Es un ship súper raro pero yo sé que les va a gustar (bueno, no lo sé pero espero que sea así :P)… denle una oportunidad por favor ;)…

Adevertencia: Spoiler… me baso en los últimos caps del manga para escribir esto ;)

Disclaimer: Los personajes de Ansatsu Kyoushitsu son propiedad de Matsui-sensei, yo solo escribo mis historias basándome en ellos…

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Capítulo 1

Sentimientos

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Seguramente estos sentimientos están alojados en mí desde el primer momento. Desde que se dio cuenta de mi existencia y me reconoció. Seguramente… pero… pero… ¿cómo iba a darme cuenta?, la gente no acostumbra considerar que alberga en su interior este tipo de sentimientos hacia alguien que, como mínimo, no vea medianamente humano. Él no estaba ni cerca de parecer humano cuando todo esto comenzó. Al principio me había engañado, pero gracias a eso me hizo ver mis fortalezas y mis debilidades. Me apoyó en todo momento para superarme a mí misma. Su presencia siempre me había hecho sentir nerviosa y segura a la vez. Quedar a solas con él siempre había provocado que mi corazón latiera rápidamente y sus palabras siempre provocaban que un sentimiento cálido se alojara en mi pecho.

A pesar de ello, en ningún momento llegó cruzar por mi cabeza la idea de que estos sentimientos fueran algo más que simple admiración, respeto y agradecimiento, en ningún momento creí haberme enamorado de esas dulces palabras de aliento ni de su grata compañía. Al menos no hasta que lo vi como un humano. Cuando lo vi de esa manera por primera vez fue, también, la primera vez que consideré que mis sentimientos implicaran algo más fuerte hacia esa persona. Cuando volvió a ser humano, junto con las dudas, vinieron nuevas sensaciones. Los nervios en su presencia se volvieron más fuertes, los sonrojos más recurrentes, y mi corazón amenazaba con salírseme del pecho. Podía quedarme horas viendo su amable y bello rostro sin cansarme ni poner atención a nada más. Y, finalmente, Akabane Karma había abandonado mis pensamientos.

No fui capaz de reconocer mis verdaderos sentimientos sino hasta que salimos de la secundaria. Koro-sensei había continuado con su carrera como profesor de la clase 3-E de Kunugigaoka y había cambiado su nombre por Shinjirou Koutaro. Si la clase 3-E bien seguía siendo marginada, ya no existía con el mismo propósito, ahora a ella eran canalizados los alumnos con fuertes problemas de algún tipo, desde escolares hasta sociales, para que Koro-sensei les diera el "empujoncito" que necesitaban.

Pasé toda mi vida preparatoriana lamentándome el no haberme dado cuenta de lo que sentía en realidad por él. Cuando iba a entrar a la universidad me sentía muy nerviosa por el examen de ingreso, me encontré con Kayano un par de semanas antes y ella me dijo: "Ve a ver a nii-san, está libre después de clases, estoy segura de que él te puede ayudar a tranquilizarte". Así fue que tomé el valor para ir a visitarlo. El camino hacia mi viejo salón de clases me hizo llenarme de nostalgia. Cuando llegue a la cima y lo vi, ahí, de pie ante el pizarrón, dando clases extra a un par de alumnos, recordé porque era que lo quería tanto. Cuando le expliqué mi situación, temblando de pies a cabeza por el nerviosismo que me provocaba su cercanía, me propuso, con sus siempre tan amables palabras y su sonrisa tan cálida, ayudarme con mis estudios durante esas dos semanas que tenía. Me sentía caminar sobre nubes. Él y yo, solos, hasta altas horas de la noche, estudiando arduamente, no creí que hubiera algo mejor que eso. Un día antes del examen, cuando llegue a mi última clase, él me estaba esperando al pie de la montaña, al lado de su carro. Me llevó a tomar un café. "Tienes que relajarte un poco para estar en forma durante el examen", me dijo antes de invitarme a subir a su coche. Ese fue uno de los mejores días de mi vida. El olor a caramelo dentro del coche, el dulce sabor del café con chocolate, la suave colonia de mi antiguo profesor, su voz, sus gestos, sus sonrisas… él. Él y su atención era todo lo que necesitaba para ser feliz. Me di cuenta de lo mucho que lo amaba.

Después de eso tomé una resolución. Quería estar a su lado lo que me restaba de vida. Me di el firme propósito de llegar a donde él estaba, de estar a su altura para poder caminar juntos por el mismo sendero. Terminé la universidad en un año menos de lo que debía, me gradué como la mejor licenciada en química tanto de la generación con la que entré como de la generación con la que salí. Nunca he sido buena expresando mis sentimientos, me esfuerzo mucho en ellos pero no me es nada fácil. Aun así estoy segura de que si sigo estando a su lado algún día podré decirle lo que siento y podré conseguir que algún día me corresponda.

Ahora camino nuevamente por el sendero de la montaña, entre los árboles que antaño me guiaban hacia mi salón de clases del asesinato en el que nadie murió. Estoy vestida con traje sastre y una densa trenza que resbala por mi espalda. No llevo nada de maquillaje, eso no es lo mío. Entró al edificio y me paro ante la puerta del salón. Tomo aire antes de llamar con los nudillos. La persona a la que tanto amo es quien me recibe con una sonrisa cuando la puerta es abierta. Entró al salón sintiéndome un poco nerviosa ante la mirada de todos los alumnos. Escribo mi nombre en el pizarrón y hago una reverencia a la clase.

—Buenos días. Mi nombre es Okuda Manami, soy la nueva asistente de Koro-sensei. Cuiden de mi por favor.

—Ella fue una de mis primeras alumnas y le tengo mucho aprecio. Es una mujer extraordinaria. Sean amables con ella, por favor, estoy seguro de que se llevaran muy bien—Koro-sensei pasó su brazo por mis hombros y me dedico una de esas sonrisas suyas—. Okaerinasai, Manami-chan.

—Tadaima, Koro-sensi.

A cada paso que doy me siento más cerca de él. Sin duda alguna asesinaré al corazón de Koro-sensei, es el cobro por haber asesinado al mío. Y todo ocurrirá aquí, en este salón de clases que vio nacer a la persona que soy ahora y que vio nacer estos hermosos sentimientos. Sin lugar a dudas, lograré mi objetivo.

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Eso es todo… no se ustedes, pero cuando una amiga (Morgane D. Yeena) me dijo de esta pareja no pude evitar pensar en ella todo el tiempo y terminé por escribir esto. Espero que a ustedes también les haya gustado ;)… Dejen sus reviews por favor, son alimento para el alma de un escritor (no exagero)… nos estamos leyendo… matta nee!