Saludos. He aquí un fanfic sobre la nueva generación, el cual por supuesto, en un principio se parece mucho a los otros fanfics, ya que todos relatamos la escena del expreso, la selección de casas, etc., pero de a poco pienso poner las 'particularidades' de este fanfic, las cuales espero que no se repiten en las otras historias (sí soy sincera, sólo he leído dos fanfics de la nueva generación, y sólo el primer capítulo de cada uno, por lo que no estoy demasiado enterada...) Otra cosa, debo admitir que no he leído todo el libro siete, pero si leí el epílogo (no he leído todo el libro porque he estado algo atareada), y he buscado por Internet la info. de personajes de los cuales no estoy segura si murieron o no. En fin, espero que todo esté en orden, si alguien quiera hacerme una corrección, ésta será muy bienvenida.

Disclaimer: Harry Potter, junto a su universo y personajes, etc., no me pertenece, si no que pertenecen a J.K Rowling. Esto yo lo hago por mera diversión, y sin fin de lucro alguno.


Diferencias

Y el expreso Hogwarts partió. Rose fue la última de los dos en sacar la mano de la ventana, para así sentarse cómodamente en el compartimiento escogido por ella y su primo. Para su suerte, o tal vez mala suerte, aquella sección del expreso sólo estaba ocupada por ella y Albus.

-¿Nerviosa, Rose?-Preguntó Albus a su prima, mir

do de reojo la ventanilla del compartimiento.

-No más que tú, Al.-Respondió la niña, esbozando una pequeña sonrisa en su rostro.-Deberías dejar de preocuparte por el asunto de las casas, ¿sabes? Todos tus antepasados han pertenecido a Gryffindor, por lo tanto, lo más lógico sería que tú también pertenecieras a esa casa. También, recuerda que James está allí.-

Albus sólo se limitó a asentir con la cabeza, pero eso no quitaba su nerviosismo. Él nunca había sido tan valiente como su hermano mayor o como Lily, su hermana menor, es más, siempre que estaba en "apuros" se "valía más por su astucia que por su valentía", como a menudo decía su propio padre.

Fue entonces cuando la puerta del compartimiento se abrió de golpe, lo que provocó un pequeño sobresalto en Rose, quien estaba comenzando a leer un libro de pociones.

-¿Nos podemos sentar aquí?-Dijo con algo de arrogancia el niño pálido, él cual estaba al lado de un muchacho alto.-Todos los vagones están ocupados.-Agregó casi de inmediato, posando sus ojos, los cuales eran grises con matices verde pálido, alternadamente en Rose y Albus.

Albus estaba a punto de decir que sí, pero se detuvo al sentir la penetrante mirada de su prima.

-Es Scorpius Malfoy… ¡no podemos dejar que se siente con nosotros!-Le susurró Rose a Albus, quien simplemente se encogió de hombros, como si nada de eso le importase.

-¿Y crees que es muy agradable sentarse con una Weasley?-Scorpius Malfoy frunció el ceño y miró desafiante a Rose. Al parecer, había escuchado todo, y no es que realmente le desagradase sentarse con alguien de esa familia, pero si alguien le insultaba, él debía de responder de igual forma.

El chico que estaba al lado de Scorpius rió desagradablemente.

-Bueno, si no quieres sentarte con nosotros, Malfoy, ¿por qué no te vas con tu amiguito?-La mejillas de Rose enrojecieron.

-Hey, hey, no es necesario pelear.-Albus miró con algo de seriedad a su prima.-Si quieren pueden sentarse aquí.-Finalizó el niño, él cual sería igual a su padre, si no fuese por su nariz, y porque no necesitaba usar gafas, además de claro, de no tener la cicatriz en forma de rayo.

Rose abrió la boca para decir algo, sin embargo no dijo nada. Dejó a un lado su libro de pociones. Si lo pensaba con más calma, lo mejor sería no hacerse enemigos antes de ir a Hogwarts. Con el ceño notablemente fruncido, observó con algo de recelo a Scorpius y a su amigo.

-Supongo que ya saben quien soy, ¿cierto?-Comenzó a decir Scorpius, una vez que se sentó al frente de Albus y Rose.-Él es Andrew Nott.-El niño miró de reojo al chico que estaba sentado a su lado.-Y no tengo que ser una adivino para decir que ustedes son Albus Potter y Rose Weasley.-El último nombre que dijo, lo pronunció con desagrado. Para Scorpius Malfoy, las primeras impresiones sí importaban.

Albus miró amablemente a Scorpius y a Andrew, mientras que Rose aún mantenía su expresión de molestia. Albus estuvo a punto de decirle algo a Scorpius, pero al ver el rostro de su prima, decidió no hacerlo.

En lo que vino del viaje, todos los niños sólo hablaron con sus compañeros de asiento, sin siquiera dirigirles la palabras a los que estaban en frente de éstos, lo que no quitaba que a menudo Scorpius y Rose intercambiaran "miradas asesinas".

Y entonces, salió a flote el tema de las casas.

-Por supuesto, yo quedaré en Slytherin, al igual que toda mi familia.-Dijo con orgullo Scorpius, mirando de reojo a Rose.

-¿Ah, sí? Yo y Al quedaremos en Gryffindor.-Habló con desición Rose, mirando fijamente al niño de cabello rubio platinado.

-En realidad, yo no sé muy bien si quedaré en esa casa.-Murmuró Albus, recordando todos sus temores al respecto.

-¿Gryffindor?-Andrew Nott miró con sorna a los dos primos.- ¿Acaso no saben que esa es la peor casa?-

-Junto a Hufflepuff, claro está-Agregó Scorpius.-Así que, Potter, tendrás mucha suerte si no quedas en esa casa.-

-No opino igual que ustedes, Gryffindor es la mejor casa.-Dijo con algo de frialdad Albus, cambiando drásticamente tu actitud hacía los otros dos niños. Él siempre había tenido en alto la casa de los leones, cosa no extraña considerando que toda su familia había pertenecido allí.

-En cuanto a mí, estoy seguro que me seleccionarán en Slytherin, la cual sí es la mejor casa.-Habló Andrew Nott, mirando a Albus y a Rose como si fuese superior a ellos.

-¿Cómo esa va a ser la mejor casa?-Albus miró penetrantemente tanto a Scorpius como a Andrew.- Mi hermano siempre me dice que de ahí sólo salen magos oscuros.-

-No es siempre así.-Murmuró Scorpius, mirando fijamente a Albus.

Albus iba a abrir la boca, mas prefirió no hacerlo, ya que recordó de por qué le pusieron como segundo nombre Severus. Sintiéndose algo avergonzado de su propio error, prefirió callar, sin disculparse. El orgullo era uno de sus peores defectos.

Siendo así, se hizo presente un profundo silencio, el cual se les hizo incómodo a todos los presentes del compartimiento, hasta que fue interrumpido cuando se abrió la puerta.

-Ya vamos a llegar, así que colóquense las túnicas.-Dijo mecánicamente uno de los prefectos de Gryffindor, él cual tenía el cabello rubio rojizo.- ¡Ah, pero si aquí están mis primos!-Una pequeña sonrisa se formó en el elegante rostro de Louis Weasley.- ¿Todo va bien?-

Tanto Albus como Rose asintieron.

-Entonces me voy, suerte con el sombrero.-Louis Weasley les guiñó el ojo a sus primos, y desapareció tan rápido como entró.

Todos los presentes en el compartimiento se sacaron sus chaquetas, y se colocaron sus túnicas en silencio.

El corazón a Albus le latía fuertemente, ¿y si él no tenía suerte con el sombrero?

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Hagrid miró con interés a los nuevos estudiantes, y no pudo evitar dirigirles una amena sonrisa a Albus y Rose, cuando pudo divisarlos entre el tumulto de niños.

-Bien, muchachos, siéntense en estos botes, de a cuatro personas. Yo los conduciré, a través de ellos al castillo.-Dijo calurosamente el semi-gigante, indicando a cada uno de los niños a donde sentarse.

Para agrado de Rose, y tal vez para también de Albus, les tocó sentarse con los gemelos John y Julie McLeod. Ambos primos encontraron verdaderamente simpáticos a aquellos chicos, y conversaron enfrascadamente con ellos hasta que llegaron al castillo. Como era obvio, los dos gemelos estaban especialmente entusiasmados por el simple hecho de conversar con uno de los hijos de Harry Potter.

Al fin, y después de unos cuantos minutos, se pudo divisar calaramente el majestuoso castillo de Hogwarts. Albus, quién ya estaba nervioso en el bote, ahora se puso muchísimo más nervioso. Rose, quien conocía muy bien a su primo, le sonrió y el apretó suavemente su mano.

-Todo va a salir bien, Al.-Murmuró la niña, fijando sus ojos azul oscuro en su primo.

Albus tragó dificultosamente, y movió afirmativamente su cabeza. El muchacho procuró sujetar la mano de su prima, la cual le traía cierta tranquilidad, hasta que el profesor Longbottom les pidió que formasen una fila.

Siendo así, el Sombrero Seleccionador comenzó a entonar su canción. Como era de esperarse, todos la escucharon con atención, y al terminar, todos aplaudieron.

Rose miró con atención como los niños iban siendo llamados alfabéticamente. La niña restregó un poco sus manos sudadas en su túnica, aunque no lo quisiera admitir, estaba casi tan nerviosa como su primo. Ella, al igual que Albus, no estaba muy segura si quedaría en Gryffindor o no.

-¡Malfoy, Scorpius!-Llamó el profesor Longbottom, mirando con aparente indiferencia el pergamino que tenía en sus manos.

Scorpius salió de la fila, y se colocó calmadamente el Sombrero Seleccionador, el cual a apenas rozó la cabeza del niño dijo, ¡SLYTHERIN!

Con una pequeña sonrisa esbozada en su pálida cara, Scorpius se dirigió a la mesa de la casa en la que fue seleccionado.

Después fue llamado McLeod, John, quien fue seleccionado para Hufflepuff. Seguidamente, llamaron a su gemela, McLeod, Julie, la cual fue escogida para Gryffindor.

-¡Nott, Andrew!-Dijo esta vez el profesor Longbottom, con la vista aún posada en el pergamino.

Andrew Nott, con una confiada sonrisa en sus labios, se sentó en el banquillo, y se probó sin ansiedad aparente alguna, el sombrero. Pasaron al menos tres minutos, hasta que le sombrero gritó, ¡RAVENCLAW!

Los ojos oscuros del muchacho se abrieron. ¿Cómo es que él, un Nott sangre pura, no había quedado en Slytherin?

-¿Algún problema, Nott?-Preguntó con suavidad el profesor Longbottom, mirando al niño.

-No… ninguno, profesor.-Respondió Andrew, aún no pudiendo creer la desición tomada por el sombrero. Con un paso lento, y expresión cabizbaja, se dirigió a la mesa de Ravenclaw.

Después fue llamada Ocelot, Camille, quien fue seleccionada para Slytherin. Fue cuando el profesor dijo, Potter, Albus, y un gran silencio inundó al Gran Comedor.

-¿Tu hermano, cierto?-Le susurró Randy Lochrin a James Potter, su compañero de asiento y curso.

-Sí.-Respondió James, posando sus ojos pardos en la figura de su hermano. Se acomodó sus gafas. Tal vez, había hecho mal en molestar tanto a su hermano… pero ¿qué importaba? Lo más seguro era que terminara en Gryffindor, o al menos, eso esperaba.

Albus se colocó con notable ansiedad el sombrero, y cerró con fuerza los ojos."Vaya, vaya, interesante mente."Comenzó a decirle una vocecilla "Sí, definitivamente, muy interesante… ¿estás algo indeciso, eh? No te preocupes, niño, que yo te pondré en la casa en la cual desarrolles mejor tu potencial. Ya lo tengo decidido..., ¡SLYTHERIN!"

El profesor Longbottom miró amablemente a Albus, y le quitó el sombrero.

-Ya puedes irte, Al.-Murmuró en voz baja el profesor, al ver que Albus aún no se levantaba del banquillo.

-S-sí.-Albus sólo atinó a mirar primero a su prima, quién le miraba sonriente. Algo más confiado ante ello, se dirigió hacía la mesa de Slytherin, y se sentó en el primer asiento vacío que vio, el cual fue al lado de Scorpius Malfoy.

James Potter observó boquiabierto a su hermano menor, y no era el único. Todos, sobre todo en la mesa de Gryffindor, comenzaron un murmurar cosas, y es que, ¿cómo el segundo hijo de Harry Potter, él cual además era un Weasley por su familia materna, había quedado en la "casa de las serpientes"?

-De seguro que el sombrero está comenzando a fallar.-Le Murmuró Randy Lochrin a James, como a modo de consuelo.

-Sí, de seguro pasó eso.-Contestó James entre dientes, tratando de contenerse, ya que si fuera por él iría ahora mismo a reclamarle al profesor Longbottom.

Poco a poco los murmullos comenzaron a decaer, mas aún así todos, incluso en la mesa de Slytherin, miraban a Albus Potter como si fuese un autentico "bicho raro", bueno, todos menos Scorpius Malfoy, él le tendió la mano a Albus.

-Bienvenido, Potter.-Una sincera sonrisa apareció en la cara de Scorpius.

-Gracias…-Albus miró primero con algo de indecisión al otro niño, pero finalmente él también sonrió.-Espero que arreglemos nuestras diferencias.-Agregó estrechando fuertemente la mano de Scorpius.

-¡Weasley, Rose!-Dijo entonces el profesor Longbottom, con su habitual tono de voz.

Albus de inmediato le dio la espalda a Scorpius, y fijó su mirada en donde estaba su prima.

Rose caminó un tanto nerviosa al banquillo, se sentó en éste y se probó el sombrero. Al sujetar el sombrero, se podía ver claramente como sus manos temblaban.
"¡Sí que tienes una mente brillante! Y valor tienes sí… pero no el suficiente" Rose empalideció ante esto, ¿estaba oyendo bien, o sólo era su imaginación? "Definitivamente, allí estarás mucho mejor, y podrás así encontrar a tus iguales, ¡RAVENCLAW!"

Rose abrió un poco sus ojos, pero aún así mantuvo la compostura y caminó, aparentando tranquilidad, hacía la mesa de Ravenclaw. No pudo evitar reír un poco al encontrarse frente a frente con Andrew Nott.

-¿No que decías que estarías en Slytherin, Nott?-Dijo Rose, tratando que su risa no fuese tan notoria.

-Cállate, Weasley.-Murmuró algo molesto Andrew, mirando de mala gana como iban siendo seleccionado los últimos niños.

La niña desvió su mirada de Andrew, y miró hacia la mesa de Slytherin. Según veía, su primo estaba haciendo amistad, o algo por el estilo, con el hijo de Draco Malfoy. Una punzada de celos le oprimió un poco su pecho. Tratando de convencerse que su primo no la cambiaría por algún Slytherin, menos por un Malfoy, Rose dirigió su mirada a la mesa de Gryffindor, a la mesa donde ella y Albus sí deberían estar. Una especie de ansiedad la invadió en ese momento, ¡ella que tanto quería estar con sus primos, y sobre todo, con Albus!

Mientras tanto, en la mesa de Gryffindor, un niño de tez oscura abrió la boca para hablar con su primo, James Potter.

-Randy tiene razón, el Sombrero Seleccionador debe estar fallando, o sea, ¡poner a una Weasley en Ravenclaw!-Dijo Fred Weasley, quien estaba sentado al otro lado de James.

-Hum.-Emitió el primogénito de Harry Potter, tratando aún de contener su molestia. Aún no podía hacerse la idea de que su hermano pequeño estuviese en la misma casa de Horus Zabini, su "principal enemigo" en Hogwarts.

En la mesa de estudiantes con uniformes verde y plateado, los ánimos estaban algo más amenos. Un niño de cabello rebelde color negro, miró sonriente al niño que estaba a su lado.

-Puedes llamarme Al, si quieres.-Le dijo Albus a Scorpius, segundos antes de que la actual directora de Hogwarts, Minerva McGonagall, se dispusiera a dar el discurso de bienvenida.

-Y tú, puedes llamarme Scorpius.-Murmuró el otro muchacho, ahora, Slytherin, indicándole a su posible nuevo amigo, que lo llamara por su nombre de pila, y no por su apellido.

Rose, quién aún tenía los ojos fijos en la mesa de Slytherin, frunció el ceño. Sintió entonces como alguien le movió el hombro con suavidad.

-El discurso de la directora ya está por comenzar, procura poner atención.-Dijo en voz baja aquella persona, quien era Martin Williams, uno de los prefectos de Ravenclaw.

Algo avergonzada por su falta, Rose asintió, y puso toda su atención en las palabras de la directora. ¿Qué importaba si ella y Al quedaban en casas diferentes? Nada, ni nadie, destruirían el lazo que les unía, o al menos eso esperaba.


Lo sé… Scorpius es algo prejuicioso en cuanto a las primeras impresiones, ¿cierto? Incluso lo es un poco en cuanto a las casas se refiere, pero no lo es en cuanto a las familias. Una vez, leí que el era una especie de "Draco mejorado", y sí lo piensan bien, en mi fanfic lo es. También, Andrew Nott es bastante diferente a su padre…. Lo que quiero decir con esto, es que esa diferencia fue a adrede.

Si les parece que las reacciones de Albus y Rose fueron algo "poco creíbles", tiene algo de razón, mas pienso agravar esa emoción al pasar del próx. capítulo, o al menos eso intentaré hacer. Antes que lo olvide, sé que Albus se ve algo sumiso ante Rose, y hasta ella habla por él algunas veces (¿les parece conocido?), pero el transcurso de la historia va a cambiar eso. En cuanto a la pareja principal, supongo que es notoria, ¿no? También, debo decir que, como siempre, no he quedado muy conforme con el resultado final del capítulo, pero no sé como podría mejorarlo... Una ,última cosa, sé quwe fue algo un poco holgazan de mi parte, al no poner la cancion del Sombrero Seleccionador, pero en realidad, no se me ocurrió una tan rápidamente (sí, sí ya sé, no tengo tanta imaginación u.ù)- Si se me llega a ocurrir una, modificare el capitulo y la pondré cuanto antes.

No falta decir que, si les ha gustado, dejen un review, si por el contrario no, mas quieren dejar una crítica constructiva sin groserías, también manden un review. Eso, realmente, me hariamuy feliz y me incentivaría a continuar el fanfic, aunque ya aclaro que pienso colgar un próximo capítulo.