había dicho. Sabia que de cierto modo todos desconfiaban de mi ¿pero de esa manera?... tal vez si debería cambiar mi actitud

Mierda… ¿eso salió de mi?


¿Loca? si totalmente. Soy Lucy y sere la escritora de este fic. El primer capitulo es algo corto porque de cierto modo es una introduccion. Espero recibir sus comentarios sobre el primer capitulo. Es una loca idea que tenia desde hace un año ¿pueden creerlo? todo el día reprimiendola... jaja :$

Bueno, nos vemos en el capitulo 2!

¿REVIEWS? :)

Lucy Masen