Manos
Por Lovely Flower
Notas de la autora: Hola a todos de nuevo. Gracias a quienes se dieron el tiempo de dejar un review en el fic que subí hace un tiempito.
Esta historia se me ocurrió luego de entrar en la triste recta final de FMA. Hay spoilers de los últimos capítulos del manga y del segundo anime por lo que lean bajo su propio riesgo. Sé que la condición de Roy al final de la historia se revierte (saben a qué me refiero) pero para efectos del fic, lo he dejado aun con su discapacidad.
Para no variar, es un Royai… espero les guste. Una serie de drabbles con un tema en común…
Cariños a todas y todos los que pasen por aquí, dejen o no reviews. Y gracias por preocuparse por esta humilde escritora que tuvo un principio de año fatal pero ya se siente bastante mejor :)
La situación en la que había quedado Roy Mustang después del día prometido era, a ojos del resto, muy triste. Un hombre visionario, un líder al que le quitaron la capacidad de ver lo que su lucha había conseguido. Amestris se había vuelto un lugar pacífico y alegre y él nunca podría verlo con sus propios ojos.
Pero pese a lo que se podía creer, Roy estaba feliz e igual podía ver todo lo que acontecía a su alrededor…
La boda.
Fue dos meses después del día prometido cuando Roy Mustang y Riza Hawkeye unieron sus vidas en el sagrado vínculo del matrimonio. Una ceremonia maravillosa, con la presencia de los hermanos Elric, todos los militares del escuadrón de Mustang, hasta el desaparecido Havoc que viajó especialmente para molestar a Roy aquel día.
-Hasta que sucedió, ¿no, Coronel?- El rubio acomodó su silla de ruedas frente al pelinegro que estaba sentado en un pequeño sofá en el lugar en donde realizaban la recepción. –Es una lástima que no pueda ver a la teniente: se ve bellísima-
El aludido giró la cabeza y sonrió. –Lo sé, Riza está hermosa esta noche –Havoc lo miró confuso y al instante Roy siguió hablando –Soy ciego, no idiota. Riza siempre ha sido una mujer bella, hasta en uniforme militar… estoy seguro de que debe verse simplemente hermosa-
Havoc sonrío ruidosamente y le dio unos golpecitos en la espalda al Coronel. Había divisado a la rubia Teniente a lo lejos. –Creo que ya es hora de que te vayas con tu esposa, Coronel… de seguro debes ansiar esto-
El moreno cerró los ojos e inhaló profusamente. De inmediato supo en que dirección se encontraba la rubia y con seguridad casi impensable para un lisiado se acercó hasta ella. -¿Nos vamos?- preguntó mientras enlazaba su mano con la de la mujer.
-Sí, Roy, ya es hora de irnos al hotel. El chofer nos espera afuera-
Caminaron lentamente de la mano, entre los saludos y voces de todos sus invitados. Había sido un día maravilloso.
Tengo listos cuatro drabbles ya... espero subir pronto los que siguen. Gracias por leer :)
Nos vemos... les quiere, Lovely FLower
