Summary: Nunca nos damos cuenta, de cómo nuestros errores afectan a las personas a nuestro alrededor. Él había arruinado su vida y sin darse cuenta, también la de ella.
Disclaimer: Ni Bleach ni ninguno de sus personajes son de mi pertenencia. Si así lo fuera, el manga no hubiera tenido ese final.
Este disclaimer se aplica para este capítulo y todos los venideros.
Aclaraciones:
Normal - presente.
"Cursiva y negrita con comillas" - pasado.
Cursiva - futuro.
Sobrio.
"And if you're still breathing, you're the lucky ones
'Cause most of us are heaving through corrupted lungs
Setting fire to our insides for fun
Collecting names of the lovers that went wrong
The lovers that went wrong."
-Youth, Daughter.
Capítulo Uno:
Algo sonaba fuertemente de manera molesta y constante desde hacía un buen rato pero él lo ignoró, tapándose la cabeza con la almohada. Tenía demasiado sueño como para molestarse en ver qué era el irritante sonido. Continúo acostado en la cama en esa posición hasta que Karin lo obligó a despertar con gritos y varios golpes a la puerta de su habitación, exigiéndole que apagara de una vez el maldito despertador.
-¡Cálmate Karin! ¡Ya va! -exclamó Ichigo irritado, callando de una vez el aparato y sentándose en la cama, sin dejar de rascarse la parte posterior de la cabeza y bostezando perezosamente.
-¡Apresúrate o llegarás tarde al instituto! -le respondió su hermana, dando un último golpe a la puerta antes de que se oyeran sus pasos alejándose por la escalera.
Instituto.
Dejó caer su cabeza hacia delante con un suspiro cansado.
No quería ni pensar en ello.
Apoyó los codos sobre sus rodillas aún cubiertas por las sábanas y dejó vagar a su mirada por el paisaje que veía a través de su ventana.
A penas despertaba y ya estaba completamente aburrido. Aburrido de la monotonía y de su vida.
En la escuela fue la misma rutina que siempre. Llegaba, se abría paso entre la masa estudiantil que había en los pasillos gracias a su ceño fruncido y su eterna expresión de enojo; y sólo cuando se encontraba con Inoue y Tatsuki, en mitad de camino a sus respectivos salones, era cuando su rostro se relajaba un poco. Orihime lo saludó tan enérgicamente como todos los días, rodeándole el cuello con sus brazos en un apretado abrazo y un tímido pico en los labios; mientras que Tatsuki sólo lo saludaba con una sonrisa de lado y un pequeño asentimiento. Y de ahí en más, seguían el camino juntos.
Orihime y Tatsuki eran dos de las pocas personas con las que Ichigo hablaba, dentro y fuera del instituto. Ambas eran amigas de él desde la infancia. A Tatsuki la conoció en el domo al que fue de pequeño mientras que a Inoue la conoció unos años más tarde en uno de los cumpleaños de la morena. De ahí en más, difícilmente esas dos se habían alejado de su lado.
En un principio y casi la mayor parte de su amistad, Ichigo había sido más apegado a Tatsuki. Sin embargo cuando los tres tenían 15 años, al regresar a sus casas después de clases, Inoue en lugar de despedirse de él con un beso en la mejilla como solía hacer, lo hizo con un corto y tímido beso en los labios. Aparentemente el no ver reacción negativa ante ese gesto, fue un incentivo para que ella lo tomara por costumbre y lo saludara de esa manera todos los demás días. Y luego no sólo le daba besos al despedirlo, sino en cada descuido del pelinaranja o cada momento que ella creía apropiado.
No supo en qué momento, y de hecho estaba seguro que nunca lo habían hablado realmente, pero eran pareja.
Ichigo la volteó a ver por el rabillo del ojo. Iba tomada de la mano de él mientras hablaba animadamente con Tatsuki de algo a lo que no le estaba prestando atención. Regresó la vista al frente. No le tenía el tipo de cariño que alguien le tendría a su novia. Sin embargo la quería. Y eso junto con una vieja promesa, eran suficientes razones para seguir junto a ella.
-Tatsuki, ¿es verdad que ingresó alguien nuevo en tu salón? -preguntó Orihime. cuando todo su grupo de amigos se sentó en círculo en la terraza durante la hora libre del almuerzo.
La chica aludida asintió y abrió la boca para decir algo más cuando fue interrumpida por un claramente excitado Keigo.
-Escuche que es bien bonita, ¿es cierto?
-Eso a ti no tiene porque importarte. Sea linda o no, jamás tendrás oportunidad con ella -susurró distraídamente, y al cabo de unos segundos: -Ni con nadie.
-Parece bastante agradable -acotó Ishida.
A lo que Arisawa asintió, estando de acuerdo con lo dicho, y agregó: -La habíamos invitado a almorzar con nosotros pero tenía que arreglar en dirección unos papeles sobre su transferencia.
-¿Tú hablando con otras personas de tu salón además de Tatsuki? -indagó Ichigo, mirando entre burlón y sorprendido al de anteojos.
-Aunque te sorprenda y a diferencia de ti, Kurosaki, mi vida social no se limita a sólo este grupo de personas -contestó, abriendo su caja de almuerzo, y sin dirigirle la vista -Y sí, con Tatsuki le hablamos porque la profesora mandó un trabajo de grupos de tres -se encogió de hombros -Ella quedó sola y a nosotros nos faltaba una.
El pelinaranja chasqueó la lengua, apartando la mirada hacia otro lado y dándole un sorbo a su cartón de jugo. Se recostó contra la reja que rodeaba la terraza, disponiéndose a ignorar al resto de sus amigos mientras recorría con sus ojos el campo de la escuela donde estaban los demás estudiantes. Frunció el ceño con leve curiosidad cuando le pareció distinguir en la distancia la diminuta figura de una chica escalando con agilidad uno de los árboles más grandes, desapareciendo rápidamente entre las enormes ramas.
Muchos de sus compañeros de clases no tardaron en salir por la puerta en el momento en que se escuchó resonar por todo el instituto el timbre que señalaba el fin de clases de ese día. Ichigo guardó lentamente sus cosas y esperó junto a la puerta del aula a que su novia terminara de alistarse para irse. Ella le dedicó una dulce sonrisa cuando se acercó a él y se dejó rodear los hombros por su brazo derecho, a lo que ella se acurrucó contra su pecho. Contenía su risa de felicidad al caminar en silencio y a su lado por los pasillos.
Ya llevaban un año y medio saliendo y había momentos en que aún le costaba creer que realmente estaban juntos.
Fue cuando doblaban en una esquina para tomar las escaleras, que la pelinaranja sintió algo impactar contra ella. Jadeó y cerró los ojos fuertemente por la sorpresa y por la sensación de estar cayéndose hacia atrás. Sin embargo, Ichigo llegó a sujetarla por los hombros para ayudarla a estabilizarse y evitarle el golpe. Le agradeció rápidamente y volteó a ver a su costado.
-¡Lo siento! -exclamó preocupada al ver a la joven en el piso sobándose la espalda baja, donde se había golpeado al caer al suelo -¿Estás bien?
-Inoue no deberías pedir disculpas, ella fue la que chocó contigo -murmuró por lo bajo Ichigo. Aparentemente no tan bajo como para que la aludida no lo escuchará ya que está inmediatamente alzó la mirada hacia él y lo observó enojada.
-Disculpame pero no lo hice a próposito -siseó, levántandose del piso; y estuvo apunto de responderle a Orihime cuando volvió a ser interrumpida por un susurro del Kurosaki.
-Igual fue tu culpa.
Frunció el ceño y abrió la boca para decirle algunas cosas sin embargo, se quedó callada al ver como lo golpeaban fuertemente en la cabeza desde atrás.
-Ichigo, esa no es forma de tratar a una chica -reclamó Arisawa -Sea culpa de ella o no, no importa. Se cayó. Deberías preocuparte por su bienestar.
-La verdad que cada vez me asombran más tu malos modales, Kurosaki -agregó reprobatoriamente Ishida, acomodándose los lentes.
El pelinaranja quiso contestarles algo, pero al intentar hacerlo, ninguna palabra salió de sus labios. Aunque no le gustase, tenían razón. Regresó la mirada a la pequeña morena y frunció el ceño al ver como ella le sonreía burlonamente.
-¡Por cierto! Ella es la nueva estudiante, Orihime -comentó Tatsuki, acercándose a su amiga y entrelazando sus brazos, quedando también junto a la nueva -Rukia, ellos son amigos de Ishida y míos, Orihime Inoue e Ichigo Kurosaki -señaló a cada uno respectivamente.
-Kuchiki Rukia -se presentó con una pequeña inclinación -Lamento mucho haber chocado de esa manera contigo, Inoue, iba distraída- se excusó.
-No te hagas problema, no es nada -refutó la pelinaranja, agitando las manos de lado a lado delante de su rostro, antes de sonreír grandemente- Y es un gusto conocerte, Rukia. Bienvenida a la escuela.
-El gusto es mío -respondió ella, correspondiéndole el gesto antes de borrar todo rastro de el al voltear a ver al Kurosaki -Aunque no puedo decir que sea un gusto conocerte a ti, zanahoria.
Ichigo escuchó como a su lado Uryu dejaba escapar una pequeña risa acompañada de un murmullo: "cada vez me cae mejor", y eso sólo lo molesto más.
-Coincido contigo, enana.
Levantó la mirada en el momento justo en que ella recogía los menús de los cuatro hombres en una mesa algo alejada a la de él, y pudo ver claramente como el que estaba sentado en la esquina derecha, junto a la que ella estaba parada, metía sin disimulo y con atrevimiento su mano bajo la falda de su uniforme, acariciando su pierna. Notó como se sobresaltaba y apartaba de un manotazo el brazo del hombre, sonriendo falsamente mientras decía algo ante lo cual, los cuatros sujetos se carcajearon.
Cuando se dio vuelta y sus miradas chocaron, bajó la vista al menú en sus manos y rió a algo que sus compañeros habían dicho. Fingiendo no haber visto lo sucedido.
Ese fue la primera de las tantas veces que vió algo como eso durante el tiempo que estuvo allí. Y en ninguna ocasión, hizo nada.
Hola! Primer fic. No sé bien qué decir.
Mi escritura es horrenda, lo sé y perdonen por eso, pero les prometo que haré todo lo que pueda por irla mejorando en cada capítulo.
Sé que Orihime es la novia de Ichigo ahora pero el fic será IchiRuki. Obviamente. Creo que más adelante, como mucho más adelante, habrá más parejas (ShiYori seguro).
No sé cuando subiré el segundo capítulo, supongo que apenas lo termine lo subiré pero andá a saber cuándo sucederá eso? Ni siquiera sé si subiré segundo. Depende de lo que ustedes opinen.
Cualquier opinión es más que bienvenida :)
Espero leernos en otro capítulo :D
~Louchette.
