Los personajes son propiedad de Thomas Astruc. No obstante, la trama es de mi autoría.
Furia enardecida
Capítulo 1
Adrien observo detenidamente a su amigo. Sus ojos que expresaban seriedad denotaban su intensa concentración en opinar profesionalmente. Debía ser de esa manera. Ese día era muy importante para Nino, su momento había llegado. Y si era así, también lo era para él. Por eso no había opción.
Tener el papel de un crítico, en ese momento, aunque fuera para dar un simple comentario, le era sumamente complicado. Lo veía como una responsabilidad muy grande; una tarea que debía realizarse lo más rápido posible, y con un proceso estrictamente meticuloso del trabajo. Aun así, se sintió algo aliviado, ya que no estaría solo en esto. Por suerte, media hora antes, se le había ocurrido llamarle a Marinette para que le ayude. Ella tenía un gran sentido de como verse bien, lo cual era natural para alguien que anhela ser diseñador de modas. Cuando la chica contesto y luego acepto su pedido, Adrien, de alguna manera se sintió salvado. Pero se estaba inquietando al darse cuenta que tardaba mucho en llegar.
El rubio miro a los cuatro costados disimuladamente, para que su amigo no se percatara de nada, pues él no estaba enterado de su plan. Era una sorpresa.
Encontró a Marinette tras las puertas del ascensor que comenzaban a abrirse con un suave chirrido. A pesar de que a los dos les separaba una gran distancia, pudo apreciarla con mucha claridad. Las comisuras de sus labios formaron una sonrisa. Pero esta desapareció rápidamente al notar a otra persona a su derecha, después de que el elevador abriera completamente. Los ojos se le abrieron levemente, por el asombro.
Durante unos segundos se quedó indeciso sin saber cómo reaccionar o que hacer en ese momento, preguntándose ¿Por qué estaba ahí, justamente ella, Alya? Pronto cayo en la cuenta de que Marinette y ella, la mayoría del tiempo andaban juntas. Debió anticiparlo. Era obvio. Ambas se hacían compañía casi siempre. Y seguramente, esta vez, la chica de ojos azules la invito para que viniera. En otras circunstancias no le hubiera importado verla, de hecho, también se hubiera alegrado. Sin embargo, la situación en la que se encontraba no se lo permitía. Su presencia solo logro alterarlo.
Necesitaba pensar en algo rápidamente. Miro a Nino de soslayo. Este estaba acomodándose su gorro en la cabeza. Adrien apretó fuertemente los labios. Su compañero no se había dado cuenta ellas. Eso estaba bien. Ahora él tendría que evitar que Nino y Alya se toparan el uno con el otro, pues no cabía duda de que ese suceso arruinaría todo. Al menos sabía que le quedaba una oportunidad más para solucionar las cosas, ya que no le dio todos los detalles a Marinette cuando hablaron mediante el celular y tampoco menciono a Nino.
⸺ ¿Qué haces Nino? ¿Por qué te cambiaste? ⸺el chico reclamo empujando al de lentes hacia los vestidores. ⸺ Aun no he dado mi opinión, así que vuelve a probarte la ropa o puedes ponerte otros diseños.
El de ojos verdes le lanzo variadas vestimentas al interior de las cortinas. Seguidamente se apresuró en ir hacia las adolescentes.
Marinette y Alya observaron el área del séptimo piso del edificio con perplejidad mientras caminaban lentamente. El ambiente de ese lugar les era muy diferente al que ellas estaban acostumbradas, incluso el aire se sintió extraño.
La de cabello oscuro no dejaba de apreciar las ropas que se pintaban en los mostradores. Las formas, los detalles, los diseños y los adornos de aquellos atuendos eran totalmente increíbles. Y reconoció algunos como los diseños de Gabriel Agreste, la persona que más admiraba en el mundo de las modas. Por otro lado, era el padre de Adrien.
El par se detuvo en una sección de ropas que venían en conjuntos. Se miraban muy originales y creativos. Y por esos detalles, Marinette no pudo impedir el quedar cautivada. Sus ojos centellaron de la emoción de estar ahí y tener la suerte para observar todas esas piezas de diferente modelo. Se sintió inspirada y quiso crear nuevos diseños propios, en su cuaderno de dibujos. Pero no era el momento, ni el lugar. Estaba muy lejos de su jardín secreto de trabajo. Y, de cualquier manera, aunque quisiera hacerlo no había llevado con ella su cuaderno, por lo tanto, no tenía materiales a su alcance.
Marinette alargo la mano hacia una de las prendas para tocarla. No obstante, cuando estuvo a unos centímetros de rosarla, una mano se cerró en su muñeca e inmediatamente percibió un moviente detrás de ella. Después, casi enseguida, otra mano le tapó la boca. La de ojos azules hizo ademan de querer soltarse y gritar, pero apenas empezó, y una voz ronca tuvo la dicha de adelantarse.
⸺No intentes resistirte. ⸺susurro cerca de su oído.
Por alguna extraña razón esa voz se le hizo ligeramente familiar. Quiso verle la cara, pero la tenía sujeta con fuerza que casi no podía mover su cuello para voltear. De pronto, él se movió arrastrando a la chica hacia otra sección de la planta. Y mientras eso sucedía, la de cabello oscuro pudo ver a Alya distraída grabando con su celular varias hileras de ropas y accesorios, algo lejos del punto en donde Marinette se había encontrado antes. Las otras personas también estaban en sus asuntos, así que no se percataron.
La muchacha noto que la llevaba lejos de la gente y el área de ropas. Su angustia aumento cuando escucho a ese sujeto empujar una puerta. Y al hacer eso provoco sin querer que su agarre perdiera consistencia y permitiera a Marinette removerse más libremente entre sus brazos. Consiguió empujarlo, así logro al fin soltarse de él. Pero aún estaba alterada y su cuerpo reacciono ante la situación. Giro hacia el hombre lanzándole una patada en el vientre automáticamente. A consecuencia de eso le fue posible ver al hombre, sin embargo, deseo no haberle mirado ni mucho menos haberse dado vuelta.
Sintió que el cuerpo se le paralizaba. No podía estar pasando eso, no podía ser cierto. Quiso que fuera mentira, que no sea real, sin embargo, lo estaba viendo con sus ojos. El rostro de Adrien con una mueca de dolor y su cuerpo cayendo hacia atrás estrellándose en el suelo. Marinette imploro en ese momento que la tierra se abriera y la tragara.
⸺ ¡Adrien! ⸺la chica chilló con un tono de arrepentimiento y preocupación, luego de que recobrara la compostura ante la situación⸺. Yo...yo lo lamento, Adrien. Nunca me hubiera imaginado que tú podrías ser la persona...
⸺ No te preocupes. Fue mi culpa después de todo. ⸺intentó tranquilizarla, levantando su torso del suelo. ⸺Hice mal al querer alejarte de Alya de esa manera. Sinceramente se vio como si tratara de secuestrarte, así que supongo que tu reacción fue normal. Pero no espere que me lanzaras una patada, mucho menos de esa forma.
``Tu golpe lo sentí con una gran fuerza, tanto, que vi por un momento, el aire irse de mis pulmones. ⸺prosiguió el muchacho mientras Marinette le ayudaba a ponerse de pie completamente⸺. Y eso fue increíble. Supongo que sabes defensa personal``
⸺ Eso no justifica que haya actuado tan imprudentemente. Por mi torpeza no me di cuenta que eras tú y me arrepiento profundamente de eso.
⸺ Claro que, si lo justifica, no sabías que era yo, pero no importa. Estuvo bien. Un secuestrador real no se hubiera detenido con un solo golpe. Debes golpearlo varias veces, y luego huir.
⸺ Bueno, pero por qué hiciste algo así⸺ inquirió ella apartándose de él.
⸺ No imagine, que traerías ha Alya contigo cuando te pedí que vinieras al edificio de tiendas comerciales y exhibición.
⸺ ¿Estuvo mal? ⸺se sorprendió la adolescente. ⸺No creí que te molestaras por eso, ya que ella también es tu amiga.
⸺ Es que solo te invite a ti. ⸺indico el rubio. ⸺Tal vez en otras circunstancias no me hubiera importado, pero el día de hoy su presencia no es buena. Interfiere con mi misión.
⸺ ¿Qué misión? ¿De qué hablas?
⸺ Nino se encuentra en este piso. Le persuadí para que viniera conmigo y comprara ropas de estas tiendas departamentales, a pesar de saber perfectamente que las cosas de este edificio tienen un precio muy alto.
⸺ Pero eso...espera estas diciendo que Nino quiere pedirle a Alya que sea su novia.
⸺ Exactamente ⸺concordó el joven rubio. ⸺Yo me ofrecí a pagarle la ropa que usara para ese momento crucial. Pues esta vez no fallare en ayudarle, como cuando quiso declararse contigo, y todo salió mal.
⸺ Ah..., pues sobre eso...yo...
⸺ Descuida, Marinette. Estoy consciente de que no tienes ningún interés en mi amigo. Por otro lado, resolví llamarte porque quiero que me ayudes a elegir el atuendo indicado que Nino usara esta noche.
⸺ ¡¿Esta noche?! ⸺la de ojos azules se exalto⸺ ¿Se lo dirá hoy? tan pronto.
⸺ Fue mi idea, pero él tomo la iniciativa. Además, Nino ya espero lo suficiente. Su momento ha llegado.
⸺ Creo...
Empezó Marinette, pero fue interrumpida por el sonido estruendoso de vidrios rompiéndose, seguidos de gritos aterrados. Adrien y ella se volvieron. Durante unos segundos se quedaron paralizados por lo que sus ojos veían, aquella escena parecía salida de una película de ciencia ficción. Era totalmente absurdo, las personas corrían a distintas direcciones perseguidas por bolas de fuego que amenazaban en estrellarse por el mínimo desliz que ellos cometieran. En menos de dos minutos el quinto nivel del edificio se mostró abordado por las llamaradas en todas partes. Y el pánico en la gente se hizo más intenso cuando trataron de escapar por las escaleras de emergencia, ya que el ascensor se había inhabilitado.
Adrien sabía que era primordial hacer algo con respecto a lo que estaba ocurriendo, pero sus piernas le temblaban. Los músculos de su cuerpo no le respondían. Se maldijo en ese instante, aún seguía impactado, más que eso, daba la impresión de estar asustado. El chico se sintió impotente e inútil. Era débil, siempre lo fue comparado con LadyBug. Ella era más valiente y su fortaleza era superior a la de él; a pesar de que ambos llevaban los antifaces de los héroes de parís, Chat Noir nunca pudo proteger a nadie por su cuenta, siempre le ayudaba su compañera. La mujer que amaba siempre lo salvaba y él no podía hacer nada por ella.
⸺ ¡Adrien! ⸺la voz alterada de su amiga lo saco de sus pensamientos tortuosos, pero no de su inoportuno letargo.
No fue capaz de volverse a Marinette, ya que sintió que alguien lo empujaba con fuerza hacia el lado izquierdo de la puerta del conserje, que se mostraba detrás de ambos muchachos.
Solo cuando cayó al suelo, el de ojos esmeralda fue capaz de sentir que sus articulaciones no le pesaban a plomo como antes. Había recuperado la movilidad. Su esporádica alegría se vino abajo cuando un golpe se percibió muy cerca de su persona y después se escuchó una explosión ensordecedora. El rubio movió la cabeza como un resorte buscando a la joven de cabello oscuro. La encontró con la mitad del cuerpo encima de él, a modo de protección. Su cabeza la tenía enterrada en su brazo izquierdo y el otro permanecía sobre la espalda de Adrien.
⸺ ¿Marinette? ⸺llamo el adolescente asustado y preocupado. ⸺Mari...Marinette ¿me escuchas?
El portador del miraculous del gato negro se incorporó alarmado y con el corazón estrujado al ver que la chica no respondía. La movió varias veces. Y aun así no daba señales de querer hacer ni un leve tic de estar consciente. El chico con lágrimas acumulándose en sus parpados miro hacia donde segundos antes había escuchado la explosión. Atónito, vio el cuarto de limpieza siendo consumido por el fuego. Movió la cabeza rápidamente para no volver a sucumbir ante el pánico irracional. Debía ser fuerte ahora, por Marinette y por él. Cargo a la chica en brazos, uniéndose después a la multitud que intentaba desesperadamente huir de ese terror que estaban viviendo.
Ya no aparecieron nuevas bolas de fuego, pero el Agreste supo que ya no era necesario para que el caos se hiciera más notorio. La sección de ropa era devorada por la insaceante escupida de fuego. Y muy probablemente la otra sección también tenía el mismo destino. Esa vista hizo que el modelo se acordara de Nino y Alya. Los buscos con la mirada en una, queriendo hallarlos, no importaba si estaban juntos. Pero no tuvo suerte. Deseo que ellos hubieran logrado bajar al primer nivel y conseguido salir. Esperaba eso, pues sentía que no tenía cabeza para preocuparse de más teniendo a Marinette desmayada. La verdad, su mayor preocupación en esos instantes era ella, no podía pensar en nada, aparte de salvarla. Después de todo la chica lo había protegido de la condenada bola de fuego que estuvo a punto de calcinarlo vivo. Ni siquiera se dio cuenta de que venía hacia él. Apretó los dientes de rabia.
Quiso desesperadamente que LadyBug apareciera pronto, solo ella y su amuleto de la suerte podían revertir todo el daño causado volviendo todo a la normalidad. De verdad lo anhelaba con todo su ser, pues creía rotundamente que el culpable era Papillon y su Akuma. El muchacho sabía que no le seria de ayuda durante un rato, así que tenía puestas sus esperanzas en que su compañera sería capaz de resistir sin él. Ya que no era la primera vez que salvaba a Paris sola. Ahora lo primordial para él, aunque sonara egoísta, era la vida de su amiga. Se impuso el deber y la obligación de sacarla del edificio que de seguro ya estaba en llamas por todos lados en los otros pisos.
Adrien consiguió bajar por las escaleras de Emergencia desde hace unos minutos atrás, con un grupo de gente loca que se empujaban entre sí, sin mencionar a las otras que se juntaban, pegándose detrás de él como moscas. Consecuentemente sufría de empujones constantes. Pero no le importaba. Solo esperaba que no tocaran a la chica. Además, la estaba protegiendo celosamente, y no permitiría que alguien se atreviera a rosarla siquiera. Nadie se acercaría a su princesa. Lamentablemente sus pensamientos parecieron no ser escuchados porque enseguida un hombre a su costado golpeo sin querer la cabeza de la adolescente, y Adrien no pudo evitarlo por más que quiso. La fuerza de ese tipo era mayor a la suya por ser adulto. El de ojos verdes se estrelló contra la pared. Eso lo irrito, y se enfureció más cuando se percató de que el cuerpo de su compañera se lastimo nuevamente, agregándole el hecho de que estuvo a punto de soltarla por la conmoción.
Apenas se había erguido para continuar su camino cuando otro empujón lo tomo por sorpresa. Para su suerte se encontraba cerca de la puerta que daba al tercer nivel del edificio. Y tuvo que apoyarse en ella para no caer. Molesto miro de soslayo a la persona que había sido la responsable de su oscilación, se trataba de una mujer, por su uniforme parecía una trabajadora del lugar. El modelo abrió la puerta y la cruzó de inmediato. Ya estaba harto de la gente alborotada; le era sumamente sofocante estar cerca de ellos, y aparte debía mantener a Marinette alejado de todos ellos. Por eso le pidió a Dios que aquel piso no estuviera repleto de fuego. Y así fue, al menos en parte; el fuego no era tan abrazador. Siquiera se podía caminar en espacios grandes, sin miedo a quemarse.
Adrien vio el ascensor muy cerca de donde se encontraba. Sentencio que debía avanzar a su dirección. Estando frente a las puertas metálicas bajo a la joven, recostando su espalda delicadamente en la pared; aquella que conectaba con la estructura mecánica. Agradeció que la gente de ese piso ya haya evacuado. No tendría obstáculos en su meta.
Si no hubiera estado tan nervioso y con la cabeza repleta de la idea de salir del establecimiento tan rápido como le sea posible, se habría dado cuenta del llanto de una niña asustada y escondida en algún punto de dicha área. Aunque no lo emitía con mucha fuerza, para una persona en sus cinco sentidos estables no se le hubiera dificultado notarlo en un segundo. Pero él no era el caso. Su corazón no solo le latía violentamente en el pecho, sino también en la cabeza.
Para Marinette fue diferente, la chica escucho los sollozos ni bien recobro el conocimiento. Aún con los ojos cerrados podía oír a la niña. Abrió los ojos lentamente al tiempo que comenzaba a respirar el humo que, de igual modo, empezó a cubrir todo el lugar. El fuego se había extendido demasiado, y ahora consumían cosas a las que antes no llegaban. La portadora del miraculous de LadyBug observo como dos de los florecientes de luz que se situaban en el techo se convertían en víctimas de una explosión al menor tacto con las llamas.
⸺¡Maldición! ⸺se exaspero Adrien al escuchar el suceso y luego voltear para mirar el daño que eso había provocado.
⸺Adrien ⸺la chica se levantó con brusquedad al recordar todo lo que había pasado, pero deseo no haber sido tan enérgica porque sintió hincones en su columna y parte de la cintura⸺. Debemos...
No termino la frase porque Adrien la abrazo cuando se volvió a ella, al escuchar su voz. La chica se petrifico por esa inesperada acción por parte del muchacho. Su cara se puso completamente roja, y los nervios que estaba aprendiendo a superar cuando se encontraba junto al rubio la inundaron ahogándola en un mar de pánico por no saber qué hacer o que decir. Sin embargo, cuando escucho de nuevo el llanto de la pequeña se obligó a sí misma, a tragarse la vergüenza y las ganas de desfallecer por estar rodeada de los brazos del hombre que amaba con toda su alma. Era un sueño, su sueño hecho realidad. Pero no podía perder el tiempo en permanecer así. Aquel día no era el indicado para que le ocurra eso. Debía actuar como la situación mandaba en esos momentos. Mirar todo seriamente, sin dejar que sus emociones la controlen. Ya había llegado el momento de ser la heroína de Paris a las que todas las personas afectadas por el incendio admiraban y depositaban sus esperanzas. No les fallaría. LadyBug arreglaría todo junto a Chat Noir. Solo deseaba que él ya estuviera ayudando a la gente que salía del edificio. Eso sería de gran ayuda para ella.
⸺Me alegra mucho que despertaras, Mari...⸺la adolescente con pesar y lamento tuvo que apartarlo cortando sus palabras.
El de mirada esmeralda la vio un poco sorprendido por la actitud de su acompañante. Pero su expresión cambio cuando percibió un destello de angustia en sus ojos azules. Algo andaba mal al margen del problema con el edificio, y ella sabía que era. Solo ahí, en ese preciso instante fue capaz de escuchar las quejas de la niña que ahora tocia por el humo que se había vuelto una neblina espesa y que opacaba la visión de la pareja.
⸺Tenemos que ir por ella. ⸺Marinette sin contemplaciones se dirigió hacia la capa de humo adentrándose en este en una.
⸺Espera...
Adrien la siguió preocupado y al mismo tiempo asombrado por el comportamiento de su amiga. Nunca la había contemplado actuando de esa manera, una forma tan segura y decida que por un momento le recordó a su Lady. Le pareció que se estaba ejerciendo como ella, pues sabía perfectamente cómo se miraba LadyBug, la conocía muy bien. Y ese conocimiento le permitía hacer la comparación. Pero termino por concluir que era una coincidencia. Ella y su Lady eran dos personas diferentes, al menos eso pensaba o eso quería creer. Con todo no dejaba de ser increíble la manera en que Marinette se mostraba ahí; su torpeza, inseguridad y tartamudeo parecían haberse esfumado como si jamás hubieran formado parte de ella. Y si por si lo eran, pues daba la sensación de que se avecinaba el florecimiento de una nueva flor. Una que en su interior le estaba otorgando la confianza y valentía necesaria para afrontar lo que estaban viviendo en carne propia. Aunque estaba un poco ido por eso, no pudo negar que le gusto ese lado de ella, su princesa se pintaba más segura de sí misma siendo él, Adrien. Y eso le gusto. Le encanto que no fuera tímida como siempre cada vez que el chico se presentaba como su verdadero yo ante su persona, ya que no era Chat Noir en ese momento para que Marinette se comportara de esa manera.
El adolescente se detuvo al escuchar las puertas del ascensor abrirse. Ladeo la cabeza y lo comprobó. Al final de cuentas esa cosa si funcionaba. Dentro de él se prendió algo, lo podía sentir claramente, el ardor en su estómago. No supo identificar cual era la causa, pero a la par con eso apareció el enojo. Podía escapar, su instinto le decía que fuera hacia ellas y entrara para irse…
Hola, después de tanto tiempo de no publicar una nueva historia, y es porque me aleje del rollo de escribir. Pero ahora vuelvo con esta idea nueva.
Quise probar el publicar esta historia por aquí. Solo por curiosidad de saber cuanta aceptación tiene. No pretendo continuarla por el momento.
Con todo, espero les guste esto.
