Hola soy marisa... Antes que nada estoy feliz de comenzar este nuevo proyecto. Espero de todo corazón que les guste.
Soy nueva en el mundo de los jóvenes titanes y batman así que si algo está mal o eso no duden en decirme. Desde muy pequeña soy fiel admiradora de Robin y su mentor y padre batman. Así que me atreví a escribir este fic.
Quiero disculparme de una vez si ven algún horror de ortografía, pero hago todos estos escritos desde mi tableta y luego está cosa no me hace mucho caso que digamos.
Casi lo olvido... Los teen titans o todo relacionado con el mundo de dc cómics no me pertenece ( aunque me gustaría) con esto no ganó nada solo sus comentarios.
...
Corrían
No sólo su vida dependía de ello. Sino también la de dos criaturas inocentes que no tenían ni idea de lo que les esperaba si se quedaban ahí.
-Ya casi llegamos - dijo un hombre a su compañera que corría a la misma velocidad que el por los pasillos secretos de aquel castillo.
La mujer asintió, rogando a los dioses que llegarán a tiempo. Enloqueceria si algo les pasaba. Simplemente no lo soportaría. Se detuvieron al topar con una pared. El hombre tomó una antorcha y la bajo, haciendo que la pared se moviera y dejará ver una habitación muy grande y elegante. Rápidamente la mujer de unos 25 años de edad se dirigió a una cuna que estaba ahí y no puedo evitar sonreír y suspirar aliviada.
Ahí estaban... Sus dos pequeñas que tenían 3 días de nacidas estaban sanas y salvas. Dormían tranquilamente completamente ignorantes a la guerra que se estaba viviendo en esos momentos. Con cuidado de no despertarla, tomó a una de las bebés y acarició su cabeza.
-Dejame curar tus heridas.- le dijo el hombre al acercarse con su mano que resplandecía de un color verde. Esta se alejo inmediatamente.
-No... Solo dame un momento - dijo volviendo su mirada a la cuna y luego mirando a la recién nacida que descansaba en sus brazos.
-Estas herida...- noto como su acompañante luchaba por controlar las lágrimas. - Sabes que es lo correcto a mi también me duele... Pero es lo mejor - la mujer solo acostó de nuevo a la bebé y acto seguido se lanzó a los brazos de su compañero mientras sollozaba. Ambos vestían ropas elegantes pero esto no se notaba puesto que estaban desgarradas, manchadas de sangre. A pesar de estar heridos se veía que aún podían dar pelea.
-Lo se... - Dijo llorando abiertamente. - Solo espero que estén bien... ¿Ellas volverán a nosotros verdad?- dijo separándose. El solo junto su frente con la chica mientras una lágrima escapó de sus ojos.
-Te lo prometo... Ellas estarán bien.- en ese momento se escuchó mucho movimiento por los pasillos. Ambos se miraron y asintieron sin necesidad de hablar,tomaron cada quien a una de las pequeñas. El se quitó unos mechones de cabello de su frente y cerró los ojos concentrándose y al instante se abrió un portal, mientras que ella comenzó a hacer sellos con sus manos y alrededor de sus pies se formó un remolino de luz.
-Volveremos a luchar por nuestro pueblo... Si morimos este día... Al menos ellas estarán a salvo. -Dijo la chica antes de desaparecer. Seguida del hombre que parecía 5 años mayor que ella, parecía agotado por el esfuerzo de mantener el portal abierto, suspiro mirando su preciada carga y finalmente entró.
...
Era un día caluroso en Jump city,bueno más bien ya casi era noche, pero aún así se sentía un poco caluroso. Todo parecía normal y hasta en cierto punto aburrido para cierto líder titan puesto que no había sonado la alarma.
-Si no sucede algo pronto moriré de aburrimiento - dijo desesperado el pelinegro casi golpeandose la cabeza con la mesa.
-¿Pero no es bueno que la ciudad no esté en peligro Robin? -
-Bueno... Si Star... Es solo que... Me estoy aburriendo al no tener algo de acción.- logró decir ante la pregunta de su amiga pelirroja.
-Entonces ¿por que no te unes a la actividad de chico Bestia y Cybort? O mejor aún tal vez tu y yo podamos ir al centro de comercios en la ciudad.- propuso Starfire tratando de ayudar a su aburrido amigo. Robin pareció pensarlo un poco.
-No se star...- En ese momento la alarma se activo. -AL FIN UN POCO DE ACCION - prácticamente grito el líder. -TITANES AL ATAQUE -y todos salieron al escuchar el grito de guerra.
Al llegar se encontraron con nada más y nada menos que el doctor luz que se encontraba robando un banco. Este al ver que los jóvenes héroes llegaron comenzó a atacarlos con sus rayos de luz (ok eso sonó muy obvio pero bueno).
Los jóvenes héroes atacaban con todo lo que tenían. El doctor luz lanzó un rayo directo al líder titan pero este lo esquivo con facilidad. Pero el rayo dio directo a un edificio de departamentos.
No pasó mucho después del impacto del rayo que el edificio estalló en llamas. El villano aprovechó la explosión para salir huyendo con el botín, cosa que no paso desapercibida por el chico maravilla.
-TITANES vayan tras el. Yo me encargo de edificio. - Dijo antes de correr hacia la construcción en llamas, los titanes rápidamente se dedicaron a la persecución del ladrón.
Robin no perdió el tiempo, inmediatamente entró al edificio en llamas y comenzó a a sacar a los habitantes del edificio.
El calor era sofocante, sin contar el hecho que el clima que no ayudaba mucho. Había sacado a todos del edifico, pero no quiso Arriesgarse. Comenzó a subir las escaleras, esta crujian a cada paso que daba así que decidió apresurarse. El humo comenzó a entrar en su sistema, pero no estaba dispuesto a salir de ahí hasta estar seguro de que todos estaban a salvo, aunque tuviera que sacrificar su vida para cumplir con su misión. Sonrió un poco, eso sin duda lo había aprendido del gran y tenebroso batman.
De pronto un llanto se escuchó. Al parecer todavía quedaba un niño. Velozmente se dirigió hacia el llanto dando con el infante. Lo encontró en su habitación, vestía su pijama.
Lo tomo entre sus brazos y comenzó a buscar una forma de salir puesto que las llamas bloquearon la puerta. Escucho como el edificio estaba a punto de colapsar,casi sin pensar se lanzó por la ventana y con un gancho se columpio hasta llegar a un lugar seguro. Segundos después el edificio cayó.
-¿Estas bien? - Pregunto preocupado, tal vez el niño se había lastimado al lanzarse, pero el niño negó con la cabeza mientras tosia un poco.
Se dirigió a donde estaban los bomberos y las ambulancias que ayudaban a los afectados. Minutos más tarde un auto se estacionó y salió de él un señor de unos 40 años.
-JAKE!- grito al ver la pijama de su hijo negra por el incendio, lo tomo entre sus brazos mientras lloraba. Que cerca estuvo de perder a su hijo. -Gracias... Muchas gracias- le dijo al chico maravilla quien respondió que no era necesario.
-Robin hemos capturado al malo y llevado a prisión.. Nos dirigimos a la torre - se escuchó lla voz de Cybort por su comunicador.
-De acuerdo Cybort.. Allá los veo. - Y después de decir esto corto la comunicación. Se dirigió a su moto, pero en un callejón un poco alejado de donde estaban los policías, bomberos y demás noto algo extraño así que con cautela se dirigió.
Al llegar encontró a un hombre en muy mal estado, la sangre en sus ropas estaba seca y se veía agotado.
-¿Está bien? -Pregunto dispuesto a ayudar al hombre, este lo miro a los ojos por unos minutos antes de hablar. Con mucho esfuerzo el sujeto se puso de pie y camino tambaleante ante el joven héroe.
-Por favor... No rechases lo que estoy a punto de pedirte. - Dijo con voz cansada pero segura. -Te entrego lo más valioso e importante que tengo... En mi mundo no está seguro... Necesito que prometas que lo matendras a salvo. - dijo mientras le entregaba su preciada carga.
Los ojos de Robin se abrieron, aunque no se notará por el antifaz, de sorpresa al ver que era lo que le había entregado.
-No... Yo no puedo cuidarlo...- el petirrojo no podía ni hablar, pero el hombre le dedicó una sonrisa, con la esperanza de calmar un poco sus miedos.
-Se que es lo que piensa... Pero estoy más que seguro que no hay nadie más digno de su cuidado que tu...- suspiro un poco antes de continuar - he visto tu fortaleza y tu valentía y eso fue lo que se ganó mi confianza...- miro como Robin parecía muy seguro. - Al menos prometeme que estará en muy buenas manos. - Dijo casi al punto de las lágrimas. Robin noto esto y suspiro.
-Se lo prometo - dijo después de pensar unos minutos que para el extraño parecieron horas. - Le doy mi palabra que estará en buenas manos. - Esto decepcióno un poco al hombre porque parecía que el ex compañero de batman no se quedaría con su posesión más valiosa pero le tranquilizaba el que se aseguraría que estuviera a salvo.
Robin bajo su mirada al bulto que llevaba en sus brazos encontrándose con un rostro muy blanco y tranquilo, el bebé dormía, sin quererlo Robin sonrió. Alzó su mirada pero aquel sujeto ya no se encontraba en el lugar.
Regreso a la torre llevando con mucho cuidado, tratando de que el infante no despertará. Decidió dejar su motocicleta estacionada, pues le sería difícil manejar con el bebé en sus brazos.
Entró a la torre dónde estaban sus compañeros esperando su regreso.
-Amigo Robin que bueno que regresaste - exclamó feliz la joven tamaraneana al ver a su líder, notando la carga que llevaba en sus brazos -¿que llevas ahí?- señaló sus brazos.
El pelinegro solo suspiro antes de contestar. - Titanes... Creo que... Tenemos un bebé..- ninguno de los héroes supo que decir ante esto.
...
Aquí marisa. Este fue el primer capítulo de este fic. Espero que le haya gustado. No oviden dejar un review ya sea para felicitar o para darme un jalón de orejas por algún error.
Nos vemos en el próximo capítulo(claro si les gustó y quieren que lo continúe)..
Cuídense
Marisa
