SnK no me pertenece, hago este fic sin fines de lucro, solo diversión

Aviso: Sí, es Riren, peeero, tambien hay ErenxOC, espero que les guste de todas formas je, ammm oh! AU! Y un poco de OoC

Days

1. Día 1

Eren se limpió la nariz y lavó la cara, después de llorar un par de horas había decidido que era suficiente, por ese día, y que debía ponerse en pie para distraerse un poco, el tiempo pasaba tortuosamente lento, incluso había terminado la limpieza de su apartamento temprano, por lo que cuando se asomó por la ventana y vio la tarde despejada, decidió salir a caminar, para tomar un pequeño respiro.

Levi le había dicho que se iba a un viaje de negocios…en Italia, claro, y él solo había sonreído, le había besado de forma fugaz y deseado buena suerte. En cuanto le vio cruzar la puerta se derrumbó en su cama, comenzando a llorar sin control. Porque Eren Jaeger lo sabía, sabía perfectamente que su esposo tenía muchos y muchas amantes…pero simplemente no tenía el valor para enfrentarle, porque se sentía demasiado cobarde como para reclamarle. Sabía perfectamente que esos "viajes de negocios" eran simples visitas rutinarias a su amante en turno, sí, Eren Jaeger no podía ser más infeliz con su vida.

Sus pasos le llevaron hasta el parque cerca de su departamento, como aún era temprano todavía había niños jugando de aquí a allá. Se sentó en un columpio, tomando con fuerza las cadenas que sostenían el asiento y comenzó a mecerse, con sus pies, despacio. Clavó la mirada en el suelo e inevitablemente comenzó a pensar en toda su situación con su marido, sintiendo que se deprimía cada vez más.

Sintió como se sentaban en el columpio de al lado, pero no puso atención a quien fuese que estuviera ahí, solo quería buscar una manera de mejorar su vida, de dejar de deprimirse. Inevitablemente sus ojos se llenaron de lágrimas y las sintió mojar sus mejillas, lanzó un bufido y buscó limpiarse con la manga de su chamarra, pero no pudo detener su llanto.

-Hey-la voz masculina a su lado le hizo sobresaltarse un poco, pero no respondió-Sé que es una pregunta…tonta pero ¿Estás bien?-de reojo y de forma borrosa vió el pañuelo que el otro le tendía, vaciló un poco pero al final lo tomó, tapándose la cara

No contestó, porque no quería que le escuchara la voz quebrada, ni tampoco quería la compasión o lastima de un desconocido así que se limitó a llorar lo más silencioso que pudo, reprimiendo gemidos y sollozos, escondiendo el rostro detrás del pañuelo blanco, el otro pareció comprender así que solo le vió en silencio, esperando a que se desahogara.

-Sabes que…nunca nadie soluciono nada llorando ¿Verdad?-le dijo después de un rato y cuando le vió más calmado

-Lo sé…pero no puedo evitarlo-se quejó, con el ceño fruncido y la voz temblorosa aún, bajando finalmente el pañuelo, encontrándose con un par de orbes ónix que le miraban fijamente, el extraño le sonrió de lado y sacó otro pañuelo de su bolsillo, limpiando con delicadeza su rostro, los ojos hinchados del castaño le habían parecido adorables

-¿Quieres contarme que pasó?-se ofreció, con su sonrisa aún en sus labios, Eren le miró extrañado

-No te conozco-

-Oh, perdona-extendió una mano hacia él-Soy Declan-se presentó, Jaeger estrechó su mano, un poco desconcertado

-Eren-

-Bueno, ya me conoces-el castaño no pudo evitar soltar una risita, por aquella extraña presentación-¿Ahora quieres hablar?-el chico soltó un suspiro y sorbió la nariz, apretando en sus manos las cadenas del columpio que había vuelto a tomar

-Declan-san-dijo en voz baja, recargando la cabeza de la cadena y bajando la mirada al suelo-¿Usted es realmente…feliz?-el pelinegro lanzó un suspiro e hizo una mueca pensativa, comenzando a mecerse, como un niño

-Veamos-comenzó a decir mientras Eren le veía balancearse-Tengo el trabajo que quiero y gano lo que quiero, vivo en el departamento que siempre soñé y gozo de buena salud-dejó de mover los pies para columpiarse y levantó la vista al cielo-No tengo una pareja pero eso no me mortifica, ya llegara la persona indicada en su momento, pero hay una persona que me hace feliz-volteó a ver a Jaeger y le sonrió de nuevo, quien no pareció comprender aquello último-Y no me arrepiento de nada de lo que he hecho en mi vida-los ojos esmeralda del alemán se abrieron levemente, sorprendido por aquello-Así que sí…soy feliz-el columpio se detuvo despacio y Declan espero a estar quieto de nuevo para poder continuar-¿Tú eres feliz, Eren?-

-Bueno-bajó la mirada de nuevo y la clavo en sus piernas, sintiendo que su nuevo amigo comenzaba a columpiarse de nuevo-Estoy casado con el hombre del que creo estar enamorado…pero la mayor parte del día estoy solo en casa y el poco tiempo que estamos juntos es para pelear por que a su parecer nunca hago nada bien-sintió el nudo en su garganta e intentó pasarlo con saliva-Los pocos amigos que tenía deje de frecuentarlos por estar atento a mi marido, sé que tiene una amante pero no tengo el valor suficiente para enfrentarlo-el chico a su lado paro abruptamente ante lo dicho por Eren-De niño siempre soñé con ir al mar pero jamás he podido viajar a una playa…-suspiro y sintió de nuevo las lágrimas bajar despacio-Así que no…no soy feliz-

-¿Eres…alguna clase de masoquista?-preguntó el pelinegro con una ceja arqueada, haciendo reír un poco al otro

-Supongo-

Declan se puso de pie y se acercó, se hincó frente a él y volvió a limpiarle el rostro, despacio, con una mueca. Eren se sorprendió por la cercanía y por la facilidad del hombre para hacer aquel tipo de cosas.

-Eren, no deberías soportar todo aquello…tanta soledad te está devastando-

-¿Cómo puedes saberlo?-frunció levemente el ceño y el pelinegro uso un dedo para relajar sus facciones

-Eres un libro abierto, lo tienes escrito en tu frente-

-Pero…-

-Si eres infeliz-le interrumpió sonriéndole-No debes quedarte ahí-

-¡No lo entiendes!-le regaño Jaeger, un poco molesto-Yo lo amo-

-Ok, pongámoslo de otro modo-cruzo sus brazos y se inclinó un poco a él-Imagina que tienes un balde con agua fría, y en él hay una rana-Eren le miró sin comprender-Si mueves tu rana del balde de agua fría al uno de agua caliente obviamente notara el cambio brusco de temperatura y se saldrá-el castaño abrió la boca para preguntar pero el otro alzo una mano para detenerle-Pero si ponemos a calentar el agua sin mover a la rana, cuando el agua este hirviendo la rana notara el cambio pero no se moverá…porque ha estado en esa agua desde el principio…y morirá-

-¿Y eso que…?-el pelinegro lo volvió a interrumpir

-Es lo mismo contigo, no notaste un cambio brusco porque estuviste ahí desde antes, y creíste ser feliz, pero ahora que sabes que todo está mal…no sabes que hacer…porque estuviste ahí desde el principio-palmeó sus rodillas y le sonrió levemente-Tienes que moverte Eren…o morirás como la rana-

-¿Por qué habría de morir?-preguntó sin comprender y creyendo que él estaba siendo muy exagerado

-De tristeza-se puso de pie y se sentó de nuevo en su columpio-Mi madre murió de tristeza-comentó comenzando a balancearse-Y créeme que no fue algo lindo-Jaeger le miró de reojo, analizando sus palabras-Está obscureciendo-

-Será…mejor que me vaya-Levi dijo que llamaría pensó, pero se mordió la lengua antes de decir nada

-Sí, yo también, hay que madrugar-se puso de pie a la par suya y le sonrió-Espero verte de nuevo Eren, fue un placer conocerte-

-Igual-respondió en un susurro y giró sobre sus talones, comenzando a andar a su departamento, tenía muchas cosas que pensar.

2. Día 2

Eren se removió en las mantas y le dio la espalda a la ventana, no tenía ganas de ponerse en pie, solo quería dormir, no había podido hacerlo la noche anterior, cerró los ojos e intentó perderse en la inconsciencia, el teléfono comenzó a sonar, lanzó un suspiro y sacó una mano para alcanzarlo en el buró, oprimió el botón para contestar y se lo llevó al oído.

-¿Alo?-

-Hola, Eren-abrió los ojos al reconocer su voz

-Levi, ¿Cómo estás? ¿Llegaste bien?-

-Sí-Eren volvió sus labios una línea y bajó la mirada-¿Dónde estuviste ayer en la tarde? Te llame cuatro veces-

-Oh, lo siento, tuve que salir-dijo rascándose la nuca, no le iba a decir que estuvo platicando con un extraño hasta tarde-Levi…-

-¿Qué pasa?-

-Yo… ¿Eres feliz?-

-Tengo lo que quiero, ¿Por qué no habría de serlo?-

-¿Todo lo que quieres?-

-Sí… ¿A qué viene todo esto?-

-No es nada, Levi, perdona, me quede con una estupidez de un programa que ví anoche-escuchó el suspiro de su pareja y tragó saliva

-De acuerdo, te hablo cuando vaya de regreso, adiós-y colgó, Jaeger se quedó con la boca abierta y las palabras en la boca, analizando la reciente conversación

Sintió sus ojos humedecerse y se recostó de nuevo, Levi era feliz, teniéndolo a él y a sus amantes, claro.

3. Día 3

Eren se sentó en el comedor y observó a su alrededor, sintiéndose deprimido…sin remedio…

4. Día 4

Despertó encogido en el sillón, se sentó de forma brusca y miró la sala. Suspiró, estaba considerando seriamente el irse de ahí de una vez por todas…buscó a tientas el teléfono en la mesa de centro, que sonaba sin cesar y marcó la tecla para contestar.

-¿Alo?-preguntó con voz adormilada y se volvió a acostar

-Eren… ¿Estabas durmiendo?-reconoció la voz de Levi, aunque le escuchaba distante y parecía que susurraba

-Sí yo…-

-Son las 6 de la tarde-

-No es nada-se apresuró a negar tapando sus ojos con una mano-Solo me sentía un poco mal-

-Claro, deberías ir al médico-carraspeó y añadió-Solo te hablaba para decirte que me quedaré otra semana tengo que…er…revisar una propuesta y bueno, tardaré- Jaeger había notado cuando su marido vacilo pensando en una excusa y solo suspiró inaudiblemente

-Entiendo-tragó saliva e intentó fingir que estaba bien-No te preocupes, Levi, entiendo-

-Gracias, te llamo después, adiós-habló con prisa y colgó

Miró el teléfono en su mano que aún sonaba con el tono de fin de la llamada, lo pensó un poco, para finalmente, marcar el número de Jean…

5. Día 5

Cuando llegó al parque ese día descubrió que su nuevo amigo ya estaba ahí, columpiándose con los ojos cerrados y una sonrisa en el rostro. No entendía porque, pero realmente esperaba que él estuviera ahí, la charla que habían mantenido hacía unos días había sido tan buena, para él, que quería volver a hablar con él…decirle lo que iba a hacer.

-Eren, me alegra verte-dijo Declan cuando abrió los ojos y le divisó ahí de pie

-Gracias…igual a mí-

-¿Qué tal has estado? ¿Pudiste dormir aunque sea un poco?-

-No muy bien-el pelinegro soltó una risita y asintió

-Comprendo, tendrás mucho en que pensar-

Jaeger se sentó a su lado y comenzó a balancearse despacio con los pies. Cerró los ojos y escuchó la risa de los niños jugando cerca, el viento acariciaba su rostro y los rayos de sol bañaban su piel, se sentía bien, como hacía mucho no se sentía.

-¿Y qué haces aquí?-preguntó sin abrir los ojos

-Pasando un rato, cuidando a mi hermana-

-¿A tu hermana?-preguntó volteando a verle, Declan le sonrió y señaló con la mano hacia un pequeño puente colgante en un juego

-Es la que está ahí, corriendo a todos lados sin descanso-

Los orbes esmeraldas de Eren divisaron a la niña, iba de un extremo a otro, con una rama en la mano, señalaba hacia un lado y corría hacia el contrario, su corto cabello negro y su piel morena la hacían idéntica a Declan. Pronto un par de niños se acercaron a ella y después de intercambiar unas palabras comenzaron a jugar todos juntos. No pudo evitar sonreír y escuchó la risa de su amigo a su lado, haciéndole voltear a verle.

-Siempre ha tenido esa facilidad para hacer amigos…no importa a donde vaya-

-Eso es bueno-

-Sí, es mejor que verle deprimida-

-¿Deprimida?-

-Hace poco su padre llamó, le consiguió una beca en otra ciudad, pero ella no quiere irse, porque tendría que vivir con él y no quiere dejarme-Jaeger volvió su vista a la niña-Estoy pensando seriamente en ir con ella, para que no este triste-

-¿Su padre?-

-Bueno, su padre y el mío son diferentes, pero tenemos misma madre-Eren asintió comprendiendo-Igual, nada me importa…solo necesito estar con ella para ser feliz-el castaño se sorprendió por lo dicho y entonces entendió que se refería el primer día que hablaron

Declan se puso de pie y se estiró, con pereza, el otro estaba tan concentrado viendo a la niña jugar, con una inevitable sonrisa en los labios al verle tan feliz y concentrada en su juego, liderando a los otros, que no notó cuando el pelinegro se paró detrás de él y tomó las cadenas del columpió de Jaeger.

-¿Declan que…?-preguntó cuándo lo notó pero entonces sintió su cuerpo columpiarse como minutos antes el moreno lo había hecho

-Deja de pensar-le pidió con una sonrisa, empujándolo de nuevo, el castaño no pudo evitar soltar una risita ¿Por qué con Declan se sentía así, y con Levi tenía que pensar demasiado en que decir, en cómo actuar?

Estuvieron un rato así, hasta que Eren le pidió que parara y Declan se sentó en su columpio, volviendo a balancearse, lento.

-¡De-clan~!-escuchó el gritó de una vocecita, y divisó a la niña correr hacia ellos, con los brazos abiertos y la rama aún en su mano

Se detuvo frente a ellos y los miró curiosa con sus ojos azules, dejando caer la rama, pasando sus orbes de un lado a otro, estudiándolos a ambos, le sonrió a Eren y se acercó despacio, poniendo sus manitas en sus rodillas.

-Hola, ¿Quién eres? ¿Eres novio de mi hermano?-Jaeger se sonrojó por la pregunta y le sonrió

-Solo somos amigos-habló el pelinegro revolviéndole el cabello-Él es Eren-

-Eren, soy Anne-estrechó sus manos y las agitó con fuerza

-Un placer Anne-le sonrió de vuelta, encantado con la sonrisa amplia de la niña

-¿Eren irá con nosotros?-preguntó con un deje de esperanza, mirando al moreno

-No- su hermano negó con la cabeza y la tomó en brazos sentándola en su regazo

Jaeger bajó la mirada al suelo, irse…ya lo había pensado pero… ¿Irse sería una buena opción? Moverse de su lugar…y buscar su felicidad, suspiró audiblemente y se puso de pie.

-¿Cuándo se irán?-preguntó estirándose, Anne se puso de pie

-La otra semana-su semblante se puso un poco triste pero de inmediato se recompuso

-¿A dónde irán?-

-Berlín-contestó esta vez el mayor

-Yo soy de Berlín-les contesto con una sonrisa

-Deberías ir con nosotros-dijo la pelinegra con esa sonrisita tan bonita y amplia que la hacía única

-¡Hey! ¡Anne!-gritó un niño desde el puente, moviendo las manos-¡Tenemos que proteger el barco! ¡La marina volverá por nosotros!-señaló a un niño rubio que subía con un poco de dificultad hacia el puente

-¡Kevin! ¡Ya te dije que yo soy la capitana del barco!-gritó y echó a correr de vuelta, olvidando por completo el tema anterior

-La vez pasada que nos encontramos aquí… ¿También viniste con ella?-

-Sí, vengo con ella todos los días…espero que donde vivamos haya un parque cerca-

-Sabes yo…quiero volver a Berlín-volteó a verle, encontrando al pelinegro bastante sorprendido-Podríamos irnos juntos, los tres, la semana próxima-

-Eren-Declan se levantó, serio, demostrando que era un poco más alto que él, le tomo por los hombros y le miró a los ojos-¿Vas a dejar a tu marido…así?-

-Sí-la respuesta salió automática, ya no necesitaba pensarlo, ya no necesitaba mortificarse por ello-Quiero irme y no volver…quiero ser feliz-sonrió, y aunque era una sonrisa cargada de tristeza…el otro comprendió a la perfección

-Está bien…si es lo que quieres-le sonrió de lado-Será divertido…irnos juntos-

-Sabes yo…-soltó una risita-Es extraño, te conozco de hace unos días y siento que puedo confiar plenamente en ti-Declan le acompaño riendo

-Me lo dicen muy seguido-

Día 6

Día 7

Día 8

Día 9

Día 10

Día 11

Levi entró al departamento, se había sentido un poco mal de dejar a Eren solo cuando aparentemente se sentía mal, así que decidió decirle a Petra que tenía que volver a su ciudad por un llamado urgente del trabajo. Se sorprendió de encontrarlo a oscuras, a esa hora Eren solía estar en la cocina, haciendo la cena. Encendió las luces y miró a su alrededor, pensando si el chico habría tenido que salir.

En la mesa había un sobre amarillo, cerrado, con un pequeño papel blanco con la letra pulcra de Eren sobre esta. Optó por abrir primero el sobre, sacó un paquete de papeles, bien acomodados y engrapados. De título las primeras 3 palabras que lo hicieron perder el aliento momentáneamente.

"Acta de Divorcio"

Dejó los papeles y el sobre en la mesa, vió caer el pequeño papel que había sido pegado al sobre y se inclinó a levantarlo, leyendo las otras palabras que terminaron por romperle el corazón. Simples palabras que le quitaron la respiración de forma brusca.

"Suficiente de este estúpido juego, no estoy ciego ni soy imbécil. Adiós."

Corrió al cuarto y abrió el armario, encontrando solo su ropa en este, rebusco en todos los cajones y los libreros, en las repisas, en la sala. Nada, todas las cosas de Eren se habían esfumado, junto con el castaño…


Hola! Estoy de vuelta! X3 lo que pasa es que pasaron muuuuuchas cosas uuuff Dx bueno, la idea de esto surgió cuando fui con alguien a los columpios y me pregunto si era feliz (amm una larga historia, ya se las contaré algún día jeje) en fin~ espero les haya gustado y bueno, nos leemos pronto…porque he vuelto! xD

Les mando besitos! Y abrazos! Les amo! xD

Ja ne!

Rave-chan