"Ni tu ni nadie podrá,
quitármelo de la mente,
ni tú ni nadie sabrá,
el daño que me hace a veces"
Cuan extraño es, cuan simple y vacío parece, jamás imaginé que me sentiría así, exactamente así, por ti, por mi, por él; cuando conocí a Cedric Diggory, era simplemente el chico perfecto, sonrisa impecable, personalidad afable, sentido del humor y si a eso se le suma belleza, guapura, simplemente no tiene mucho que dudarse, yo debía ser de Diggory y él debía ser mío, así de sencillo, así de simple y así fue; todos lo esperaban y por los pasillos el rumor era claro ya. Pero cuando supe después de un tiempo que tú, Harry Potter te fijabas en mi, hubo algo que no contrastaba, por que entonces el chico perfecto, ya no lo era, el chico perfecto Cedric era ahora un estorbillo en la lista, una pieza de ajedrez que había que mover con pinzas y pronto.
Pero no, hasta cierto punto no, pese a que muchas lo decían a que muchos lo pensaban y me lo recomendaban, yo no iba a dejarlo, por que había algo que nacía de apoco entre los dos Harry, yo por Cedric sí sentía algo; ¿cómo dejar a alguien por quien comienzas a sentir amor?, ¿cómo hacerlo y sobre todo con el simple y absurdo argumento de "deseo ser más popular"?, era idiota, era absurdo...era innecesario.
Aquel día, cuando las palabras se te atoraban en la lengua, cuando el nudo que se hacía en mi pecho se hacía en tu boca para proponerme ir al baile, realmente me encontraba en un aprieto, Cedric era mi pareja, el chico con el que quería estar, pero tú eras la pareja con la que según rumores yo debía estar; querer, deber, complejo...¿no crees?...luego su muerte, ¿sabes lo que sentí al verlo ahí tirado como un trapo a tu lado? Por dos segundos Harry esto fue lo que sentí: te odié, te odié culpándote de todo, de su muerte de su rostro pálido del frío en sus dedos, en sus labios que jamás me volverían a hablar, a sonreír, a besar.
Cedric yacía muerto, simplemente muerto, así de sencillo; luego la idea, tú debías saber algo, tú debías decirme algo de él, confesarme si te habría dicho algo, si él pensaba en mi en el último momento, pero no, no lo sabías y aunque un raro afecto nació en mi por ti, aunque hubiera querido realmente amarte como a él (si es que lo que siento por él realmente es amor), no pasó; me equivoqué Harry, quise reemplazar a un campeón con otro, pero es que necesitaba a alguien conmigo, alguien que me recordara a Cedric, alguien que me hiciera saber que él había existido a fuerza de haberlo conocido también.
No espero que lo entiendas, no espero que comprendas, no lo intento ni lo quiero, sólo te lo menciono como mero comentario, como susurró que sale sin que me de cuenta; no puedo decir que lo haya amado, o que sea el hombre de mi vida, pero aún pienso en él y me descubro llorándole, en cierta forma dentro de mi ha dejado un vacío que no planeo llenar con alguien más, de ningún modo, por que como él no hay nadie, y así me siento bien, doliéndome y recordándolo, por que él merece que se le recuerde así, como lo que fue, una gran persona. Cedric sigue ahí, intermitente a mi lado, algunas veces intenté olvidarlo para volver a ti, pero no puedo, no puedo hacerlo, por que como sea, aún me hace daño saber que ya no está, aún me daña saber que no lo tengo, que no volverá y peor aún, que tú, pese a ser el héroe de miles y tener la fuerza para salvar a otros cuantos, precisamente a él, no me lo puedes devolver.
