Bla, bla, bla, los personajes no son míos si no de la señora Rowling ^^
Fue un viaje largo y cansado. Ron se sentía molido por haber estado sentado más de cinco horas en el tren que lo conduciría a su nuevo hogar. Había viajado toda la noche y arribó muy temprano en la estación. Bajó su equipaje y con un aire frío que rodeaba el ambiente, comenzó a caminar recorriendo las calles de Italia. Iba sin rumbo fijo. No conocía a nadie ahí, y era exactamente lo que quería, no conocer a nadie y comenzar una nueva vida. Luego de caminar varias calles, se encontró con un muy acogedor café. Las tripas le chillaban y decidió entrar para comer algo. Se sentó en una mesa, sin volver a ver a las personas que se encontraban desayunando ahí. Una mesera se acercó y le preguntó que iba a ordenar. Ron pidió tostadas con mantequilla y una taza de café. Se sacó una pequeña foto del bolsillo de su túnica y la observó por un rato. Luego estuvo a punto de romperla, pero algo lo detuvo. La volvió a guardar en su bolsillo, y se dispuso a desayunar lo que la mesera le había servido. Iba a darle la primera mordida a su tostada cuando escuchó a alguien que le hablaba.
¿Ron? ¿Ronald Weasley?
¿Si? - respondió Ron volviendo a ver quien de todas las personas en la cafetería le hablaba.
¿No te acuerdas de mí Ron? - preguntó una chica.
¿Luna Lovegood? - Ron veía a la chica incrédulo.
Veo que si me recuerdas Ronald - contestó la chica con una hermosa sonrisa.
Pero que. . . haces aquí.
Aquí vivo. ¿Me puedo sentar?
Claro, claro, siéntate.
Luna Lovegood. La había conocido en Hogwarts en quinto año. Iba al mismo
año que Ginny, pero en la casa de Revenclaw. No había cambiado mucho.
Seguía con la misma cara de chiflada, pero sin lo sucio de su cabello
rubio, y no parecía tan loca, como lo parecía en Hogwarts. Lo único
extraño es que se veía "gordita".
Es una sorpresa verte aquí Ron.
Pues creo que ya no lo será. Voy a vivir acá.
¿En serio? Me alegro mucho. Pero ¿por qué te viniste para acá?
Bueno. . . - Ron dudo su respuesta - me trasladaron del Ministerio de Magia.
¡Oh!
Oye, veo que has engordado un poquito - agregó Ron en broma.
Bueno Ron, ¿será por que estoy embarazada?
Ron se atragantó con un pedazo de tostada. No se había percatado del
enorme estómago que Luna se cargaba, y era más que evidente que estaba
embarazada. Ron se sintió como estúpido.
Lo siento. . . no lo había notado - se disculpó el pelirrojo.
No te preocupes Ron - añadió Luna entre risas - aunque es casi imposible que no se note. Ya tengo siete meses y mi barriga es enorme.
Pues la verdad es que sí. . . - repuso Ron observando el estómago de Luna - es decir, va a ser un bebe muy grande.
Niña. Va a ser una niña Ron.
Pues me alegro mucho por ti Luna. Me imagino que tu esposo estará muy contento - a Luna se le fue la sonrisa que había mantenido en su rostro.
Me imagino que si - respondió Luna un poco triste - en donde quiera que esté, seguro que lo estará.
¿A qué te refieres Luna?
A que el padre de mi bebe murió hace seis meses.
Ron se volvió a sentir como estúpido. Había cometido dos imprudencias en
menos de cinco minutos.
Lo siento Luna. . . no fue mi intención. . .
Descuida Ron. Ya superé eso.
¿Cómo murió? - Ron sintió que había metido la para de nuevo al realizar esa pregunta.
Pues. . . trabajaba en un circo muggle. Era trapecista. - Ron pareció no asombrarse de eso. Luna siempre había parecido alguien muy extravagante, era lógico que consiguiera de compañero sentimental a alguien igual o menos loco que ella - Era de los mejores para ser sincera. Pero. . . - Luna dudó un momento antes de contestar, parecía que tenía un nudo en le garganta que no le permitía hablar - intentó hacer una nueva acrobacia y. . . todo salió mal. No había red abajo. . . así que. . . murió instantáneamente. Por el golpe. Estaba muy alto.
Lo siento Luna - Ron de verdad se sentía apenado por eso.
Dos meses después de su muerte. . . descubrí que estaba embarazada. Pensé que por lo menos, algo me había quedado de él - Ron veía con ternura a Luna.
¿Qué paso con tus padres?
Oh bueno. Nunca estuvieron de acuerdo con mi relación con él. Así que huí hacia acá. Veo que está muy de moda fugarse - Ron solo sonrió levemente - estoy trabajando en la tienda de túnica de una amiga. Y creo que ya te aburrí Ron.
Claro que no Luna. Me alegra haber encontrado una cara familiar en este país.
Ron. . .
¿Si?
¿Puedo confesarte algo?
Claro - Ron pensó que otra cosa podría revelarle Luna. Le había resumido su vida en menos de 15 minutos.
Yo estaba enamorada de ti en Hogwarts - Ron sintió que el café que acababa de sorber le quemaba todo el esófago hasta llegar al estómago.
En. . . serio. . .
Si. Pero no te preocupes. Ahora le soy fiel al recuerdo de Marcus.
Ese era el nombre de. . .
Si. Bueno, en el circo le llamaban el "Gran Marcus", pero para mí siempre fue Marky. . . Oye Ron ¿ya tienes donde alojarte?
Pues no. . . no he buscado aún un lugar. Acabo de llegar.
¿Por qué no te quedas en mi casa? Digo, es muy grande, me sobra un cuarto y. . . te vendría bien una cara conocida. ¡Mira que es en buena onda!
Ron dudó por unos segundos. El venía a Italia a olvidarse de todo, a no
tener contacto con nadie que conociera. Pero Luna se veía tan
desprotegida. Y no es que Ron comenzara a amarla. Su corazón ya tenía
dueño, y la propietaria se llamaba: Hermione Granger. Pero de todos
modos, Luna también estaba "fugitiva" de su familia al igual que Ron.
Además, él le podía hacer compañía a Luna, y Luna a él.
De acuerdo - contestó Ron no tan, tan convencido de su decisión.
¡Genial! - exclamó Luna, y fue el momento en el que Ron la había visto sonreír más que en todo lo que llevaban charlando en el café.
Ron pagó la cuenta y se dirigieron a la casa de Luna. A la chica se le
dificultaba mucho el caminar por la gran barriga que se cargaba. Para
Ron, más parecía que iba a tener al hijo de Hagrid que al hijo de un
trapecista.
¡Llegamos! - dijo Luna después de abrir la puerta de una pequeña casita en "Pinos Condomain", una colonia cerca del centro mágico de Italia.
Muy. . . linda - agregó Ron. La verdad estaba decorada con pinturas extrañas. Parecía que eran abstractas pero con movimiento y en vez de tener un color uniforme las paredes, tenían manchas de todos colores.
Este. . . es tu cuarto - apuntó Luna abriendo la puerta de una habitación muy espaciosa que "si" tenía un color uniforme: azul. Parece que Luna seguía recordando Revenclaw. Tenía un closet, una cama grande, una mesita de noche, un baño, y era lo único que Ron necesitaba.
¡Es perfecto! - repuso Ron entrando a la habitación y dejando la maleta sobre su nueva cama.
Lo siento que no esté decorado como toda la casa pero. . . no he tenido tiempo de arreglarlo. . .
No, así está bien - se apresuró a decir Ron.
¿Qué te parece si preparo un almuerzo italiano para darte la bienvenida Ron?
Pues. . . no quiero incomodarte Luna. . .
¡No me incomodas Ron! Para mi es todo un placer - y dicho esto se metió a la cocina.
Ron observaba el cuarto. Era mucho más espacioso que el que tenía en la
madriguera, pero no tan acogedor como aquel. No aguantó la tentación y
volvió a sacar la foto de su túnica. La observó por un momento, y empuñó
la otra mano que tenía libre de coraje. "Tú nunca vas a ser como Krum. .
. " Una vos resonaba en la cabeza de Ron, y estuvo a punto, de nuevo, de
romper la foto, pero se detuvo. La metió en un cajón de la mesita de
noche, y se fue hacia la sala. En un dos por tres, Luna preparó un
enorme plato de espaguetis con albóndigas y lasaña de pollo con queso
cheddar. Como siempre Ron y su buen apetito, no iban a desaprovecha
suculento banquete. Los dos se sentaron a la mesa a degustar el
exquisito almuerzo. Luego de haber terminado, se sentaron en uno de los
sillones de la sala. Ron ayudó a Luna a sentarse.
Ron. . . en serio. . . ¿qué te trae acá?
Pues. . . - Ron dudó de nuevo su respuesta pero, recordó que Luna hacía unas horas le había abierto su corazón, ¿por qué él no habría de hacer lo mismo? - yo también huí.
¿De qué Ron? - preguntó intrigada Luna y poniéndose de lo más cómoda en el sillón.
De todo. Me vine para comenzar una nueva vida. Quiero olvidar el pasado.
¿Qué sucedió Ron? Siempre te consideré alguien muy valiente, y aunque no dudo que lo sigas siendo. . . no comprendo de que huiste.
De mi familia. . . de mi trabajo. . . de. . . Hermione - Luna sonrió triunfantemente.
¡Lo sabía! Estaba segura de que tú estabas enamorado de Hermione en Hogwarts. . . pero continúa.
Ron dudó el hablar de nuevo.
Lo que paso fue que. . . Hermione. . . éramos novios. Yo era muy feliz estando con ella. Tu sabes, siempre peleabamos por tonterías pero, lo que más me gustaba eran las reconciliaciones - Ron sonrió ante lo que había dicho y Luna también, esta se veía muy atenta el relato de Ron - Pero de un día para otro se comenzó a comportar de una manera extraña.
*FLASH BACK*
Hola Herm.
Eh. . . Ron. . . ¿qué no estabas en la oficina de Percy?
Si pero, me envió por unos documentos que estabas revisando. ¿Sucede algo? - Ron observó que Hermione escondió algo a sus espaldas cuando el entró. Esta lucía nerviosa.
No. . . no. . . no pasa nada. . . Ron - Hermione tenía sus manos en su espalda.
¿Qué escondes Hermione? ¿Y esa lechuza? - preguntó Ron al percatarse que en la ventana de la oficina de Hermione se encontraba una lechuza gris que Ron jamás había visto - No es del ministerio.
Ron. . . yo. . . - Ron se le acercó y le arrebató el papel que Hermione escondía.
Hermione:
No contestaste mi última lechuza. Aún espero tu respuesta. Las
invitaciones de la boda ya están hechas. . .
Y Ron dejó de leer. Para el era suficiente lo que había leído, y
reconocer la letra de quien provenía esa carta: Krum. Le dedicó una
mirada fría a Hermione. Ron dio media vuelta e iba avanzando a hacia la
puerta.
¡Ron espera! - exclamó Hermione acercándose a Ron.
Yo no tengo nada que decir Hermione. Está claro lo que dice la carta o ¿no? Me has estado engañando con Krum todo este tiempo. Por eso estabas rara. Por eso estos últimos días no pasaste conmigo. Y ahora ¿te vas a casar con él?
Ron vas a empezar con tu escenita de celos. . .
¡No es ninguna escenita Hermione! Lo acabo de leer.
Tú no entiendes Ron.
Claro que lo entiendo. Yo no soy Krum.
¡Exacto Ron! ¡Tu jamás vas a ser como Krum! - exclamó desesperada Hermione.
Ron sintió una fuerte punzada en el corazón, y un dolor horrible en el
estómago. Las palabras de Hermione fueron como mil cuchillos
atravesándole el cuerpo. Ron miró por última vez a Hermione y se retiró.
No fue al despacho de Percy, quien lo estaba esperando con los
documentos que Hermione estaba revisando. Se fue directamente a la
oficina del Ministro de magia y solicitó su traslado a cualquier país
donde lo quisieran mandar, pero él pedía discreción. Firmó un documento
en el cual hacia constar que no ser permitía darle a nadie el paradero
de Ron, inclusive ni a su familia. Él ministro le preguntó que por que
esas medidas, pero Ron le explicó al ministro que eran cosas demasiado
personales pero que así lo deseaba. El ministro aceptó la propuesta de
Ron, y en un dos por tres le consiguió un puesto en el departamento de
asuntos muggles en Italia. Tenía que salir esa misma noche por que les
urgía un empleado en ese departamento. Sin más ni menos, Ron se dirigió
a la madriguera en la cual, por suerte, no se encontraba nadie, recogió
todas sus cosas y se fue. Dejó una nota en la cocina que la señora
Weasley encontró ya muy tarde. Ron ya había partido hacia Italia.
Mamá:
Lo siento por haberme ido de esta manera, y entenderé si me guardas
rencor, pero. . . necesito irme de aquí. Todo me tiene muy confundido.
No trates de pedir información de mí en el Ministerio por que firmé un
contrato de privacidad y tienen prohibido dar mi paradero. Diles a todos
que los quiero y que me perdonen. En especial. . . dile a Hermione que
sea muy feliz. Adiós mamá.
Ronald Weasley.
*FLASH END*
Hola!!!
Espero que este fic no me vaya a quedar triste ¬¬!!! Siento mucho no
haber actualizado mi otro fic pero, he tenido: "desinspiración
cerebral"!!! NO encontraba como continuarlo ¬¬ Pero en medio de ese
lapso me surgió la idea de este nuevo fic. Espero no decepcionar a
nadie. A mi parecer no me quedó bien, pero no está tan mal. En fin
ustedes son los críticos y aceptó que me manden vociferadores, tomatazos
y todo lo que me merezca si de verdad me quedó mal el cap _!!!
(excepto virus por que mi PC no tiene la culpa Y_Y) Nos vemos luego y
dejen reviews!!!!
Chao!!!!
Fue un viaje largo y cansado. Ron se sentía molido por haber estado sentado más de cinco horas en el tren que lo conduciría a su nuevo hogar. Había viajado toda la noche y arribó muy temprano en la estación. Bajó su equipaje y con un aire frío que rodeaba el ambiente, comenzó a caminar recorriendo las calles de Italia. Iba sin rumbo fijo. No conocía a nadie ahí, y era exactamente lo que quería, no conocer a nadie y comenzar una nueva vida. Luego de caminar varias calles, se encontró con un muy acogedor café. Las tripas le chillaban y decidió entrar para comer algo. Se sentó en una mesa, sin volver a ver a las personas que se encontraban desayunando ahí. Una mesera se acercó y le preguntó que iba a ordenar. Ron pidió tostadas con mantequilla y una taza de café. Se sacó una pequeña foto del bolsillo de su túnica y la observó por un rato. Luego estuvo a punto de romperla, pero algo lo detuvo. La volvió a guardar en su bolsillo, y se dispuso a desayunar lo que la mesera le había servido. Iba a darle la primera mordida a su tostada cuando escuchó a alguien que le hablaba.
¿Ron? ¿Ronald Weasley?
¿Si? - respondió Ron volviendo a ver quien de todas las personas en la cafetería le hablaba.
¿No te acuerdas de mí Ron? - preguntó una chica.
¿Luna Lovegood? - Ron veía a la chica incrédulo.
Veo que si me recuerdas Ronald - contestó la chica con una hermosa sonrisa.
Pero que. . . haces aquí.
Aquí vivo. ¿Me puedo sentar?
Claro, claro, siéntate.
Luna Lovegood. La había conocido en Hogwarts en quinto año. Iba al mismo
año que Ginny, pero en la casa de Revenclaw. No había cambiado mucho.
Seguía con la misma cara de chiflada, pero sin lo sucio de su cabello
rubio, y no parecía tan loca, como lo parecía en Hogwarts. Lo único
extraño es que se veía "gordita".
Es una sorpresa verte aquí Ron.
Pues creo que ya no lo será. Voy a vivir acá.
¿En serio? Me alegro mucho. Pero ¿por qué te viniste para acá?
Bueno. . . - Ron dudo su respuesta - me trasladaron del Ministerio de Magia.
¡Oh!
Oye, veo que has engordado un poquito - agregó Ron en broma.
Bueno Ron, ¿será por que estoy embarazada?
Ron se atragantó con un pedazo de tostada. No se había percatado del
enorme estómago que Luna se cargaba, y era más que evidente que estaba
embarazada. Ron se sintió como estúpido.
Lo siento. . . no lo había notado - se disculpó el pelirrojo.
No te preocupes Ron - añadió Luna entre risas - aunque es casi imposible que no se note. Ya tengo siete meses y mi barriga es enorme.
Pues la verdad es que sí. . . - repuso Ron observando el estómago de Luna - es decir, va a ser un bebe muy grande.
Niña. Va a ser una niña Ron.
Pues me alegro mucho por ti Luna. Me imagino que tu esposo estará muy contento - a Luna se le fue la sonrisa que había mantenido en su rostro.
Me imagino que si - respondió Luna un poco triste - en donde quiera que esté, seguro que lo estará.
¿A qué te refieres Luna?
A que el padre de mi bebe murió hace seis meses.
Ron se volvió a sentir como estúpido. Había cometido dos imprudencias en
menos de cinco minutos.
Lo siento Luna. . . no fue mi intención. . .
Descuida Ron. Ya superé eso.
¿Cómo murió? - Ron sintió que había metido la para de nuevo al realizar esa pregunta.
Pues. . . trabajaba en un circo muggle. Era trapecista. - Ron pareció no asombrarse de eso. Luna siempre había parecido alguien muy extravagante, era lógico que consiguiera de compañero sentimental a alguien igual o menos loco que ella - Era de los mejores para ser sincera. Pero. . . - Luna dudó un momento antes de contestar, parecía que tenía un nudo en le garganta que no le permitía hablar - intentó hacer una nueva acrobacia y. . . todo salió mal. No había red abajo. . . así que. . . murió instantáneamente. Por el golpe. Estaba muy alto.
Lo siento Luna - Ron de verdad se sentía apenado por eso.
Dos meses después de su muerte. . . descubrí que estaba embarazada. Pensé que por lo menos, algo me había quedado de él - Ron veía con ternura a Luna.
¿Qué paso con tus padres?
Oh bueno. Nunca estuvieron de acuerdo con mi relación con él. Así que huí hacia acá. Veo que está muy de moda fugarse - Ron solo sonrió levemente - estoy trabajando en la tienda de túnica de una amiga. Y creo que ya te aburrí Ron.
Claro que no Luna. Me alegra haber encontrado una cara familiar en este país.
Ron. . .
¿Si?
¿Puedo confesarte algo?
Claro - Ron pensó que otra cosa podría revelarle Luna. Le había resumido su vida en menos de 15 minutos.
Yo estaba enamorada de ti en Hogwarts - Ron sintió que el café que acababa de sorber le quemaba todo el esófago hasta llegar al estómago.
En. . . serio. . .
Si. Pero no te preocupes. Ahora le soy fiel al recuerdo de Marcus.
Ese era el nombre de. . .
Si. Bueno, en el circo le llamaban el "Gran Marcus", pero para mí siempre fue Marky. . . Oye Ron ¿ya tienes donde alojarte?
Pues no. . . no he buscado aún un lugar. Acabo de llegar.
¿Por qué no te quedas en mi casa? Digo, es muy grande, me sobra un cuarto y. . . te vendría bien una cara conocida. ¡Mira que es en buena onda!
Ron dudó por unos segundos. El venía a Italia a olvidarse de todo, a no
tener contacto con nadie que conociera. Pero Luna se veía tan
desprotegida. Y no es que Ron comenzara a amarla. Su corazón ya tenía
dueño, y la propietaria se llamaba: Hermione Granger. Pero de todos
modos, Luna también estaba "fugitiva" de su familia al igual que Ron.
Además, él le podía hacer compañía a Luna, y Luna a él.
De acuerdo - contestó Ron no tan, tan convencido de su decisión.
¡Genial! - exclamó Luna, y fue el momento en el que Ron la había visto sonreír más que en todo lo que llevaban charlando en el café.
Ron pagó la cuenta y se dirigieron a la casa de Luna. A la chica se le
dificultaba mucho el caminar por la gran barriga que se cargaba. Para
Ron, más parecía que iba a tener al hijo de Hagrid que al hijo de un
trapecista.
¡Llegamos! - dijo Luna después de abrir la puerta de una pequeña casita en "Pinos Condomain", una colonia cerca del centro mágico de Italia.
Muy. . . linda - agregó Ron. La verdad estaba decorada con pinturas extrañas. Parecía que eran abstractas pero con movimiento y en vez de tener un color uniforme las paredes, tenían manchas de todos colores.
Este. . . es tu cuarto - apuntó Luna abriendo la puerta de una habitación muy espaciosa que "si" tenía un color uniforme: azul. Parece que Luna seguía recordando Revenclaw. Tenía un closet, una cama grande, una mesita de noche, un baño, y era lo único que Ron necesitaba.
¡Es perfecto! - repuso Ron entrando a la habitación y dejando la maleta sobre su nueva cama.
Lo siento que no esté decorado como toda la casa pero. . . no he tenido tiempo de arreglarlo. . .
No, así está bien - se apresuró a decir Ron.
¿Qué te parece si preparo un almuerzo italiano para darte la bienvenida Ron?
Pues. . . no quiero incomodarte Luna. . .
¡No me incomodas Ron! Para mi es todo un placer - y dicho esto se metió a la cocina.
Ron observaba el cuarto. Era mucho más espacioso que el que tenía en la
madriguera, pero no tan acogedor como aquel. No aguantó la tentación y
volvió a sacar la foto de su túnica. La observó por un momento, y empuñó
la otra mano que tenía libre de coraje. "Tú nunca vas a ser como Krum. .
. " Una vos resonaba en la cabeza de Ron, y estuvo a punto, de nuevo, de
romper la foto, pero se detuvo. La metió en un cajón de la mesita de
noche, y se fue hacia la sala. En un dos por tres, Luna preparó un
enorme plato de espaguetis con albóndigas y lasaña de pollo con queso
cheddar. Como siempre Ron y su buen apetito, no iban a desaprovecha
suculento banquete. Los dos se sentaron a la mesa a degustar el
exquisito almuerzo. Luego de haber terminado, se sentaron en uno de los
sillones de la sala. Ron ayudó a Luna a sentarse.
Ron. . . en serio. . . ¿qué te trae acá?
Pues. . . - Ron dudó de nuevo su respuesta pero, recordó que Luna hacía unas horas le había abierto su corazón, ¿por qué él no habría de hacer lo mismo? - yo también huí.
¿De qué Ron? - preguntó intrigada Luna y poniéndose de lo más cómoda en el sillón.
De todo. Me vine para comenzar una nueva vida. Quiero olvidar el pasado.
¿Qué sucedió Ron? Siempre te consideré alguien muy valiente, y aunque no dudo que lo sigas siendo. . . no comprendo de que huiste.
De mi familia. . . de mi trabajo. . . de. . . Hermione - Luna sonrió triunfantemente.
¡Lo sabía! Estaba segura de que tú estabas enamorado de Hermione en Hogwarts. . . pero continúa.
Ron dudó el hablar de nuevo.
Lo que paso fue que. . . Hermione. . . éramos novios. Yo era muy feliz estando con ella. Tu sabes, siempre peleabamos por tonterías pero, lo que más me gustaba eran las reconciliaciones - Ron sonrió ante lo que había dicho y Luna también, esta se veía muy atenta el relato de Ron - Pero de un día para otro se comenzó a comportar de una manera extraña.
*FLASH BACK*
Hola Herm.
Eh. . . Ron. . . ¿qué no estabas en la oficina de Percy?
Si pero, me envió por unos documentos que estabas revisando. ¿Sucede algo? - Ron observó que Hermione escondió algo a sus espaldas cuando el entró. Esta lucía nerviosa.
No. . . no. . . no pasa nada. . . Ron - Hermione tenía sus manos en su espalda.
¿Qué escondes Hermione? ¿Y esa lechuza? - preguntó Ron al percatarse que en la ventana de la oficina de Hermione se encontraba una lechuza gris que Ron jamás había visto - No es del ministerio.
Ron. . . yo. . . - Ron se le acercó y le arrebató el papel que Hermione escondía.
Hermione:
No contestaste mi última lechuza. Aún espero tu respuesta. Las
invitaciones de la boda ya están hechas. . .
Y Ron dejó de leer. Para el era suficiente lo que había leído, y
reconocer la letra de quien provenía esa carta: Krum. Le dedicó una
mirada fría a Hermione. Ron dio media vuelta e iba avanzando a hacia la
puerta.
¡Ron espera! - exclamó Hermione acercándose a Ron.
Yo no tengo nada que decir Hermione. Está claro lo que dice la carta o ¿no? Me has estado engañando con Krum todo este tiempo. Por eso estabas rara. Por eso estos últimos días no pasaste conmigo. Y ahora ¿te vas a casar con él?
Ron vas a empezar con tu escenita de celos. . .
¡No es ninguna escenita Hermione! Lo acabo de leer.
Tú no entiendes Ron.
Claro que lo entiendo. Yo no soy Krum.
¡Exacto Ron! ¡Tu jamás vas a ser como Krum! - exclamó desesperada Hermione.
Ron sintió una fuerte punzada en el corazón, y un dolor horrible en el
estómago. Las palabras de Hermione fueron como mil cuchillos
atravesándole el cuerpo. Ron miró por última vez a Hermione y se retiró.
No fue al despacho de Percy, quien lo estaba esperando con los
documentos que Hermione estaba revisando. Se fue directamente a la
oficina del Ministro de magia y solicitó su traslado a cualquier país
donde lo quisieran mandar, pero él pedía discreción. Firmó un documento
en el cual hacia constar que no ser permitía darle a nadie el paradero
de Ron, inclusive ni a su familia. Él ministro le preguntó que por que
esas medidas, pero Ron le explicó al ministro que eran cosas demasiado
personales pero que así lo deseaba. El ministro aceptó la propuesta de
Ron, y en un dos por tres le consiguió un puesto en el departamento de
asuntos muggles en Italia. Tenía que salir esa misma noche por que les
urgía un empleado en ese departamento. Sin más ni menos, Ron se dirigió
a la madriguera en la cual, por suerte, no se encontraba nadie, recogió
todas sus cosas y se fue. Dejó una nota en la cocina que la señora
Weasley encontró ya muy tarde. Ron ya había partido hacia Italia.
Mamá:
Lo siento por haberme ido de esta manera, y entenderé si me guardas
rencor, pero. . . necesito irme de aquí. Todo me tiene muy confundido.
No trates de pedir información de mí en el Ministerio por que firmé un
contrato de privacidad y tienen prohibido dar mi paradero. Diles a todos
que los quiero y que me perdonen. En especial. . . dile a Hermione que
sea muy feliz. Adiós mamá.
Ronald Weasley.
*FLASH END*
Hola!!!
Espero que este fic no me vaya a quedar triste ¬¬!!! Siento mucho no
haber actualizado mi otro fic pero, he tenido: "desinspiración
cerebral"!!! NO encontraba como continuarlo ¬¬ Pero en medio de ese
lapso me surgió la idea de este nuevo fic. Espero no decepcionar a
nadie. A mi parecer no me quedó bien, pero no está tan mal. En fin
ustedes son los críticos y aceptó que me manden vociferadores, tomatazos
y todo lo que me merezca si de verdad me quedó mal el cap _!!!
(excepto virus por que mi PC no tiene la culpa Y_Y) Nos vemos luego y
dejen reviews!!!!
Chao!!!!
